El exprocurador general de la República y actual apoderado del vicepresidente Hugo Velázquez, Sergio Coscia, tiene la intención de dilatar su proceso penal por lesión de confianza, en el marco de la investigación por las irregularidades en la adjudicación de los juegos de azar y la legalización de tragamonedas, al contratar a los abogados Enrique Kronawetter y Federico Huttemann. Los citados profesionales del derecho son hábiles para poder dilatar los procesos penales.
Asimismo, el actual titular de la Conajzar, José Antonio Ortiz Báez, también imputado por lesión de confianza, y la directora de la Diben, Carmen Alonso, no se quedaron atrás y contrataron los servicios del abogado Andrés Casati, quien es conocido por recurrir a chicanas a los efectos de trabar los procesos penales. Un claro ejemplo es el proceso del clan Ferreira por contrabando, donde Casati fue defensor de Justo Ferreira y en otro caso de Patricia Ferreira.
Mientras el imputado Raúl Silva contrató a los profesionales del derecho Rodrigo Yódice, conocido por sus nexos con el diario Abc Color debido a que es defensor de la querellada Natalia Zuccolillo y Arturo Daniel.
Avaló demanda contra el Estado
El exprocurador general de la República Sergio Coscia, actual apoderado del vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, avaló no poniendo ningún reparo a una condena multimillonaria contra el Estado paraguayo cuando ocupaba el cargo de procurador general de la República. El monto que se deberá abonar es de G. 2.640 millones.