La Justicia una vez más estará en el ojo de la tormenta debido a que tendrá a su cargo analizar si existe libertad de expresión en nuestro país, atendiendo a que el próximo 22 de julio se debe iniciar un juicio oral contra el comunicador de Nación Media Carlos Giménez, quien en su momento con base en documentos a los que accedió inició una serie de publicaciones periodísticas sobre presuntas irregularidades en la administración de la Asociación de Padres de la Orquesta de Cateura y a raíz de la citada publicación el Ministerio Público inició en su momento una investigación penal.

Uno de los integrantes de la Asociación de Padres Orquesta de Cateura, Juan Antonio Rojas Cantero, querelló a Giménez por difamación, calumnia e injuria por sentirse agraviado por las publicaciones que en su momento desnudaron presuntas irregularidades en el manejo financiero de parte de tres miembros de la Orquesta de Cateura sobre los presuntos hechos punibles de lesión de confianza, malversación, apropiación, estafa, producción de documentos no auténticos, entre otros, que el propio Ministerio Público llegó a investigar.

El presente juicio oral se tendrá que desarrollar ante la jueza de Sentencia Olga Ruiz González, quien tendrá que evaluar punto por punto la querella presentada y si dicha acción judicial tiene como objetivo cercenar el trabajo de la prensa, tratando de impedir que se sigan denunciando hechos de irregularidad en otros casos.

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El periodista Carlos Giménez, que venía de la cobertura de la crisis en Autores Paraguayos Asociados (APA), fue encomendado por el diario La Nación a seguir este caso también polémico debido a la fama internacional del proyecto, y su labor investigativa resultó en más de una docena de publicaciones en el 2017, basadas en documentos de la carpeta fiscal, la contabilidad de Armonía de Cateura, informes de instituciones públicas y organizaciones privadas, así como en testimonios verificados, que fueron expuestos en plataformas digitales.

“Desde la primera publicación en el diario La Nación comenzó un severo y sistemático hostigamiento desde el entorno de la Orquesta de Cateura, que se extendió durante 5 años mediante diversos insultos, mentiras y calumnias en redes, solo por preguntar acerca del manejo financiero de Favio Chávez”, afirmó Giménez, que fue registrando esta persecución a su labor a través de un álbum que supera las mil capturas de pantalla.

Expresiones como seudoperiodista, idiota, cretino, bufón, inútil, mentiroso, payaso, fracaso, farsante, manipulador, sin ética, boicoteador, hasta las injurias “perro de Szarán” y “acosador de mujeres”, figuran en la lista de insultos que presuntamente manifestó Rojas en redes contra el comunicador, junto con otras personas que estarían vinculadas a la orquesta, además de algunas cuentas falsas.

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En su carácter de presidente de la Aso Orquesta de Cateura, Juan Rojas Cantero tomó quince publicaciones de Giménez del 2020 en Twitter y Facebook en que pedía respuesta a su cuestionario, que el político calificó como supuesta “difamación” a su persona y querelló al periodista exigiendo que sea penado con prisión, el pago de una multa de 55 millones de guaraníes, así como que se hiciera cargo de los honorarios de sus abogados, Bernardo Sánchez y Cinthya L. Cabrera M., y los gastos del juicio.

Además, dos de sus testigos, Laura Azcona y Carmen Cabrera, aparecen como tesorera y protesorera de dicha asociación. También testificarán contra el periodista Carlos Bogarín, Hugo González y Domingo Martín Carlomagno Martínez, de los cuales uno sería aparentemente músico de la orquesta.

Días atrás, Juan Rojas Cantero y Favio Chávez, junto con el abogado Antonio Morínigo, se acercaron a La Nación con su versión de la querella, sosteniendo que acusan al periodista por sus dichos en redes sociales en carácter personal. “Ninguno de los elementos por los cuales he iniciado la querella por difamación, calumnia e injuria a Carlos Giménez corresponde a publicación que se haya difundido a través de ese medio de comunicación u otro como resultado de una investigación periodística”, expresa parte del documento que entregaron.

Agrega que Giménez lo ha “acusado de haber cometido hechos punibles como apropiación, reducción, hurto y en los que me ha señalado de estar acusado de corrupción, sin señalar por quién o por qué entidad estaría acusado”, sigue el escrito. Sostiene que las acusaciones son falsas y que le causaron daño en su carácter de funcionario público, “un enorme y significativo agravio, amén de otros perjuicios en lo personal, en lo social y profesional”. Explica que esas publicaciones fueron hechas desde los perfiles de redes sociales de Giménez. Indicó que esas son las causales de la querella y no constituye un amedrentamiento por una supuesta investigación hecha por el periodista.

Con relación a la supuesta falta de balances, memorias, auditorías y rendiciones de cuenta, en el documento indica que estos fueron presentados en el marco de una reunión abierta a la comunidad y que fue publicitado incluso por los medios de comunicación en junio del 2018. Asimismo, el documento indica que Giménez intervino en otras publicaciones de otros medios y otros periodistas y las hechas en otros países, incluso con traducciones en suajili (idioma africano) y en alemán.

Por su parte, Morínigo, asesor jurídico de la entidad, admitió que en algún momento se realizó una investigación periodística, pero que la denuncia nada tiene que ver con ese trabajo. “Las cuestiones personales son absolutamente independientes de las investigaciones periodísticas que se han realizado. Lo que busca con esto es confundir al lector”, señaló.

Asimismo, Favio Chávez dijo que se debe separar la orquesta de Juan Rojas Cantero, puesto que este último es el titular de la asociación de padres. “No queremos más que confunda a la gente. Sabemos para quién trabaja”, dijo. Por otro lado, Morínigo aseguró que Giménez tuvo muchas oportunidades de conciliar, pero que no se presentó a ninguna de las instancias y ahora debe enfrentar el juicio oral y público previsto para el 22 de julio próximo.