El humorista y diseñador gráfico Jorge “Yor” Torres, compañero en Nación Media, nos dejó el pasado viernes. Aquí un breve repaso por su trayectoria, sus ideas y la opinión de reconocidos colegas, quienes destacan su tarea en el humor y el dibujo con sentidas palabras ante una partida que se siente demasiado temprana.
Jorge “Yor” Torres comenzó en la publicidad, pero rápidamente llevó su ingenio al Diario Popular, donde dio vida a Populín, personaje insignia de los suplementos escolares del medio. Más tarde, ya en Crónica, dio a luz a Bochito, otra de sus celebradas creaciones.
Sus cuadros de humor se disfrutaron también en La Nación, donde se destacó por la observación aguda de la realidad.
Fanático del Club Libertad, era habitué de la mesa de análisis futbolístico del copetín La Familia, frente a La Nación, en reuniones en las que supo abrir las puertas a las carcajadas con sus ocurrencias. Ilustrador y diseñador de Nación Media, ofrecía dosis de humor a partir de la realidad cotidiana, además de aportar al diseño de la tapa del Diario Crónica, así como de las caricaturas de productos escolares.
“Dibujante y humorista como tantos otros, sigo queriendo creer en la humanidad más allá de las diferencias y los prejuicios que ella tiene con nosotros… Se nos dio el don del trazo fácil, el humor a veces inteligente… ¡y el sarcasmo!”, había expresado Yor para la muestra “Humor y ambiente”, organizada en 2017 por Roberto Goiriz.
“Es nuestro deber siempre darle buen uso y en defensa de las mayorías oprimidas y sin voz… utilizarlo para las minorías absolutistas y decadentes nos vuelve parte mísera de ellas. Una sonrisa para mi pueblo, una alegría en mi alma”, manifestaba Torres, cuya pluma digital apoyó generosamente diversas causas solidarias y sociales.
En agosto de 2021, en una publicación de El Gran Domingo de La Nación/ Nación Media, tras el impacto del humor en medio de la oscura época de la pandemia, Yor había compartido: “En ese ambiente de duda, de temor y hasta a veces enojo porque no llegaban nunca los insumos y parecía que todo caía sobre el ciudadano común nomás, el objetivo era por lo menos generarle un momento de distensión al lector”.
Y agregaba un dato no menor: “En medio de todo, el humorista está pasando también por la misma realidad como ciudadano, entonces cuando hace un chiste debe administrar también su propia experiencia o su propia rabia o dolor, ya que más de uno tiene un familiar enfermo. Obviamente que eso también uno transmite cuando habla de las cosas que se deberían hacer mejor y lo hace a través de un humor crítico”.
LO VAMOS A EXTRAÑAR
Carlos “Caló” Sosa Sanabria (Humorista gráfico)
Las veces que coincidimos siempre la pasamos bien, era agradable y tenía una chispa y un estilo muy característico. Se lo va a extrañar mucho en los espacios que él ilustraba. Lo conocí poco, pero disfruté de su compañía. Era una persona muy frontal que siempre estaba elucubrando, pensando temas, tenía un don privilegiado. Fue un gusto coincidir en esta vida. Por breve que haya sido su paso, nos deja demasiado joven y el gremio en sí lo lamenta. Lo vamos a extrañar. Yor tenía un humor con el que me identifico bastante. Me parecía que yo soy un Yor, que todos tenemos uno adentro. La acidez y la crítica presentes en sus textos y sus dibujos son notorias, punzantes. Era directo, conciso, generaba un impacto a primera vista con el texto breve directo, a veces hiriente, que te deja pensando y se notaba que era un muchacho al que no le gustaban las injusticias. Lo de Yor debió tener un espacio más importante y es algo que nos damos cuenta solamente cuando alguien se va. No hablo de medios, sino de mercado, porque somos un mercado pequeño donde las personas leen poco y se pierden un poco las genialidades que algunas personas traen y desarrollan en su trabajo. Hubiera sido bueno la posibilidad de un libro con su obra.
TENÍA MUCHO PARA DAR
Kike Olmedo (Dibujante)
¡Qué pena…! Una excelente persona. Cuando lo conocés, casi que no creés que es un dibujante de humor. Era tan tranquilo, tenía gran gusto musical, en especial por Green Day. Recuerdo que estando en su barcito a la vuelta de Juan de Salazar, le visité muchas veces y comiendo las empanadas, hablábamos de dibujo. Tenía un humor muy fino. Daba gusto hablar con él, porque se podía conversar, intercambiar pareceres. Estábamos en un grupo de Whatsapp de dibujantes en el que nunca hicimos el asado, era un buen tipo, un día me quedé sin batería en el auto y él que ni vehículo tenía me consiguió la solución. Compartimos el gusto por la música, con largas charlas y veíamos conciertos en video en su local. Me gustaba mucho su humor sencillo y específico para transmitir. Con pocas líneas lograba el objetivo, que el receptor del chiste se sienta identificado.
Siempre me decía que le hubiera gustado dibujar un poco más, pero así como yo elegí el cómic, el humor es un camino distinto y válido. Se fue pronto, tenía mucho para dar. Me sorprende muchísimo.
UNA PARTIDA QUE PEGA MUY FUERTE
Nelson “Dibu” Marín Dibujante)
Teníamos una amistad entrañable. Como colega, lo primero que hice cuando llegué a La Nación fue imitar su estilo porque él salió de vacaciones. Tuve que imitarlo para hacer el suplemento escolar y algunas ilustraciones que tenían que tener la línea de trabajo de él. La primera computadora que usé fue la Mac de él. Fuimos amigos de la noche también. Era infaltable en los conciertos de Dosis. Tenía una mente brillante para captar todo lo que estaba en el ambiente, en la atmósfera, que si bien es un ejercicio de los humoristas gráficos, él siempre iba más allá. Mi papá era fanático de sus chistes, no paraba de reírse, mamá también. Se le quería mucho, se le va a extrañar porque él era rockero de pura cepa. Pega muy fuerte a la comunidad de los dibujantes. Se lo va a extrañar.
GOOD MORFI
Nico Espinosa (Humorista gráfico)
Había un lugar sobre la calle Tacuarí, a la vuelta del Centro Cultural Juan de Salazar. Allí caímos todos después de alguna muestra, exposición o recital realizado en ese lugar. Good Morfi, buen nombre, ricas minutas, cerveza siempre bien helada y uno de los propietarios, Yor.
Una vez llegué con unos amigos, nos ubicamos, vino Yor a atendernos y le presenté a mis amigos: “Este es Jorge, más conocido como Yor, dibujante, humorista gráfico, diseñador y en sus horas libres, catador de empanadas”. La risotada fue general. Yor con su habitual sonrisa de niño gordito trajo nuestro pedido y se sentó con nosotros. Por supuesto, el nombre Good Morfi hacía honor a las empanadas y las croquetas que deglutimos aquella vez. Good Morfi no duró. O duró tal vez lo que permitió el carácter bohemio de aquel dibujante de abundante vientre. Yor, humorista gráfico, creador de un estilo inconfundible, personalísimo y creativo. Sus personajes siempre lucían prominentes narices, ojos fuera del rostro que ocupaban toda la superficie de la cabeza y en el caso de las mujeres, pestañas puntiagudas y bocas pequeñitas.
Yor, personaje infaltable en toda farra entre compañeros, alma de asadero, degustador de las cervezas más frías y alegres, confieso que nunca lo vi enojado ni serio, siempre bonachón. Un tipazo prototipo del compañero ideal de todas las farras.Yor, la calle Zavala Cue te extrañará más que cualquiera de nosotros.
Tu caminar con los brazos despegados del cuerpo, tu mochila a la espada y la cola de tu camisa al viento rumbo al laburo, en adelante será una imagen que los que te conocimos tendremos en nuestras retinas, y ese saludo, con la mano en alto y tu sonrisa de siempre lista para reír ante una broma. Yor… ahora en más ya no pagarás entrada en ningún recital de rock. Y estoy seguro de que no faltarás a ninguno de tus queridos Pink Floyd.
“Le debo todo lo que hice”
Melki Melgarejo (Humorista gráfico)
“Como persona primeramente y como artista le debo muchísimo a él porque cuando él se iba a ir a Crónica me dejó su espacio en Popular y gracias a ese dinero que gané ahí, tuve la posibilidad de emigrar, prácticamente por él es que llegué hasta aquí (vive en Canadá). El tipo nunca me reclamó, es más cuando le agradecía pasaba a otro tema con una de sus habituales humoradas.
Tenía un estilo muy particular, diferente, con mucho humor, admirable, el mejor de los recuerdos para el querido Yor, una tristeza y una pena su partida.
Definiría sus textos como chistes inteligentes, y como estilo, tenía uno muy original, más que nada buscaba la practicidad, sus líneas son sencillas, pero cuando lo reemplacé en Popular, encontré la cantidad enorme de trabajo que él hacía. Tenía un estilo que le daba oportunidad de crear más, de hacer más trabajo. Tuve en manos muchos originales de “Populín” donde se podía ver la cantidad de trabajo que había hecho para llegar a ese material.
Por otro lado con el tipo nunca ibas a estar triste, las veces que tocaba compartir con él era excepcional, me acuerdo una noche con todos los dibujantes de Chake que nos reunimos en su bar y también cuando nos conocimos en la embajada de Francia cuando vino el gran caricaturista Plantu (Jean Plantureux).
“Le tenía mucha admiración”
Roberto Goiriz (Dibujante)
“Lo conocí por sus publicaciones cuando comenzamos con la iniciativa de mostrar nuestros trabajos en galerías con “Chaque, muestra del humor grafico y la historieta en Paraguay”. Lo suyo era realmente diferente, tenia un humor especial, inteligente, muy agudo y su trazo era de una gran síntesis y elegancia, le tenía mucha admiración. Era una persona muy buena, predispuesta a colaborar con la actividad gremial… El espacio del humor gráfico está en los medios de comunicación, pero justamente, cuando organizamos la muestra, la idea fue juntar a las personas que trabajamos para que sea vea el volumen de la creación y el reconocimiento a cada una de ellas y Yor tuvo el reconocimiento de los colegas, se le respetó y admiró muchísimo. Era una persona muy práctica y aplicada, con un volumen grande de trabajo que conseguía llevar adelante sin perder calidad, siempre tuvo un nivel de calidad alto. Admirable en sus ideas y sus trazos, era una buena persona, siempre predispuesta a apoyar a los demás. "
“Lamento que se haya ido joven”
Carlos Argüello (Dibujante)
“Me cupo conocerlo no como amigo de farra, sino en una reunión de dibujantes. Era muy creativo, sus chistes eran finos e inteligentes, no recurre a la chabacanería, trabaja materiales para analizar y reirse internamente. Su forma de encarar el chiste me encanta, no es apresurado, es refinado y puede llegar a desatar la carcajada… Melki me dijo que gracias a él pudo entrar en Popular, lo que denota una persona muy noble, sin envidia, sin tapujos. En nuestro país es un oficio duro para el que se inicia el ser dibujante/humorista, pero tenemos la ventaja que tenemos internet, redes donde podemos expresar habilidad y talento. Los humoristas gráficos lograron muchas cosas al poder acceder a un medio masivo, eso hace que muchos tengan esperanza de hacer una profesión noble y de futuro. Como dibujante logré todo lo que tengo gracias al dibujo, entonces pienso que teniendo talento y empeño en hacer bien las cosas rinde sus frutos, Yor lo ha logrado, poniendo en alto el dibujo. Le vamos a extrañar mucho, porque era una persona muy agradable. Nacemos, nos criamos y terminamos, ahora es sentir la ausencia y tener tristeza. Lamento que siendo tan joven se nos haya ido”