Gloria Cantero Benítez, esposa del diputado liberal Sergio Rojas, salpicada el año pasado en el caso de las facturas falsas, acapara licitaciones de obras de la Gobernación de Presidente Hayes. En el combo figura que debía terminar el polideportivo y la pista multiuso en el Colegio Nacional de Cerrito de Benjamín Aceval en mayo del 2021; sin embargo, esto queda en los papeles porque la inauguración sigue en espera.
La firma Constructora del Sur (ConstruSur) se había quedado con el llamado de la Gobernación de Presidente Hayes, con ID 385.759, para construir el polideportivo y la pista multiuso en el Colegio Nacional de Cerrito de la ciudad de Benjamín Aceval. Fue adjudicada con un contrato de G. 1.302.410.734 en noviembre del 2020.
Según el pliego de bases y condiciones (PBC) publicado en el portal de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP), la obra debía ser concluida en 180 días a partir de la recepción de la orden de inicio de obras. Es decir, en seis meses, plazo que se cumplía en mayo del 2021.
Para ese mes, el polideportivo y la pista multiuso ya debían estar concluidos. Sin embargo, la obra está sin terminarse y sin las debidas especificaciones culminadas. Precisamente, en estos días salieron publicaciones periodísticas con fotografías de cómo se encontraba abandonado el interior del futuro polideportivo.
Lo más llamativo del caso es que la esposa del diputado liberal Sergio Rojas, vinculada a un esquema que presumiblemente utilizaba facturas falsas y que fue denunciado por la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET) el año pasado, ya recibió casi la totalidad del pago por la obra señalada más arriba de parte de la administración de Rubén Roussillón. De los G. 1.302 millones que totaliza el contrato, ya cobró G. 1.236 millones. Es decir, el 94% del monto destinado a la adjudicación.
El 23 de diciembre del 2020, recibió G.157.241.673 como primer pago y con ese monto daba la palada inicial para la obra que seis meses después ya debió ser finalizada.
En el 2021, el 26 de febrero, se realizaba el segundo pago. Un total de G. 451.387.054 fueron entregados por la Gobernación de Presidente Hayes a la señora Gloria Cantero Benítez para continuar con la construcción del polideportivo. Un mes después, otros G. 322.396.114 recibió la mujer por parte de Rubén Roussillón.
Pasaron los meses y nuevamente en julio del 2021 Gloria Cantero recibe de Roussillón G. 192.819.794, es decir el cronograma de pagos se cumplió con rigurosidad. Para ese mes, la obra ya tenía que haber estado concluida, según se especificaba en el contrato y el pliego de bases y condiciones, pero la inauguración del local sigue esperando.
Vuelve a recibir otro pago de G. 108.376.834 en octubre del año pasado y con ese monto ya completaba el 94% del dinero destinado a la obra. Recibió hasta ese momento G. 1.236 millones e igualmente siguió sin culminar el polideportivo de la escuela de Benjamín Aceval.
La señora Gloria Cantero es una mimada en las licitaciones del gobernador de Presidente Hayes. Rubén Roussillón la benefició con cinco contratos en un año.
Las adjudicaciones se iniciaron, sin parar, en noviembre del 2019 con el llamado para construir un tinglado y las graderías en la pista multiuso del polideportivo departamental. Para el efecto, se le otorgaron G. 741.651.040. En diciembre de ese mismo año ganó la licitación para construir aulas y reparar tres escuelas de Remansito, donde se le adjudicaron G. 384.825.590.
Ya en julio del 2020, en plena pandemia, le dieron un contrato de G. 1.790.899.010 para la construcción del polideportivo en Benjamín Aceval. Igualmente, en setiembre de ese mismo año otro llamado para culminar el polideportivo municipal y, nuevamente, ConstruSur fue adjudicada con G. 349.586.550.
Y así, ConstruSur fue sumando y acumulando G. 4.569.372.933 en un solo año gracias al gobernador Rubén Roussillón, quien, pese a los golpes económicos que estaba dando la pandemia del coronavirus en todo el país, siguió adjudicando jugosos contratos a la esposa del diputado Sergio Rojas con un criterio extraño en el que prioriza infraestructura para recreación antes que el mejoramiento de las escuelas.