- Jesica Barreto (jesica.barreto@nacionmedia.com)
- Fotos: Emilio Bazán
“Tanto Paraguay como Taiwán son dos pueblos que no se dejan vencer”, aseguró el embajador de la República de China (Taiwán), José Chih-Cheng Han, en un mano a mano con La Nación/Nación Media. Habló sobre la relación bilateral con Paraguay, la visión del presidente Santiago Peña para llevar a otro nivel la cooperación y los programas en los que está trabajando la embajada en el país. Chih-Cheng Han profundizó sobre la amenaza latente de China Popular y la apertura de Taiwán al diálogo sin imponer condiciones. Aclaró que no quieren guerra, pero recalcó que están “preparados para cualquier invasión que China Popular irracionalmente pudiera provocar”.
–¿Cómo está actualmente la relación bilateral entre Paraguay y Taiwán?
–En forma general, excelente. Podemos avanzar hacia otro estadio y mejorar más el aspecto económico y de inversión. El presidente Santiago Peña, en varias ocasiones, nos ha manifestado que tenemos que estrechar nuestra relación en forma estratégica y que Taiwán y Paraguay tienen que ser socios en desarrollo económico. Por eso, además de la carne vacuna que está teniendo una presencia muy consolidada y fuerte en Taiwán, estamos trabajando para aumentar la exportación de carne de cerdo y la habilitación del mercado para la carne de pollo.
Hace tres meses logramos, a través de una reunión bilateral entre el ministro de Industria y Comercio paraguayo, Javier Giménez, y la exministra de Economía taiwanesa, Wang Mei- Hua, reducir a cero el arancel para la carne de cerdo y estamos muy optimistas de que ello va a contribuir a un gran aumento de la exportación de carne de cerdo.
Para la habilitación de la carne de pollo estamos trabajando de forma muy estrecha con el Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa). Posiblemente, en estos días, después de otorgar a Paraguay el estatus de país libre de la enfermedad de New Castle y libre de influenza aviar, se va a aprobar la documentación de sanidad animal que presentó Paraguay. Una vez aprobado, vendrían auditores para inspeccionar los frigoríficos. Entonces, estamos cerca, creo que antes de fin de año.
La inversión es un norte importante en la administración del presidente Peña. Todo el mundo lo sabe. Se reúne con diferentes inversionistas extranjeros, de gran porte, buscando traer inversión a Paraguay y en este afán nos ha expresado que Taiwán, siendo un amigo y aliado importante, tiene muchas ventajas en industrias y puede acompañar para traer inversiones.
En dos ocasiones, el presidente Peña se reunió con empresarios de Taiwán y en el último viaje, acompañado por el ministro Giménez, se reunieron con un fabricante de buses eléctricos y firmaron un MOU (memorando de entendimiento), por lo que estamos esperanzados de que pueda instalarse ya en Paraguay. Se haría una alianza con la marca brasileña Marcopolo, muy conocida en la fabricación de carrocería. Estamos por buen camino.
FORTALECIMIENTO DE LAS RELACIONES E INVERSIONES
–¿En qué otras áreas se realizan o se prevén inversiones?
–Además de la fabricante de buses eléctricos, estamos enfocados en el rubro textil, de procesamiento de alimentos, de alta tecnología, especialmente en cuanto a informática e inteligencia artificial. El nuevo canciller de Taiwán, Lin Chia-Lung, tiene en su mente una imagen clara de cómo fortalecer nuestra relación y promover más inversiones.
Apenas asumió, el 20 de mayo pasado, recibimos instrucciones sobre cómo trabajar y para ello estamos en constante conversación con el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación (Mitic), con el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) y con los principales actores en el área de inversión. Estamos convencidos de que vamos a llevar nuestra cooperación a otro nivel.
–¿Cuáles son las fortalezas y las debilidades de esta relación?
–La fortaleza de nuestra relación bilateral es que ya tiene 67 años ininterrumpidos. Es una relación de confianza de muchos años. Tanto con el gobierno de turno como con los diferentes sectores político, empresarial, social. La desventaja podría ser la distancia, que dificulta un poco el conocimiento de nuestra gente a este país hermano ubicado al otro lado del planeta.
Pero este panorama está cambiando con la presencia cada vez más fuerte de Paraguay en Taiwán. Primero en el comercio. Mis amigos, mi papá, saben que hay que consumir la carne paraguaya. La presencia de este producto paraguayo va disminuyendo el efecto de la distancia geográfica.
Además, nuestros empresarios están viajando mucho a Paraguay y próximamente estaremos organizando una visita de una delegación de empresarios de Taiwán y Estados Unidos, en forma conjunta. Los empresarios taiwaneses suelen trabajar mucho con sus pares en Estados Unidos, que es un inversionista muy importante en Paraguay. Entonces, hay desventajas, pero estamos cambiando el panorama.
PUENTE ENTRE DOS CULTURAS
–¿La presencia de estudiantes paraguayos en Taiwán también acerca a ambas culturas?
–Sí, hay muchos estudiantes paraguayos estudiando en Taiwán. Estudiantes jóvenes que conocen dos culturas. Esto fácilmente puede ser un puente. Además, pueden trabajar en las empresas taiwanesas que van a venir a establecerse aquí en Paraguay. Muchas de las empresas tienen interés en ellos. Por ejemplo, la fabricante de buses eléctricos ya está contratando estudiantes o egresados paraguayos en Taiwán para trabajar en el equipo. Esta empresa ofrece plazas para que estudiantes paraguayos puedan quedarse en Taiwán a hacer su pasantía. Esto es una ventaja.
–¿Cuántos programas lleva adelante la embajada en Paraguay? ¿En qué áreas?
–El presidente Peña nos indicó que las prioridades de su gobierno son salud y educación. En salud estamos trabajando en la extensión del programa HIS, que implica la digitalización del sistema de salud pública, que permitirá reducir el tiempo de espera de los pacientes, brindar una atención más eficiente, un mejor uso y compra de medicamentos. La solicitud clara del presidente Peña es ampliar la cobertura hasta el 100 %.
Este programa ya tiene 8 años de desarrollo, pero ahora el presidente Peña le dio importancia y pidió que la cobertura sea total. Él considera incluir al Instituto de Previsión Social (IPS) para así cubrir quizás el 90 % de la población paraguaya. El Ministerio de Salud y el Mitic están muy enfocados en desarrollar y avanzar en este programa junto con nuestro equipo.
Otro proyecto al que le estamos dando mucha importancia es la Universidad Politécnica Taiwán-Paraguay (UPTP), ya tenemos el predio definido y estamos trabajando con Mitic para unir la universidad y el distrito digital a fin de formar un ecosistema inteligente y de alta tecnología. Creo que antes de que termine este periodo de gobierno ya vamos a tener la universidad instalada y laboratorios para las cuatro carreras, que son de ciencia y tecnología.
La docencia está en manos de profesores de Taiwán. La malla curricular se diseñó en conjunto con la Universidad Taiwán Tech, que está en el puesto 257 del ranking mundial, o sea, es una universidad muy reconocida. Las clases se dan en inglés. Creo que es la única en la región, a nivel de universidad pregrado, que imparte clases en inglés durante la carrera de cuatro años. Los egresados son ingenieros jóvenes, capacitados, que manejan inglés y español de forma profesional.
–¿Qué puede aprender Paraguay de Taiwán y qué puede aprender Taiwán de Paraguay?
–Paraguay es un país noble, es un pueblo noble. Desde 1971 Taiwán fue gradualmente expulsado del escenario internacional, pero Paraguay ha mantenido siempre su relación con Taiwán. Tanto Paraguay como Taiwán son dos pueblos que no se dejan vencer. Aprendimos de nuestra experiencia histórica. El aprendizaje es mutuo y nos permitió conseguir muchas cosas.
Hoy el mundo está cambiando, la estructura geopolítica. Los países que han dejado a Taiwán ahora vuelven a buscarlo. Taiwán produce el semiconductor que actualmente es un recurso geopolítico, un recurso estratégico, que en ningún país puede faltar. Taiwán produce el 65 % a nivel mundial y está volviendo a ser considerado.
Agradecemos mucho a Paraguay que nos ha acompañado en todo este camino. Paraguay nunca abandonó a Taiwán y creo que esa es la fuerza que nos une. Si queremos trabajar en forma estratégica, optamos primero por nuestro aliado, por nuestro amigo. En Sudamérica, Paraguay es el país con el que más trabajamos, tanto en cooperación como en comercio. De Sudamérica, Paraguay es el único país que puede exportar carne vacuna a Taiwán. Esto explica todo.
CULTURA DE LA AMISTAD
–¿Hace cuánto tiempo puede destacar del país y de su gente?
–Llegué el 11 de mayo de 2020. Todavía tengo la memoria muy fresca de ese día a pesar de que ya llevo cuatro años aquí. Creo que para poder irme tranquilo de Paraguay, cumpliendo con el pueblo hermano, tengo que terminar un proyecto de inversión concreto.
De Paraguay destaco que es un país noble, un país de muchos amigos. Aquí funciona mucho la amistad y eso es muy bonito, esta es una virtud compartida con Taiwán. Nuestra cultura prioriza la amistad. Otra virtud muy especial de los paraguayos es que no dicen no, son un poco más tímidos, son más educados quizás. En Paraguay, si uno quiere percibir un no, tiene que conocer más a profundidad el comentario que recibe. Los paraguayos no dicen no, o mejor dicho, dicen no en otra forma o indirectamente.
Creo que en Paraguay hay talento y buena formación. Le doy un ejemplo de talento de los paraguayos. Un día conversé con los profesores de UPTP que vienen de Taiwán y les pregunté ¿cómo está el nivel de los estudiantes en Paraguay? Y la respuesta que recibí fue muy interesante. Me dijeron que, en general, los taiwaneses son mejores que los paraguayos, pero que los mejores paraguayos son mejores que los mejores taiwaneses. Acá hay chicos muy brillantes y son más brillantes que los brillantes taiwaneses. Yo considero que los paraguayos son más creativos.
–¿Qué debe potenciar Paraguay para desarrollarse y convertirse en un referente al igual que Taiwán?
–Taiwán tuvo un largo recorrido. Tuvo planes económicos y planificó su educación en función a estos. Era un país agrícola y pasó a ser un país industrial. Empezamos con industrias ligeras, de reemplazo para la importación. Después entramos al procesamiento industrial, para aprovechar la mano de obra barata en Taiwán. Luego llegó un ministro de Economía que decidió que Taiwán debía orientarse hacia la fabricación de semiconductores y fue ahí que hubo un salto para la industria informática. La educación acompañó este proceso con carreras enfocadas en la ciencia y la tecnología (más de la mitad de los alumnos optaban por estas disciplinas).
Paraguay tiene mucho potencial para avanzar hacia el desarrollo y en este camino la inversión en educación es importantísima. Acá hay mucho talento y creo que el presidente Peña está reorganizando al país pensando en qué necesita.
PRESIÓN
–¿Cómo está la relación con la República Popular de China? ¿Qué amenazas están latentes?
–Taiwán experimenta constante presión por parte de la República Popular de China, que busca instalar el principio de una sola China, un país con dos sistemas. Reclama que Taiwán es una provincia de la República Popular China, pero eso es falso.
Todo el mundo sabe que Taiwán es otro país, diferente, que tiene su propio gobierno democrático, su propia fuerza armada, su propio sistema educativo, su propio banco central y monedas. Nada indica que Taiwán es parte de la República Popular de China.
El régimen de Beijing nunca ha estado ni pisado suelo taiwanés. Hoy si un extranjero quiere viajar a Taiwán, no solicita visa a China. El pasaporte taiwanés no necesita visa para entrar a Estados Unidos, pero el pasaporte chino sí necesita. Entonces, claramente son dos países.
El mundo nunca va a oír que Taiwán amenaza o condiciona, siempre es China la que amenaza y condiciona. Taiwán siempre mantuvo una puerta abierta al diálogo, pero sin poner condiciones. Somos un país pequeño y pacífico que pretende su supervivencia, dignidad y soberanía. No queremos guerra, pero estamos preparados para cualquier invasión que China irracionalmente pudiera provocar. El mundo está cambiando y China puede cambiar también.
–¿Puede hablarnos sobre la Resolución 2758 de la ONU (1971) y su interpretación en relación con Taiwán?
–China está lanzando una propaganda a nivel internacional que vincula la resolución 2758 de la ONU (1971) con el principio que buscan instalar, el de una sola China. Lo que definió esta resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas es restablecer a la República Popular de China como el representante chino.
Pero la resolución no habla de una sola China, ni tampoco de que la República Popular de China representaría a Taiwán. En el ámbito internacional, la resolución de las Naciones Unidas no puede definir fronteras. No hay razón, ni base jurídica, que vincule la resolución 2758 con el principio de una sola China.
La República Popular de China intenta usar esta resolución como un arma legal para establecer una sola China y como antesala para usar su fuerza militar para resolver la cuestión de Taiwán. De los 183 países en el mundo, solamente 57 aceptan el principio de una sola China, el resto tiene diferente posición.
–¿Por qué Paraguay debería permanecer como aliado de Taiwán y no pasar a serlo de China?
–Respeto a los sectores que consideran que Paraguay tiene que ser socio de China. Hasta el momento, nunca he oído directamente del sector empresarial que debe romperse la relación con Taiwán. Sí que hay que explorar el mercado de China Popular. Taiwán no impone ninguna condición, China sí. Para ser socio de China, hay que romper con Taiwán. Esto está en contra de las reglas establecidas por el orden mundial. Todos somos parte del organismo mundial de comercio.
Hay mucha gente que cree que China Popular va a traer desarrollo y tengo dos mensajes: primero, no trae desarrollo, un ejemplo es Venezuela; segundo, el desarrollo de un pueblo no depende de otro. El desarrollo de Paraguay depende de Paraguay y de los paraguayos. Los paraguayos están en camino del desarrollo y los países aliados podemos acompañarlo en este camino, compartir nuestra experiencia, estrechar nuestra relación, pero al final el desarrollo siempre estará en manos de los paraguayos.
PERFIL
Embajador extraordinario y plenipotenciario de la República de China (Taiwán) en la República de Paraguay
Licenciado en Comercio Internacional por la Universidad Tunghai
Diplomado en Alta Gerencia por la Academia Nacional de Administración Pública
Diplomado en Servicio Exterior por la Academia Diplomática del Ministerio de Relaciones Exteriores
Supervisor de créditos en el Banco Chinatrust
Funcionario del Departamento de Protocolo del Ministerio de Relaciones Exteriores
Tercer y segundo secretario de la Embajada de la República de China (Taiwán) en la República de Panamá
Jefe de la Unidad Especial, Departamento de Latinoamérica y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de China (Taiwán)
Primer secretario de la Embajada de la República de China (Taiwán) en la República de Costa Rica
Primer secretario de la Embajada de la República de China (Taiwán) en la República Dominicana.