El juez penal de garantías Raúl Florentín ratificó la prisión preventiva de Valentín Domínguez, conocido como el abogado “leopardo”, imputado por detentación, producción de riesgos comunes y resistencia. La resolución se dio a conocer luego de la audiencia de revisión llevada a cabo en Palacio de Justicia. El profesional del derecho seguirá preso en el Departamento de Investigación de Delitos de la Policía Nacional por 10 días más.
Asimismo el citado magistrado confirmó la prisión de los imputados Matías Emanuel Ojeda y Alfredo Fabián Cubilla, quienes seguirán privados de libertad. Ahora la defensa de los imputados tienen la posibilidad de poder apelar el fallo judicial y en caso de ser así será un tribunal de apelación quien deberá definir si confirma la presente resolución judicial.
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Intervención policial
Ante los disparos, los agentes policiales del Grupo Lince, acompañados del personal del Departamento de Investigación de Homicidios de la Policía Nacional, llegaron al sitio en respuesta a una denuncia. En ese momento habrían divisado a las cinco personas, quienes estaban sentadas en la calle, consumiendo bebidas alcohólicas, munidas de armas de fuego, algunas de ellas cargadas y preparadas para percutir.
Domínguez habría tenido bajo su dominio un fusil M4 de la marca Colt, calibre 5.56 serie Nº 985AC91, de color negro, automático, con un cargador de plástico, con 18 cartuchos 5.56 sin percutir. En tanto que Pérez Agüero habría portado un revólver de la marca Rubi, calibre 38 mm, serie Nº 2152, lustre niquelado con mango de madera; Ojeda Saldívar poseía un revólver de la marca Doberman, calibre 22 largo, serie Nº 00260U con 10 cartuchos sin percutir.
Por su parte, Francia Bernal tenía en posesión una pistola HS, calibre 9mm, serie Nº BY912632, bicolor, procedencia croata, en acción conjunta con Alfredo Fabián Cubilla Martínez, todos ellos bajo dominio de la situación relatada, que implicaba la disponibilidad grupal y consensuada de arma de fuego.
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Al percatarse de la presencia policial, intentaron agredir a los agentes, inclusive con las armas citadas, listas para ser percutidas. Específicamente, Domínguez habría intentado alcanzar el fusil M4 que se encontraba a pocos metros de distancia para utilizarla contra los intervinientes.
A su vez, Francia Bernal, quien tenía la pistola HS, habría apuntado con el arma a los agentes policiales intervinientes, cuya acción fue abortada por la superioridad numérica de los funcionarios de la fuerza pública, quienes pidieron apoyo de otras unidades.