Javier Pereira Rieve, gobernador de Itapúa, pasó de ser dueño de un terrenito a convertirse en un potentado empresario. Los activos del funcionario público aumentaron en más de 1.000 % desde que se inició como un modesto concejal municipal. Mientras avanzaba en sus cargos, también crecían sus inversiones en las empresas familiares.
- Unidad de Investigación
- Nación Media
De modesto concejal municipal de Cambyretá, al gobernador de Itapúa propietario de numerosos inmuebles. Francisco Javier Pereira Rieve experimentó un millonario crecimiento desde que ocupa cargos públicos en el departamento de Itapúa. Inició siendo dueño de “apenas” un terrenito, a ser propietario de casi una veintena de inmuebles. Sus activos incrementaron en un 1.060 %. Al menos es lo que se evidencia en las declaraciones juradas de bienes y renta (DD. JJ.) presentadas por el actual gobernador del séptimo departamento.
Según consta en la web de la Contraloría General de la República (CGR), Pereira Rieve presentó su primera manifestación de bienes en 2003, cuando ocupaba el cargo de concejal municipal en Cambyretá, distrito vecino a Encarnación.
En ese entonces, Pereira declaró una remuneración mensual de G. 498.000 como miembro del legislativo municipal. En ese entonces, dijo tener G. 10 millones en efectivo y otros G. 2 millones depositados.
El entonces concejal municipal dijo poseer un solo inmueble tasado en G. 12 millones, además de una camioneta valorada en G. 125 millones. A ellos había que agregar muebles por G. 30 millones y mercaderías para ventas por G. 450 millones, incluidos equipos de casa, pesca y camping. Sus activos totales eran de G. 629 millones.
Para 2011, la situación económica de Pereira ya había mejorado sustancialmente. El entonces intendente declaró G. 150 millones en dos cuentas bancarias, ocho inmuebles tasados en total en G. 995 millones y tres camionetas, incluida una de último modelo, por un total de G. 304 millones.
Ya entonces había dado sus primeros pasos como ganadero, con unas cinco cabezas de vacunos, además de muebles y equipos de oficina por G. 75 millones. A todo lo anterior, le sumó mercaderías para la venta por G. 989 millones.
Sus activos habían ascendido ya a G. 2.373 millones. Sus activos habían aumentado ya en un 278 %.
UN ACOMODADO GOBERNADOR
En 2018, Pereira declaró un excelente pasar económico. Seguía como intendente de Cambyretá y tenía G. 110 millones en las mismas dos cuentas bancarias declaradas con anterioridad.
Para ese entonces, ya tenía un total de 13 inmuebles tasados en G. 2.365 millones, dos camionetas tasadas en G. 430 millones, un buque de G. 40 millones y ganado vacuno por G. 20 millones. Además, mobiliarios y equipos de oficina por G. 100 millones.
Para ese entonces, declaró acciones por G. 2.400 millones en Casa San Javier, una empresa de venta de equipos de casa y pesca ubicada en Encarnación; además de otros G. 350 millones en una unipersonal con su propio nombre.
Sus activos alcanzaban ya entonces G. 5.815 millones, habiendo crecido en un 145 %.
Cuando llegó a la Gobernación de Itapúa, ya en 2023, Pereira seguía experimentando crecimientos millonarios. Dijo tener G. 38 millones en efectivos y una cuenta bancaria de G. 50 millones.
Había vuelto a crecer como dueño de inmuebles. Ya tenía un total de 15 propiedades para agosto de 2023, tasadas en G. 3.195 millones. Declaró una camioneta tasada en G. 350 millones, además de un buque en G. 40 millones.
Sus mobiliarios y equipos de oficina alcanzaron ya los G. 150 millones. Sus acciones en Casa San Javier habían trepado a G. 2.810 millones y en su unipersonal ascendieron a G. 616 millones.
Sus activos alcanzaron G. 7.299 millones para agosto de 2023, habiendo aumentado en más de G. 1.400 millones.
Comparando las declaraciones juradas de Pereira, desde sus inicios como concejal municipal hasta que llegó a la Gobernación de Itapúa, sus activos incrementaron en más de G. 6.670 millones, lo que representó un crecimiento de 1.060 %.