El Festival Nacional del Pira Caldo, cuya cuarta edición fue realizada el pasado domingo 4 de agosto en San Antonio, rindió tributo a la tradición pesquera de esta ciudad y puso en el foco, con o sin quererlo, un patrimonio histórico cuya conservación corre serio peligro. Además de diversas presentaciones artísticas, la actividad contó con un concurso en el que un selecto jurado eligió el mejor caldo de pescado entre los 25 expositores participantes.
- Por Paulo César López
- paulo.lopez@nacionmedia.com
- Fotos: Roberto Zarza / Gentileza
El escenario elegido para celebrar el pasado y presente profundamente ribereño de este distrito ubicado al sur del departamento Central fue la imponente estructura del viejo exhotel ubicado sobre la avenida San Antonio y Cadete Boquerón, cuya construcción fuera iniciada allá por 1917 bajo encargo de la desaparecida empresa norteamericana International Products Corporation (IPC) frente al frigorífico que entonces pertenecía a la misma firma y que sigue operativo hasta la actualidad luego de pasar por sucesivos cierres y propietarios.
Ya desde las diez de la mañana, cuando arrancó oficialmente el certamen con la presentación de cantantes, bailarinas y actores locales, una importante afluencia de personas de la comunidad, de ciudades aledañas, así como turistas extranjeros acudieron para disfrutar del espectáculo y asegurarse de poder degustar un sabroso caldo de pescado y otros manjares hechos a base de este ingrediente.
El variado menú tenía un rango de precios que oscilaba entre los G. 25.000 a G. 40.000 y la oferta fue agotada por el numeroso público que se agolpó a lo largo de toda la jornada, que se extendió aproximadamente hasta las 19:00 con un majestuoso cierre que hizo delirar a la multitud presente.
NOVEDAD
Marcos González, uno de los organizadores del evento, explicó que el festival se realiza desde 2019 y que la presente edición es la cuarta debido que a raíz de la pandemia no se pudo realizar durante dos años.
“En esta edición contamos con 25 expositores que presentan diversas versiones del pira caldo, que es la estrella del festival en sus diferentes formas de preparación, ya sea de surubí, mandi’i, piraña u otras especies. Cada uno tiene su estilo con añadidos especiales y diversas variantes. En esta edición también tenemos un concurso con los prestigiosos chefs Derlis Bogado, Pablo Pappalardo y Sulli Guimaraes. La intención no es demeritar a ningún cocinero, sino premiar a aquellos que le agregan algo propio y un toque especial”, aseveró.
Entre los expositores se tuvo incluso la presencia del Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay (CBVP), que ofreció uno de los platos más peculiares de la jornada: el vorivori de surubí. Como vocero del equipo culinario de la institución, el bombero voluntario combatiente Andrés Martínez señaló al respecto del origen de esta receta que “si tenemos vorivori de carne, vorivori de pollo, en un momento con nuestro capitán nos preguntamos por qué no hacer un vorivori de surubí y así salió este plato. Tiene el tradicional vori, pero la diferencia es que la carne es surubí acompañado de crema de leche y abundante queso”.
Consultado sobre cómo reciben los comensales esta innovación gastronómica, aseguró que genera mucha curiosidad y que desde muy temprano recibieron numerosas reservas de personas que deseaban degustar esta variante del tradicional plato paraguayo.
En otro de los puestos visitados durante el recorrido charlamos con la “mamá guasu” Herminia Sanabria, de Pira Gourmet El Gato, quien se encontraba preparando la salsa para un chupín de surubí y otro de moncholo, además de un caldo de pescado tradicional. Sanabria, una antigua pobladora de la ciudad, destacó entre sus especialidades el strogonoff de pescado con arroz quezu. Mientras comparte con nosotros la tarifa del menú, Karina nos convida unas deliciosas milanesitas de solalinde.
En el stand contiguo nos recibe Walberto Valiente, de la Pescadería San Antonio, quien al tiempo de resaltar el aporte cultural, flujo turístico y movimiento económico generado por este tipo de actividades, detalló las características de algunos de los platos ofrecidos en su puesto. En este sentido, indicó que la especialidad de la casa es la sopa crema y entre otras de las opciones con alta demanda citó la cazuela de lomo de surubí.
ALTO VALOR NUTRITIVO
En su carácter de integrante del jurado, Sulli Guimaraes, del programa “Tradición y cultura”, explicó que dentro de su especialidad en la gastronomía típica el pescado ocupa un lugar central, pues, a más de ser un componente importante en la cocina paraguaya, tiene un aporte nutricional que es necesario poner de relieve y cuyo consumo debe ser promovido.
“Hoy venimos a compartir y no tenemos ánimo de desmerecer a ningún cocinero, sino destacar la mejor versión del aprovechamiento de este producto que tiene un nivel nutricional altísimo y que debemos valorar. Con mucho cariño vine a compartir de este precioso momento”, indicó Guimaraes antes de iniciar el recorrido.
Posterior a la premiación al mejor pira caldo, que se llevó la Pescadería San Cayetano, la actividad concluyó con un desfile de belleza, un concierto con la presencia estelar del grupo Oasis de Villarrica, The Classic’s y DJ Pasto, que presentó un variado repertorio coronado con juego de luces y fuegos artificiales.
Por último, cabe destacar que, además de la promoción de la gastronomía típica y la cultura paraguaya en general, el escenario escogido para la realización de la actividad interpeló fuertemente sobre la necesidad de tomar medidas urgentes con vistas a salvaguardar un patrimonio histórico de la ciudad que se encuentra bajo seria amenaza de derrumbe.