El reclamo por atención a la fibrosis quística sigue su largo peregrinar. Lorenzo Melgarejo López, residente en Ciudad del Este y padre de tres adolescentes con ese padecimiento, se encadenó esta mañana frente al Palacio de Justicia de Asunción para exigir a la Corte Suprema la resolución a un amparo judicial.

El expediente está paralizado hace casi tres años y es para que el Instituto de Previsión Social compre y provea medicamentos a los que padecen de dicha afección. El amparo fue promovido en agosto del 2019, pasó por varias instancias con resultados favorables en primera y segunda instancia hasta que llegó a la Corte Suprema de Justicia.

“El amparo judicial se encuentra prácticamente encajonado en la Corte Suprema y estoy convencido de que si no hago esto no van a atender mi reclamo”, dijo Lorenzo Melgarejo. El argumento del IPS es la no disponibilidad en el mercado de los medicamentos requeridos.

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El padre cuestiona que “una figura jurídica que debía ser rápida y garantizar el derecho a la salud de nuestros niños, la Corte Suprema permita que mi expediente esté encajonado por casi tres años”. El hombre encadenado frente al Palacio de Justicia espera que el amparo sea resuelto y permita que el IPS compre los medicamentos porque el resultado hará la diferencia entre la vida y la muerte.

Salud Pública dejó de lado la patología

Lorenzo Melgarejo cuestionó también que el Ministerio de Salud Pública haya centrado su atención solo en el COVID-19, ignorando la realidad de personas que padecen otras patologías delicadas como la fibrosis quística, una enfermedad grave que afecta los pulmones y también puede causar la muerte si no hay tratamiento.

“La fibrosis quística es una enfermedad que mata de la misma forma que el COVID; hay un medicamento que nos puede salvar la vida y nos están negando”, reclamó. Ese medicamento es el Ivacafptor en comprimido y por cada paciente se gastarían unos 30 millones de guaraníes.

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