La capital del país y su centro histórico buscan recuperar su rol protagónico a través del proyecto de renovación del amplio y antiguo Puerto de Asunción, que apunta no solo al muelle, depósitos y oficinas, sino a expandirse a todo el casco histórico y, a futuro, que nuestra ciudad pueda contar con la “parte vieja”, como todas las importantes ciudades del mundo que tienen varios siglos de existencia.

• Por Juan Carlos dos Santos G.
• juancarlos.dossantos@nacionmedia.com
• Fotos: Jorge Jara / Gentileza

La historia del Para­guay se inicia con la acción del capitán Juan de Salazar, que ordenó la construcción del fuerte que se transformaría posterior­mente en la capital de nuestro país. Dentro de la historia de la ciudad misma, la zona que hoy ocupa el Puerto de Asun­ción fue, desde un principio, el centro neurálgico de una ciudad en crecimiento.

A poco menos de cinco siglos de aquel día, los avances tec­nológicos y el propio desarro­llo de Asunción fueron qui­tando protagonismo al lugar donde antaño transcurrían los principales eventos y la mayor parte de la actividad comercial del país.

Actualmente, la actividad del Puerto de Asunción está reducida de manera conside­rable, tanto en la navegación como en otras actividades, pero aún sigue teniendo una ubicación estratégica, mas ahora para otros fines. Lejos quedaron las multitudes que llenaban el muelle para reci­bir o despedir a las embarca­ciones, algunas en situaciones bélicas como cuando partían hacia el Chaco; otras turísticas, la mayoría mercantes y otras de visita por fechas especiales como la celebración de las fies­tas patrias.

La irrupción de la avenida Costanera, sumada a la cons­trucción de los edificios que serán sede de varias oficinas del Gobierno, hizo que nueva­mente las miradas se centren en el viejo puerto, sus edifi­cios, sus depósitos, su muelle y, sobre todo, la vista a la bahía de Asunción, que tantas can­ciones, pinturas y otras obras de arte ha inspirado.

Un ambicioso proyecto cuyos detalles fueron anunciados hace unos días promete gene­rar un cambio radical no solo en la zona del puerto propia­mente, sino en toda la zona de influencia del mismo y que serían los barrios cercanos y gran parte del microcentro asunceno.

La Secretaría Nacional de Cul­tura (SNC) y la Administra­ción Nacional de Navegación y Puertos (ANNP) firmaron un acuerdo de colaboración para la renovación del amplio y antiguo Puerto de Asunción. El ambicioso objetivo es nada menos que convertirlo en el epicentro cultural más desta­cado de Paraguay y cuenta con el apoyo de la primera dama, la arquitecta urbanista Leticia Ocampos.

La capital del país y su centro histórico buscan recuperar su rol protagónico con este pro­yecto, que apunta no solo al muelle, depósitos y oficinas del Puerto de Asunción, sino a expandirse a todo el casco histórico y, a futuro, que nues­tra ciudad pueda contar con la “parte vieja”, como todas las importantes ciudades del mundo que tienen varios siglos de existencia, tal como mencionó en una entrevista con La Nación/Nación Media el director de Puertos, Julio César Vera.

“Este proyecto va a trans­formar a la ciudad”, asegura el director de la institución. Refiere que el edificio admi­nistrativo ya fue dado en usu­fructo a la SNC mientras que los depósitos A y B serán uti­lizados como centros gastro­nómicos con diferentes carac­terísticas, algunos mirando hacia el lado del centro de la ciudad y otros, hacia la bahía de Asunción.

“El depósito C será destinado a eventos artísticos cerrado y el proyecto se extenderá hasta la playa Carrasco, donde culminará con un parque recreativo y una náutica. Eventualmente, si se consiguen los inversionis­tas, se instalará un shopping en esa zona. Estamos en la búsqueda de ese inversionista. El lugar, que actualmente es la playa de contenedores, fácil­mente puede albergar hasta 100.000 personas y podrá ser utilizado como lugar para con­ciertos al aire libre”, expresó Vera.

El sector conocido popular­mente como playa Carrasco comprende desde la orilla del río Paraguay hasta el límite del Cuerpo de Defensa Flu­vial y es atravesado por el arroyo Jaén, que desemboca en ese lugar.

La playa Carrasco es el lugar donde se construyó el malo­grado parque de la Solidari­dad, actualmente en desuso. La intención de convertir el lugar en una zona recreativa y turística, acompañando el crecimiento del barrio San Jerónimo, no tuvo continui­dad ni apoyo del gobierno central anterior, por lo que lentamente el deterioro de las instalaciones del predio y la inseguridad reinante en la zona terminaron por con­denar al proyecto.

El Puerto de Asunción se extiende hasta pocos metros antes del lugar, donde actual­mente está ubicado el depósito de contenedores.

La reconversión del Puerto de Asunción como un centro cul­tural y social disponible para la ciudadanía tendrá un efecto multiplicador, ya sea comercial como arquitectónico. “El club Mbiguá, por ejemplo, va a tener que readecuarse para estar a tono con esto. Además, es una gran oportunidad para todos y nosotros le vamos a brindar todo el apoyo que haga falta”, dijo Vera.

El desarrollo comercial no solo apunta a los alrededores del puerto asunceno, sino que se abren posibilidades de trans­porte náutico, así como tam­bién de tipo recreativo y turís­tico, como sucede en todas las ciudades que están ubicadas a orillas de cursos de agua.

Uno de los efectos que sin dudas tendrá este proyecto será la revalorización de las propiedades del sector ale­daño al puerto, incluyendo al microcentro. “La zona está muy deprimida, pero rápi­damente se notará el cam­bio a medida que las obras comiencen a tomar forma”, indicó Vera.

Los pilares del muelle serán una de las primeras estructu­ras sometidas a refacciones y cerca de 75 de ellos serán pues­tos en condiciones inmediatas. Posteriormente se trabajará por los demás hasta comple­tar el total de 110 pilares con los que cuenta el muelle.

“Guardando las diferen­cias, con esto vamos a tra­tar de replicar en esta zona portuaria lo que es el sector de Puerto Madero en Bue­nos Aires”, añadió el direc­tor de Puertos.

Julio César Vera, en su carác­ter de director de la institu­ción, explicó que también en Ciudad del Este tienen un pro­yecto de similares característi­cas en lo que respecta a la cons­trucción de un shopping en la zona portuaria a orillas del río Paraná.

Se habla de aproximada­mente 12.000 m² que serán destinados a la construcción de un gran centro comer­cial sin que eso afecte a la operatividad. Todo esto en una alianza estratégica con una empresa que en princi­pio construiría el edificio de cinco pisos, aunque presen­tando cálculos para even­tualmente poder crecer cinco pisos más. Todo esto repre­senta una inversión del orden de USD 40 millones.

El plan estratégico insti­tucional es bastante ambi­cioso y abarca refacciones de varias terminales portuarias en lugares como Pedro Juan Caballero, Ciudad del Este, el embarcadero de la Terminal de Encarnación, adecuaciones de las terminales de Salto del Guairá y en Chaco’i.

También en Pilar se proyectan importantes cambios y parte de la terminal será destinada a una base de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), teniendo en cuenta la estraté­gica ubicación de la capital del departamento de Ñeembucú.