La fiscal Carolina Rosa Gadea imputó a un hombre por coacción sexual cuya víctima es su hijastra, una adolescente de 16 años y a su vez solicitó al Juzgado Penal de Garantías la prisión del imputado. De igual forma, se inició un proceso contra la madre de la víctima por supuesta violación del deber del cuidado o educación.
Ahora el Juzgado Penal de Garantías deberá admitir la imputación contra las dos personas y fijar la fecha para el desarrollo de la audiencia de imposición de medidas cautelares donde se definirá si ambos imputados estarán privados de libertad.
De acuerdo con la investigación, los hechos ocurrieron a inicios de abril pasado en un inmueble ubicado en el kilómetro 8 de la capital del Alto Paraná. En ese momento, el hombre quedó solo en la casa con la menor y presuntamente le hizo sentar en la cama para manifestarle sus intenciones de tener relaciones sexuales con ella. La menor se negó pero el sindicado trató de someterla a la fuerza.
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A pesar de sus esfuerzos por escapar, la adolescente habría sido alcanzada y llevada hasta la habitación, pero la menor comenzó a gritar desesperadamente. En ese momento, el padrastro desistió de su intención y huyó de la casa a bordo de su motocicleta.
Después de lo sucedido, la adolescente le contó a su madre, quien presumiblemente le dijo que no pasó nada, situación que molestó a la menor, quien decidió salir de su casa y refugiarse en la vivienda de su madrina, a quien le relató lo sucedido, y ella radicó la denuncia ante las autoridades.
Posteriormente, la víctima fue entrevistada por una profesional del Centro de Atención a Víctimas del Ministerio Público y relató detalladamente la coacción sexual sufrida. Por lo tanto, la fiscal Carolina Gadea imputó al presunto agresor y pidió su prisión preventiva, mientras que para la madre solicitó la aplicación de medidas alternativas a la prisión.
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