Hoy viernes se inició el juicio oral y público de Matías Raúl Bilbao Fassardi, acusado del asesinato de Olga Feliciangeli, hermana de la periodista Mina Feliciangeli, se realizó de forma telemática por considerar al acusado de alta peligrosidad. La periodista revivió el dolor por la muerte de su hermana tras el reciente asesinato del fiscal Marcelo Pecci y pidió máxima condena a los criminales.

“No hay condena de muerte para los delincuentes, pero ellos sí le condenaron a muerte a mi hermana. Por eso pedimos cadena perpetua todos los familiares de Olga Feliciangeli porque nunca más le vamos a recuperar. Entonces, tenemos que ser conscientes y pedir todos juntos que se haga justicia y ojalá esto sirva, ya no para recuperar la vida de nuestros seres queridos o familias, sino para que ya no se sufra la misma pérdida”, señaló a los medios de comunicación, previo al juicio.

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En este sentido, la familia Feliciangeli pide a las autoridades que se haga justicia no solo por la señora Olga, quien fue torturada y posteriormente asesinada, sino para que la sociedad no vuelva a sufrir las consecuencias de la inseguridad reinante en el país. Exigió a las autoridades que este caso quede como precedente de castigo para los asesinos, que no solo matan a una persona en cuestión, sino con ella matan el futuro y la tranquilidad de miles de familias.

“La impunidad siempre recrea el mismo delito y el mismo crimen. Estamos de nuevo reviviendo ese dolor, ese momento que en realidad lo revivimos diariamente, cuando suceden muertes de forma violenta, siento empatía ante los casos sucedidos y ojalá se haga justicia”, insistió la comunicadora.

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El tribunal de sentencia de la audiencia oral estuvo integrado por los jueces María Luz Martínez, Elio Ovelar y Darío Báez. Mientras que la representante del Ministerio Público es Claudia Aguilera, quien ratificó la acusación y ofreció varios elementos de prueba para que se pueda llegar a una condena ejemplar en el presente proceso penal. Mientras que el abogado José Almada, de la familia de la víctima, pide la pena máxima de 40 años de cárcel, es decir, 30 años por el terrible crimen y 10 años como medida de seguridad por la peligrosidad del acusado.

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