En el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) de Encarnación se realizó un procedimiento en el que se incautaron dos celulares, cinco chips, anotaciones con números telefónicos y dos espadines de fabricación casera. La investigación se generó a raíz de que se tiene la sospecha de que desde la celda N° 25 del Pabellón B se realizaron llamadas extorsivas. El caso pudo ser descubierto tras un trabajo de inteligencia de los agentes penitenciarios.
Los internos que se encontraban en la mencionada celda fueron identificados como César Arma Servián y Diego Fabián Armoa, ambos procesados por tenencia sin autorización de estupefacientes.
El procedimiento, que se realizó sin ningún tipo de inconvenientes, fue encabezado por el director general de Establecimientos Penitenciarios, Antonio Bazán, y contó con el acompañamiento del delegado de zona, Ricardo Núñez, y del director del Cereso, Sixto Peralta.
“Encontramos evidencias de que desde este lugar se habrían realizado llamadas extorsivas, ya veníamos manejando cierta información a través de inteligencia penitenciaria y hoy mediante un trabajo coordinado con el Departamento de Antisecuestro de la Policía Nacional, agentes penitenciarios de turno y la jefatura de seguridad procedimos a la incautación de celulares y anotaciones que serán entregados a la Fiscalía para la investigación correspondiente”, afirmó el director general de Establecimientos Penitenciarios, Antonio Bazán.