Entre préstamos bancarios y bonos emitidos, el Partido Liberal gastó unos G. 39.500 millones en la última candidatura presidencial de Efraín Alegre, monto que supera ampliamente a los G. 34.000 millones que por ley estaban habilitados a gastar, según explicó el tesorero del PLRA Dionisio Amarilla, quien a su vez señaló que desconocen el uso que se le dio a este dinero.
El análisis a la situación financiera del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) continúa y a medida que pasan los días salen a la luz los escandalosos números que dejan al descubierto el desastre económico generado por la administración de Efraín Alegre.
El tesorero del PLRA, Dionisio Amarilla, indicó que en las elecciones presidenciales del 2018, en las que Efraín Alegre fue candidato, se “violó e incumplió” con la Ley de financiamiento político, dado que el monto gastado fue ampliamente superior al que dicha legislación permitía.
Para las mencionadas elecciones, Alegre realizó un préstamo al banco Continental por G. 12.000 millones y se emitieron bonos por G. 27.500 millones, lo que totaliza G. 39.500 millones.
“La Ley de financiamiento político establece como tope que las nucleaciones políticas, las asociaciones, los partidos, en ningún caso pueden sobrepasar como gasto de campaña el equivalente al 10% de un jornal del salario mínimo multiplicado por la cantidad de electores habilitados, lo que daba un presupuesto máximo de G. 34.000 millones”, detalló Amarilla.
De esta forma, se excedió G. 5.500 millones en el financiamiento de la campaña de Efraín Alegre y desconocen cómo se gastó ese dinero, dado que hay mucho “desorden” en el partido en cuanto a las documentaciones.
Lo que también llama la atención es que hay un margen de aproximadamente G. 10.500 millones que no se rindieron ante el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), es decir, que de los G. 39.500 millones la administración de Alegre rindió cuentas por G. 29.000 millones.
PRÉSTAMOS AVIVADOS
Además de ese préstamo Efraín contrajo otros créditos incluso antes de que estuviera habilitado el periodo electoral, el que inicia 60 días antes de las elecciones, una práctica “rara”, según lo mencionado por Amarilla.
“Ellos le llaman préstamos preelectorales, son préstamos que hicieron antes del plazo electoral. Los préstamos quitaron ellos avivadamente antes de ese plazo y que todavía no pudo cancelar el partido, porque definitivamente se le fue de las manos a Efraín Alegre”, expresó Amarilla.
Estos “préstamos preelectorales” fueron adquiridos de tres financieras; Cefisa, Finexpar y Pasfin por un total de G. 6.953.874.828 y tampoco fue saldada en su totalidad por la administración de Alegre, dado que aún está pendiente de pago G. 2.368.797.549. Dionisio Amarilla señaló que remitió una nota al administrador del partido, Javier Morínigo, en el que le solicita las documentaciones que respalden y detallen el uso que se le dio a esos millonarios préstamos.
Tanto el subsidio como el aporte que recibió el PLRA por parte del Estado, se quedaron cortos a la hora de saldar los numerosos préstamos e incluso denuncias por embargos. Dionisio Amarilla señaló que aguardarán todos los documentos para empezar a pagar sus obligaciones.