Una sobrina del fallecido monseñor de Villarrica, Eulogio Montiel, y el chofer del sacerdote vaciaron casi G. 5.000 millones de la cuenta bancaria del excapellán castrense a solo unos días de su muerte. Los demás primos y herederos los denunciaron por apropiación y asociación criminal hace 10 meses atrás. Hasta el momento la Fiscalía no imputó a los sospechosos.

El 4 de marzo de 2020, el religioso Eulogio Montiel, exmonseñor de Villarrica, falleció y dejó una enorme fortuna a sus más de 20 herederos (sus sobrinos, ya que no tuvo esposa ni hijos). Entre sus bienes, el sacerdote tenía un inmueble valorado en G. 700 millones y una camioneta de G. 100 millones.

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A lo anterior se sumó una cuenta bancaria con G. 5.000 millones. Sus familiares se enteraron de la existencia del dinero recién en el juicio de sucesión, pero grande fue la sorpresa cuando tuvieron conocimiento de que la suma fue retirada en su totalidad el 9 y 10 de marzo, a días del fallecimiento del cura.

Los familiares denunciaron que la sobrina del sacerdote, Mirta Montiel, y el exchofer Elvio Báez vaciaron la cuenta bancaria, atendiendo que la mujer aparecía como cotitular de la cuenta bancaria.

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César Báez, abogado de un grupo de herederos, dijo a Visión Comunicaciones que la sobrina del cura autorizó a Elvio Báez para que retire la suma de G. 2.000 millones y que la misma también había retirado casi G. 3.000 millones.

“Intimada por los herederos que se presentaron en la sucesión para la devolución de esa suma o la justificación del origen de sus fondos como suyos, ella se mostró renuente, eludió todo tipo de explicación, ningún diálogo”, indicó.