Ciudad del Este. Agencia Regional.
La familia de Raquel Miranda, la mujer que quedó paraplégica tras una cesárea en el Sanatorio Central de Ciudad del Este, emitió un comunicado está mañana en el que advierten sobre maniobras que estarían haciendo las dos médicas condenadas en el proceso judicial para que sean anuladas las sentencias.
Se trata de la ginecóloga Rossana Nikonchuk Chixhik y la pediatra Gricelda Efith Sánchez, condenadas por mala praxis en un juicio a cargo de la jueza Flavia Recalde.
“Las médicas que han sido condenadas como responsables de negligencia, mediante sentencia definitiva número 22 en julio pasado, a toda costa pretenden anular las penas, apoyadas por los gremios médicos, recurriendo a presiones e influencias dentro del Poder Judicial para buscar anular la condena y ocasionar la acostumbrada impunidad en los casos de negligencia médica”, dice parte del comunicado emitido, y que está firmado por Reinaldo Miranda, padre; Antonia Alcaraz, madre y; Edilberto Miranda, hermano de la víctima.
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En el comunicado indican también que, lo más grave del caso es que tuvieron conocimiento de que “se ha maniobrando para direccionar el expediente hacia un Tribunal de Apelaciones, Primera Sala, donde uno de los integrantes sería amigo complaciente con los médicos de la región”.
Antecedentes
El hecho que tuvo condena en Ciudad del Este ocurrió en enero de 2020. La víctima, Librada Raquel Miranda Alcaraz, tenía 29 años cuando acudió al sanatorio para tener a su hijo y durante la cesárea se complicó el cuadro y quedó en estado vegetativo.
El niño nació bien, pero estando expuesto a la estufa a falta de una incubadora en el sanatorio y un mal cuidado, resultó con quemaduras en parte de su cuerpo. Por este hecho es que la pediatra fue condenada por omisión a impropia a seis meses de prisión con suspensión a prueba y el pago de 11 millones de guaraníes.
Por su parte, Nikonchuk fue condenada por lesión culposa a un año de pena, también con suspensión a prueba y el pago de 150 millones de guaraníes.
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