El fiscal Julio Ortiz imputó a Óscar Caballero Sahlmann por homicidio doloso, hurto especialmente grave y robo con resultado de muerte tras ser el principal sospechoso de asesinar al exviceministro y exfiscal Javier Ibarra, hecho ocurrido entre el 24 y 25 de noviembre del año pasado.
El Ministerio Público solicitó la prisión preventiva de Caballero Salhmann y ahora el imputado deberá comparecer ante el juez penal de Garantías de San Lorenzo para la audiencia de imposición de medidas cautelares donde se definirá si el imputado será trasladado hasta un centro penitenciario de nuestro país.
Caballero Salhmann fue detenido durante un allanamiento realizado en su vivienda en Zeballos Cué, Asunción. Los investigadores cuentan con elementos que indicarían la supuesta comisión de los hechos punibles de homicidio doloso, robo con resultado de muerte y hurto especialmente grave.
Por su parte el fiscal Julio Ortiz manifestó: “Leonardo Ruiz Ortiz es el testigo principal, es el que conducía la motocicleta, gracias a su testimonio hemos llegado hasta Óscar Caballero, quien era un ex empleado del señor Javier Ibarra”.
Agrego que Caballero era el que hacía los mandados, llevaba a los hijos de Ibarra al colegio o hasta la casa de la exesposa del exfiscal o en cualquier otro lugar, lavaba los vehículos; es decir, era una persona de extrema confianza del señor Ibarra, indicó el fiscal.
Acotó que “esta es la persona que tenemos bajo sospecha de cometer este homicidio doloso como así también transportó el arma de fuego, la riñonera de la víctima y otros objetos que desconocemos su contenido, pero había documentos que habría prendido fuego, en presencia de Leonardo Ruiz quien refirió que fue frente a la casa de Óscar Caballero, frente a una casa abandonada, debajo de un limonero”.
Ortiz expresó además que, de acuerdo a lo manifestado por el testigo, ocurrió en su presencia la quema de los documentos posiblemente pertenecientes a Ibarra. “El señor Caballero quemó estos documentos aparentemente frente a su domicilio, en una casa abandonada”. Y que el fuego habría quemado un limonero y, según él, esta quemazón todavía se puede divisar y por ende ya solicitamos a la Policía que coteje el lugar para corroborar esta declaración”.
Asimismo, el fiscal señalo que “el arma le dio en una especie de maletín que contenía cartuchos y le pidió para que guarde, posteriormente abrió en su domicilio y se dio cuenta que era un arma y a partir de allí, Ruiz Ortiz tuvo miedo, no sabía qué hacer”.
En ese sentido, Ortiz refirió que Caballero le dio la suma de G. 100.000 cuando se volvieron a encontrar en la zona de la avenida Mariscal López esquina Ingavi, lugar que llegó con su moto descompuesta y siendo auxiliado por un delivery que le escoltó”. En ese lugar, Óscar Caballero le entrega el dinero para que cargue combustible y para que arregle su moto. Luego Óscar abordó un taxi y se desplaza hasta su domicilio nuevamente”.
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