Sin pasar por licitaciones públicas ni otras mayores exigencias y mientras salen a la caza de los corruptos favoritos, muy de moda con los escraches selectivos, la Federación de Entidades Vecinalistas del Paraguay (Fedem) recibió de manera directa millonarias transferencias desde el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS). La Fedem es satélite del Centro de Información y Recursos para el Desarrollo (CIRD), oenegé que ordeña al Estado y reparte sueldos entre el clan del presidente de la organización, operadores políticos del equipo de Mario Abdo Benítez de la última campaña electoral.
- Unidad de Investigación
- Nación Media
El platal que se llevan de manera directa ciertas organizaciones civiles, las famosas oenegés, algunas que se jactan de anticorrupción mientras se alzan con miles de millones en contratos entre las que aparece privilegiada una entidad satélite del Centro de Información y Recursos para el Desarrollo (CIRD), sugiere un alto grado de mercadeo gracias a la corrupción que se denuncia, por cierto, de manera muy selectiva.
Es así que la Federación de Entidades Vecinalistas del Paraguay (Fedem), manejada por un grupo de escrachadores “anticorrupción”, se adjudicó G. 800 millones en setiembre de 2021, es decir, en plena pandemia, gracias a un contrato que le otorgó el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS), con la administración de la exministra Carla Bacigalupo para la ejecución del proyecto “Formación y Capacitación Laboral para Comunidades de Escasos Recursos”.
Cabe remarcar que la Fedem funciona en una pequeña oficina en la zona de Loma Pytã de la ciudad de Asunción, según constatamos con una visita de nuestro equipo. No se sabe de su estructura ni se ven mayores infraestructuras para la cantidad de cursos y especialidades que demandaron los servicios contratados consistentes en los cursos de cocina, albañilería, mecánica de motos y electricidad domiciliaria, que figuran en el contrato con el Ministerio de Trabajo. Además de este convenio hay otro de enero de 2021 firmado con el Sistema Nacional de Formación y Capacitación Laboral (Sinafocal), también parte del MTESS para cursos de cocina, repostería, corte y confección, cajero en el marco del proyecto “Formación y Capacitación Laboral Online para Comunidades de Escasos Recursos”, cuyo monto no logramos identificar debido a que no se encuentra disponible en el portal de rendiciones de cuentas de la Contraloría General de la República.
La Fedem es una de las organizaciones que conforman la Coalición por la Legalidad del proyecto Más Ciudadanía, menos corrupción impulsada por el Desarrollo (CIRD) y que se dedican a talleres y protestas contra el nepotismo en el Estado, especialmente aquellos que involucran a sus corruptos favoritos. Así también entre las actividades de los anticorrupción resaltan cuestionamientos a la falta de transparencia y la impunidad; sin embargo, no se inmutaron ante la escandalosa repartija del dinero público entre el clan del presidente del CIRD, Agustín Carrizosa Gubetich, ni la contratación de operadores políticos del movimiento político del expresidente Mario Abdo Benítez en las últimas campañas electorales, a costa del sensible proyecto de Reactivación Económica Poscovid que costó G. 6.093 millones.
La hija de Carrizosa de nombre Paola Carrizosa Bradshaw; su pareja, María Berta Rojas Aveiro; su cuñada Marta María Rojas Aveiro; Carlos Francisco Alcaraz, hijo del coordinador del proyecto Más ciudadanía, menos corrupción, Francisco Darío Alcaraz, inflaron sus bolsillos con proyecto poscovid.
El presidente de la Fedem Miguel Sanabria Irepa es un activo militante anticorrupción, se lo ve en redes sociales participando con aliados del CIRD como la oenegé Coordinadora de Abogados del Paraguay (Coapy), la Contraloría Ciudadana Luque y Somos Anticorrupción.
Otros miembros de la privilegiada oenegé Fedem con jugosos contratos en MTESS son Hugo Gualberto Vázquez, Rubén Darío Escobar, Mariano Bareiro Soria, todos combatientes contra la impunidad y defensores de la Secretaría Nacional Anticorrupción cuya eficacia genera muchas dudas.
Desde Nación Media contactamos con el presidente Sanabria, quien confirmó los acuerdos mencionados, pero dijo no recordar los montos de las transferencias recibidas, dónde se desarrollaron los cursos y quiénes fueron los profesionales contratados para la ejecución de estos. Al ser consultado sobre la estructura con la que dispone la ONG, ya no obtuvimos respuesta.