El juez de Delitos Económicos Humberto Otazú fijó para el próximo 18 de mayo, a las 9:00, la audiencia preliminar para Justo Ferreira y su hija Patricia Ferreira, accionista y presidenta de la firma Imedic SA, acusados de contrabando, asociación criminal y producción de documentos no auténticos por la compra fallida de insumos médicos para el Ministerio de Salud durante la pandemia en el 2020.
El magistrado tomó la determinación de fijar la diligencia judicial debido a que se destrabó el presente caso, por lo que en la fecha mencionada se decidirá si padre e hija estarán sentados en el banquillo de los acusados.
Otazú convocó también para el mismo día que Justo Ferreira y su hija a los acusados Carlos Alberto Gamarra, aduanero, y a los funcionarios de Aduanas Guillermo Molinas y Gustavo Adolfo Acosta, quienes están procesados por presunta complicidad en el hecho investigado. Además, se deberá estudiar el pedido de sobreseimiento definitivo de Lauri Marcio Pool y Mario Joel Olmedo solicitado por el Ministerio Público.
La causa guarda relación con la compra de 400 camas hospitalarias manuales y 50 camas hospitalarias eléctricas que no contaban con la autorización técnica de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria (Dinavisa) del Ministerio de Salud Pública.
Te puede interesar: Juicio oral a OGD y su hijo está en etapa de producción de pruebas documentales
JEM
El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) enjuició al fiscal de la Unidad Anticorrupción, Osmar Legal, por supuesto mal desempeño en sus funciones por no haber apelado la resolución del juez que había otorgado el arresto domiciliario a Ferreira y su hija.
Tentativa de estafa
El Ministerio Público sigue cajoneando la denuncia contra el clan Ferreira por supuesta tentativa de estafa en el caso donde se investiga a Imedic SA y Eurotec por intentar vender insumos médicos de dudosa procedencia al Ministerio de Salud, que tenía que abonar la suma de G. 86 mil millones por los productos cuando estos no eran para uso médico. En el presente caso existen varios informes que comprobarían el hecho irregular, pero los fiscales retrasan sin argumentos imputar a Justo Ferreira y a sus hijos.