El senador Gustavo Leite dejó al descubierto una serie de millonarios negocios realizados a través de organizaciones sin fines de lucro. Por ejemplo, reveló el caso de su colega, el legislador Rafael Filizzola, quien fue contratado como asesor por una oenegé y también como el Grupo Zuccolillo fue beneficiado varias veces.

El senador Gustavo Leite dejó al descu­bierto una serie de millonarios negocios reali­zados a través de organizacio­nes sin fines de lucro (OSFL). Durante su alocución, Leite reveló el caso de su colega, el legislador Rafael Filizzola, quien fue contratado como asesor por una oenegé, y cómo el Grupo Zuccolillo ha sido beneficiado varias veces. Estas revelaciones surgen en el marco del debate sobre un proyecto de ley que busca establecer controles y trans­parencia para las OSFL, apro­bado ayer en la Cámara Alta.

El senador Gustavo Leite comenzó su intervención explicando el propósito de la ley: “El objeto de la ley es trabajar sobre la transpa­rencia y rendición de cuen­tas de aquellas OSFL que ope­ran en el ámbito del Estado. El Ministerio del Interior registra 1.491 OSFL, y aun­que puede que existan hasta 20.000, todas deberán regis­trarse, tener estatutos y for­malizarse”.

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En un tono que reflejaba su determinación, Leite subrayó: “El espíritu no es sacar a nadie del juego; es más, no se prohíbe nada. Lo que se pide es transparencia para quién, para la gente de Paraguay”. Añadió que, ante cualquier cuestionamiento sobre la constitucionalidad de la ley, la Corte Suprema tiene la última palabra para dirimir si una ley es consti­tucional o no.

En referencia al derecho de la ciudadanía a estar infor­mada, citado en el artí­culo 28 de la Constitución Nacional, Leite destacó que actualmente las OSFL que trabajan con el Estado no rinden cuentas a la ciuda­danía, incumpliendo dicho artículo. “Hoy las OSFL que trabajan en el ámbito del Estado, no le rinden cuenta a la ciudadanía, ergo el artí­culo 28 de la CN no está siendo cumplido”, afirmó, solicitando el apoyo técnico de sus colegas.

Leite recordó que el debate sobre el rol y la transparen­cia de las oenegés no es nuevo, mencionando artículos de los diarios Última Hora y Abc color que databan incluso de 2001. “La ciudadanía no sabe qué se hace con esta plata, tiene que saber”, insis­tió, añadiendo que durante 35 años, las OSFL han pre­dicado sobre la importancia de la transparencia y rendi­ción de cuentas, “siempre y cuando no sea para ellos o para ellas”.

“NEPOESPOSO” Y LA REPARTIJA

El senador no se guardó crí­ticas hacia su colega, el sena­dor Rafael Filizzola, mencio­nando que fue contratado por la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para asesorar entre 2020 y 2021. “En octubre de 2020, la sena­dora Masi votó por la apro­bación de este proyecto, ergo para que haya los fondos para pagarle a su marido”, acusó, señalando que estaban ante un caso de “nepoesposo”.

Leite desglosó varios casos de consultorías y contratos que sumaron cifras millo­narias, señalando que la ciudadanía no está al tanto de estos gastos. “Entre los consultores para el diseño de la estrategia se llevaron G. 3.700 millones. Eso no sabe la gente de Paraguay, eso tiene que saber la gente de Paraguay de aquí en ade­lante cada seis meses. ¿Quié­nes son, por qué, por qué se le pagó tanto a tal o cual?”.

Criticó además la distri­bución de contratos para la impresión de materiales didácticos, mencionando que de un total de G. 1.500 millones, G. 943 millones fueron para Editorial Azeta. “Nos llama la atención que habiendo 1.000 imprentas registradas para la impre­sión de timbrados se haya ele­gido a Editorial Azeta”, dijo, sugiriendo posibles irregu­laridades.

En el ámbito de la impresión de libros, señaló que se gasta­ron G. 7.800 millones, de los cuales Atlas Representacio­nes se llevó G. 1.200 millones. “¿Sabe la ciudadanía con qué procesos se contrató estos servicios, son transparentes o se hicieron a chonguismo?”, cuestionó.

Leite también mencionó la contratación de servicios de comunicación y difusión por G. 5.999 millones, pregun­tándose qué se hizo con ese dinero, a quién se contrató, y qué medios se beneficiaron. Detalló que, del total mane­jado por una organización, el 5 % se destinó directamente a la misma que luego contra­taría, entre otros, al Centro de Estudios Ambientales y Sociales (Ceamso) por G. 468 millones.

Señaló además otras cifras significativas: G. 845 millo­nes para el Instituto de Desa­rrollo, Capacitación y Estu­dios para un estudio técnico, y G. 551 millones para la OEI. Incluso mencionó a Sasha María Losada, implicada en estos negocios.

Leite concluyó su interven­ción enfatizando la necesi­dad de sanciones para ase­gurar el cumplimiento de la ley: “Estamos rasgándonos las vestiduras por sanciones que van a llegar solo si no se cumple la ley”. Con esta contundente exposición, el senador Gustavo Leite dejó clara la urgencia de estable­cer mecanismos de transpa­rencia y control en las OSFL para proteger los intereses de la ciudadanía paraguaya.

“¿Sabe la ciudadanía con qué procesos se contrató estos servicios, son transparentes o se hicieron a chonguismo?”, Gustavo Leite, senador.


“Nos llama la atención que habiendo 1.000 imprentas registradas para la impresión de timbrados se haya elegido a Editorial Azeta”, Gustavo Leite, senador.

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