En medio del escándalo de avisos de operaciones e investigaciones que desde los organismos de seguridad dieron a elementos del crimen organizado, se presentaron denuncias ante la Unidad Anticorrupción. Existen varias causas, ya que la organización logró permear varias instituciones.
- Unidad de Investigación Nación Media
El informe elaborado por la Unidad de Inteligencia Sensible (SIU) de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) para el desarrollo de la operación A Ultranza Py evidencia varias filtraciones de datos sensibles para la organización del tráfico internacional de cocaína en donde investigaban al uruguayo Sebastián Marset, su cuñado Mauro García Troche, los paraguayos Miguel “Tío Rico” Insfrán, Federico Santoro, entre otros.
La Unidad Especializada de Lucha contra el Narcotráfico del Ministerio Público, encargada de la persecución penal al cartel investigado, presentó denuncias por las filtraciones y cooperaciones en favor de la organización criminal de parte de agentes estatales de varias carteras ministeriales. Se abrieron varias investigaciones en el ámbito fiscal con relación al tema.
Las protecciones que brindaron desde el gobierno de Mario Abdo Benítez a Marset y su grupo serán indagadas por fiscales de la Unidad Especializada de Delitos Económicos y Anticorrupción (UDEA). Fuentes judiciales explicaron que se abren varias carpetas investigativas, divididas por ministerios y departamentos, desde donde se sospechan que colaboraron para las facilitaciones del montaje de la estructura dedicada al tráfico internacional de cocaína.
Según los documentos, desde la Senad y el Ministerio del Interior se filtraron informaciones sensibles. Uno de los avisos hizo que se aborte el descenso de una narcoavioneta en el Chaco, otro advierte de una investigación en la cartera del Interior y en otra comunicación se avisa desde el MDI que el Comando Tripartito de la Policía estaba siguiendo a Marset.
Inclusive, en medio de la detención del uruguayo en Dubái, la organización buscó ayuda de sus colaboradores del Gobierno y en las escuchas se detalla que uno de los secretarios de la banda recurrió a un colaborador del recientemente declarado significativamente corrupto por los Estados Unidos, el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez.
Además, para buscar una solución al problema que generó el pasaporte adulterado, también recibieron asesoramiento de sus nexos en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Finalmente, la Cancillería uruguaya generó un pasaporte para Marset, quien luego quedó en libertad y ya advertido de las pesquisas en su contra no volvió a Paraguay.
ADUANAS, TAMBIÉN BAJO LUPA
También el Ministerio Público indagará una presunta cooperación de funcionarios de la Dirección Nacional de Aduanas que brindaba facilidades para que los contenedores contaminados con cocaína puedan salir de Paraguay con destino a Europa y África. Igualmente, para ayudar a zafar de los controles migratorios, Santoro dice a García Troche que tiene un amigo en Aduanas que lo ayudará.
Asimismo, la transcripción de las escuchas revela que supuestamente Diego Marset, el hermano de Sebastián Marset, tuvo un problema judicial y que para arreglar con el juzgado iban a pagar G. 5 millones, además de “otras donaciones”.
Estas filtraciones y otros detalles que fueron denunciados por la Unidad de Narcotráfico de la Fiscalía serán indagados por fiscales de Anticorrupción.