Defelippe y su esposa Soledad Núñez, conocidos como el “clan Núñez-Defelippe”, están vinculados a una extensa red de oenegés que usan al Estado y diversos proyectos públicos para financiarse.
- Por Rossana Escobar M.
- rossana.escobar@nacionmedia.com
Tras publicaciones de nuestro medio sobre la generosa adjudicación de la Municipalidad de Asunción a la ONG Museo de Ciencias (MUCI), en la que, según documentos oficiales a los que hemos accedido, nuevamente aparece como fundador el zar de las oenegés en Paraguay, Bruno Defelippe, el presidente del consejo de administración, David (Daved) Wallace Peery, se comunicó para precisar que el aludido ya no forma parte de la organización. Peery explicó que en el inicio Defelippe se perfilaba como cofundador. “Pero le sacamos cuando firmamos los papeles de incorporación de la fundación”, subrayó. Al ser insistido por qué sacaron a Defelippe, el presidente de MUCI respondió: “Nos separamos cuando decidió entrar en la política. Yo no quería politizar nuestro proyecto en ninguna manera”.
Si bien Peery mencionó que “Sole y Bruno no tienen nada que ver”, los papeles como los lobbies en el gobierno anterior cuentan otra cosa. Defelippe junto con el ciudadano americano figuran como fundadores en la escritura de constitución de MUCI. Así también, el mismo Peery dijo en su mensaje que “en 2020-2021 me ayudaron a organizar reuniones con autoridades diferentes para compartir mi visión del proyecto, y cuando entraron en la política nos separamos porque no quería tener problemas con nadie”.
INTERMEDIARIOS
Lo mencionado por Peery deja entrever el estatus de intermediación política de la pareja de oenegeístas bajo el caparazón de representantes de la sociedad civil con el membrete de oenegés. Estos nexos tornan inevitables el uso de este tipo de organizaciones para fines políticos con el agravante de que el manejo de los recursos se hace en la oscuridad y una fuerte resistencia a la transparencia.
Recordemos que Núñez como Defelippe fueron candidatos a cargos públicos. La mujer se postuló a la Vicepresidencia de la República y el marido para senador, siendo el principal discurso de campaña el apoyo a los emprendedores que precisamente estaban articulados por sus oenegés.
“Soy persona particular y el proyecto es para todos los paraguayos. Nos apoyan tanto colorados como liberales y la mayoría de los que nos apoyan ni conozco sus partidos. Pero el dinero viene de mi familia por amor al país. Será un proyecto de gran impacto positivo para el país y ojalá no vayan creando dudas innecesarias entre el público. Nuestro proyecto requiere apoyo de las autoridades y esto nos está perjudicando. Te invito a conocer lo que estamos haciendo en nuestro espacio de Textilia”, enfatizó Peery. Sin embargo, vale reiterar el superaporte de la Municipalidad de Asunción con la adjudicación a precio regalado de 5 hectáreas para la sede del museo.
La propiedad ubicada en zona privilegiada de la Costanera Norte de Asunción, cuyo precio de mercado ronda los G. 50.000 millones, fue concedida por G. 6.010 millones (USD 808 mil) a la mencionada ONG. Esto, en un contexto en el que una de las principales lobistas del proyecto va tejiendo su candidatura a intendenta de la ciudad.
ENTRADAS GRATIS
El pago ya fue realizado a la comuna de Asunción y en proceso se encuentra la aprobación de un convenio entre la municipalidad y la ONG para la implementación de algunos escuálidos beneficios que básicamente se traducen en entradas gratis a todos los paraguayos dos días al mes, una vez que se habilite el museo. No se visualizan condicionantes con relación con el uso, enajenación del predio una vez que transcurran los 5 años, que es el plazo establecido por la ordenanza número 33/95 de Tierras Municipales.