POR NADIA DENIS
Los ataques de ciberdelincuentes han ganado campo al punto de suplantar identidades para acceder a créditos o comprar vehículos. Con las clases digitales, los niños forman parte del grupo más vulnerable. Un 78% de menores de edad han sido contactados por extraños, ya sea por WhatsApp o por juegos electrónicos, con intenciones desconocidas, de acuerdo a una entrevista concedida por el experto en ciberseguridad, Miguel Ángel Gaspar.
Muchos son los peligros a los que nos exponemos en la era digital, alertó el director de Paraguay Ciberseguro, Miguel Ángel Gaspar. Nuestros datos, como nombres completos, números de cédulas, huellas digitales, etc., están a disposición de las empresas o instituciones públicas en las que hacemos trámites o compras, y esto sin saber por cuánto tiempo y dónde serán almacenados o quién tendrá acceso a los mismos.
Así también las cámaras de seguridad con posibilidad para reconocer rostros o las chapas de los vehículos, fácilmente nos hace creer que nos garantizan mayor seguridad, sin embargo, significan una gran cantidad de datos que están a disposición de los ciberdelincuentes, ya que, ante la inexistencia de una ley de protección de datos personales, es imposible saber cuál es el uso que se le dan a estos datos.
-¿Paraguay cuenta con una legislación de protección de datos personales?
-Nuestro país es uno de los pocos países de la región que no tiene una ley de protección de datos personales, la ley que está vigente ahora es una ley de protección de datos personales crediticios cuya aplicación está a cargo del Banco Central del Paraguay (BCP) y de la Secretaría de Defensa del Consumidor y el Usuario (Sedeco) entonces hay muchas críticas en cuanto a los entes reguladores porque lamentablemente todos seguimos recibiendo publicidades, ofertas y se siguen manejando discrecionalmente las bases de datos de usuarios.
-¿Cómo puedo saber si mis datos están en un lugar seguro?
-Cuando usted como ciudadano quiere saber si un producto un servicio o lo que está accediendo a sus datos es seguro usted tiene que preguntar, dónde se guardan sus datos, por cuánto tiempo, quién tiene acceso, para qué acceden, con quiénes se van a compartir y de qué forma se van anonimizar y desmaterializar esos datos.
Si usted contrasta esas preguntas con todos los entes estatales y con la mayoría de los servicios privados se va a encontrar con que no todos pueden responder esas preguntas entonces, el billetaje electrónico, el registro único escolar, el sitio de vacunate, los sitios o las redes que guardan datos biométricos de los funcionarios públicos que al ingresar y al retirarse tienen que marcar con su huella o su rostro, ninguno de esos sitios puede responder qué es lo que está haciendo con nuestros datos.
-¿Cuáles son los riesgos o los peligros a los que estamos expuestos?
-Al estar nuestros datos expuestos así como están, estamos en riesgo de que sean suplantados para la obtención de créditos, vehículos, terrenos, electrodomésticos, y después la persona original debe cargar con eso.
Por otro lado el ataque de ciberdelincuentes. El 78% de los chicos que pudieron acceder a las clases digitales fueron en algún momento contactado por terceras personas, sin saber con qué tipo de intenciones, estando en sus casas y con su propio internet, por mensaje, por juegos por redes, esto vino a raíz de la hiperconectividad salvaje a plataformas que no son seguras. Considerar que WhatsApp es una herramienta educativa es tirar a los chicos a los leones, que es evidentemente lo que pasó.
Los ataques reiterados de ingeniería social por parte de delincuentes, en su mayoría dentro de las cárceles, han mejorado su método porque hoy en día han pasado del ataque de ingeniería común y corriente de hacerse pasar por un operador de telefonía a poder contar con aplicaciones interceptoras que pueden escuchar lo que usted digita en su teléfono y saber qué teclas son, mediante un engaño le piden que ingrese a su billetera y digite su pin. Todo eso se debe a que tienen tiempo, los recursos y los datos para poder reconocer a las personas más vulnerables.
-¿Quiénes son los que están en mayor riesgo?
-Hoy en día en nuestro país uno de los sectores más vulnerables son los niños por el tema de las clases digitales, por la exposición a juegos y el grupo de personas mayores, por el subsidio y la bancarización.
-¿Cuánto tiempo tomará poder lograr una seguridad cibernética?
-Nosotros estamos empezando de abajo, estamos peleando en el Congreso para que se apruebe la ley de protección de datos personales que está ahora en estudio y eso debería llevar a que se genere los recursos para una Agencia Nacional de Protección de Datos. Este trabajo lleva tiempo, a Brasil, Argentina, Chile le llevó 10 años, a Europa le llevó 21 años, va a llevar tiempo pero tenemos que empezar a andar ese camino, no podemos seguir alegremente exponiendo nuestros datos como están hoy, más del 80% de los datos de los ciudadanos paraguayos están en manos de empresas, intereses y gobiernos extranjeros, esa es nuestra realidad.
-¿Una ley de protección de datos no se confronta con la ley de Acceso a la Información Pública?
-Hay ciertos sectores que ven esto como una oportunidad para de destransparentar la función pública y no es así, la función pública va a seguir siendo transparente y puede coexistir con una ley de protección de datos personales.
Una ley no va a recortarle facultades a la otra, los funcionarios públicos tienen que entender que son funcionarios públicos, lo que pasa es que menos entienden esto es quienes entraron con bienes malhabidos y quieren seguir malhabiendo bienes, lastimosamente es así, pero dentro del marco de la ley existen ciertas circunstancias que incluso podrían ayudar a corregir algunos vicios de la ley de transparencia porque a veces afecta a familiares no ligados directamente o no diversifica datos que son personales y sensibles como los datos médicos, que no tiene nada que ver con la función pública.