En esta edición del programa “Expresso”, transmitido por GEN/Nación Media, Augusto dos Santos recibe a Lea Giménez (LG), integrante del equipo de transición del gobierno electo, y al futuro ministro de Hacienda, Carlos Fernández Valdovinos (CFV), quienes hablan de los planes inmediatos a ser ejecutados en los primeros cien días de gestión y las políticas públicas que se impulsarán durante el próximo periodo presencial con vistas a aumentar los ingresos del Estado y mejorar la calidad del gasto público. Además del desempeño económico, ambos referentes coinciden en la importancia de apostar por la formación del capital humano a fin de lograr el desarrollo integral del país.
- Fotos Eduardo Velázquez
–ADS: Hoy estamos con dos protagonistas muy importantes de la futura gestión para tratar de dibujar los primeros cien días de gobierno, sus características, sus énfasis, sus puntualizaciones y prioridades.
–LG: Estamos muy ansiosos de empezar. Estamos armando un hermoso equipo de la Albirroja. Realmente gente muy preparada, con mucha experiencia en los diferentes ámbitos. Tuvimos varios viajes a países amigos. Muchísimo interés en Paraguay. Estamos muy emocionados realmente con la posibilidad de volver a hacer que el Estado se enfoque en la ciudadanía, como la ciudadanía espera, y empezar a generar rápidamente resultados que realmente todos los paraguayos estamos esperando.
–¿Cuáles serán las primeras medidas?
–CFV: Estamos básicamente viendo las medidas, tratando de pasar incluso algunos proyectos de ley que creemos que van a ser muy importantes como para tener resultados inmediatos. La carrera ya empezó, o sea, no empieza a partir del 15 de agosto, sino que ya hemos empezado. Hay una serie de proyectos de ley que estuvimos trabajando, están presentados en el Congreso a través de algunas figuras políticas que representan al nuevo gobierno y esperemos pasar eso en la brevedad posible. Otra cuestión que por lo menos en la parte económica para mí fue muy importante es este alto grado de endeudamiento que se tiene con proveedores del Estado, que crea un cuello de botella enorme para el funcionamiento de la economía, y en eso también ya estuvimos trabajando.
–¿Ese va a ser un asunto importante?
–CFV: Va a ser un asunto importante a futuro y ni qué decir después con la cuestión de la expectativa que se está generando sobre este gobierno, con mucha gente interesada en venir, y a quienes hay que hablarles, explicarles nuestro plan, ayudarles a venir a aterrizar para que hagan las inversiones y creen los puestos de trabajo que van a ser necesarios para mejorar la situación de vida de los ciudadanos.
ABORDAJE INTEGRAL
–Qué persistente ha sido en su calidad estructural la economía paraguaya que sobrevivió a este gobierno, ¿no?
–LG: Sí, totalmente, porque el tema de la economía siempre está en el centro de los esfuerzos principales. Por supuesto, la gente también habla de la importancia de la calidad de la educación, de la salud, de la seguridad, pero primero que nada el empleo, dinero en el bolsillo. Y en ese sentido también nosotros venimos trabajando, no es algo de los últimos meses, de los últimos años, sino realmente una visión de largo plazo de evolución de lo que son las instituciones de Paraguay. Hoy ya no hablamos solamente de un Ministerio de Hacienda, no queremos un cajero, queremos un ministerio que tenga una visión de largo plazo, una visión de continuidad, de desarrollo, y una visión mucho más amplia más allá del Presupuesto General de la Nación, realmente mirando lo que es el potencial de nuestro país y la necesidad también de desarrollo que tiene. Y hay cambios importantes que tienen que darse para mejorar la gestión del Estado. Nosotros seguimos trabajando en un Estado bastante como un archipiélago, donde cada uno trabaja en silos diferentes. Muchas veces las cabezas institucionales quieren inaugurar entrega de casas, entrega de programas, entrega de diferentes cuestiones, pero la realidad es que los problemas de las personas y de las familias son problemas que tienen múltiples dimensiones que tienen que ser abordados integralmente.
–¿Cuáles son los beneficios de la fusión SET-Aduanas?
–CFV: Primero el ahorro de recursos al meter dos entidades recaudadoras dentro de una. Yo no soy tan radical como algunos senadores que en la semana pedían que salga la gente. Yo creo que hay derechos adquiridos, tenemos que tener mucho cuidado de no crear una crisis social ahí. Pero básicamente la idea de eso es mejorar la eficiencia recaudatoria. Si uno mira los datos, la SET por lejos ha tenido mejor desempeño en términos de incremento en la recaudación en los últimos 10 años con respecto a Aduanas, que incluso tuvo caídas en las recaudaciones en años en los cuales la economía crecía, cosa que no se explica. Entonces ese modelo de gestión automatizado, en donde se tiene menos relevancia o se le da menos relevancia al factor humano, es lo que hizo que la SET tenga este mejor desempeño y eso se quiere trasladar a Aduanas. Ahora bien, esto forma parte de la idea principal, que es la creación de un Ministerio de Economía.
–LG: Lo que se va a hacer es potenciar la capacidad recaudadora y también el control de los recursos, que finalmente son recursos de todos los paraguayos.
–¿En qué beneficiará la unificación?
–CFV: El 90 % del tiempo uno se ocupa de las cuestiones recaudatorias, por lo que te queda muy poco tiempo para empezar a pensar en políticas de corto, mediano y largo plazo de políticas económicas y sociales. Entonces, la parte operativa debería salir y eso es lo que está saliendo, que es la SET. El diseño de la política, el norte para la política fiscal, que incluye la política tributaria, va a seguir quedando en este Ministerio de Economía. Pero va a tener mucha más libertad de empezar a pensar en las cosas importantes. ¿Cuál es el futuro que queremos para Paraguay en términos sociales y económicos? ¿Cuál es el camino que tenemos que tomar para llegar allá? Entonces, ese es el tipo de concepción que vemos para el Ministerio de Economía ahora y que deje de ser simplemente un cajero que recauda y pasa, y pensemos realmente en la economía para que llegue al bolsillo de la gente.
–LG: Acá el foco es fortalecer esa capacidad de hacer política pública de corto, mediano y largo plazo del Ministerio de Hacienda y no solamente mirar a ese un año, sino enfocarse realmente en el potencial de Paraguay. Paraguay hizo bien su tarea de lo que es la macroeconomía. Yo creo que eso tenemos que seguir ajustando. Después de los últimos cinco años hay cuestiones que hay que trabajar para volver a retomar la senda. Nuestra macroeconomía es bastante fuerte, pero ya hace cinco años hablábamos nosotros en la importancia de empezar a profundizar las políticas públicas, no solamente la macro, sino tenemos que entender también cómo la macro permea la micro. Y ya no es el salpique que tal vez funcionó en los últimos 20 años. Yo creo que hoy tenemos que trabajar con mucha más fuerza en lo que es la educación, en lo que es la salud. No hay país que se haya desarrollado y que no haya apostado fuertemente a estos sectores, que es la formación de capital humano.
RECURSOS LIMITADOS
–Muchas veces la construcción de un presupuesto está muy viciada por intereses sectarios. ¿Cómo piensan abordar esto?
–CFV: Va a ser desafiante, principalmente por la cuestión de que van a haber muchas demandas porque es un gobierno nuevo, pero lógicamente los recursos son limitados. Entonces, lo que hay que hacer es una priorización de las cosas. Hay que ser conscientes de que no va a alcanzar para todo el mundo y que tenemos que buscar en la medida de lo posible mayores recaudaciones para satisfacer la mayor cantidad de demandas. Por eso esta fusión, un número que creo que es importante mencionar. Se espera que con esta unión entre Aduanas y la Secretaría de Estado de Tributación se pueda conseguir en el mediano plazo un 1 % más del PIB en recaudaciones, unos 400 millones de dólares, que es un número significante como para poder financiar muchas de las necesidades que vamos a tener.
–Algunos califican el proyecto del Ministerio de la Familia de una especie de arrebato fundamentalista y otros dicen que es un intento por la organicidad. ¿Cuál es la realidad?
–LG: En realidad no es un proyecto de ley para crear el Ministerio de la Familia. Este es un proyecto de ley que habla de la reestructuración del Estado y que hace parte de tres patas fundamentales que fueron justamente, de alguna manera, el quid pro quo en el contexto de la pandemia. Se hablaba de la ley de compras públicas, de abastecimiento del Estado, se hablaba de la ley del servicio civil y se hablaba también de la ley de reestructuración del Estado. Vamos a mejorar el funcionamiento del Estado. La ley de reestructuración del Estado busca ordenar un crecimiento desordenado del Estado. Hoy lo que se busca es dejar que se sigan generando instituciones que no tienen capacidades y hacer que puedan complementarse, interconectarse y responder a aquello de que los problemas son multidimensionales y requieren de un abordaje integral de la política pública. Por ejemplo, el tema del combate a la pobreza. Cuando hablamos del combate a la pobreza y después decimos entregamos un programa social Tekoporã y acá adultos mayores y allá entregamos una casita. Y después no tenemos realmente un entendimiento global de cómo efectivamente estamos ayudando a esa persona o a esa familia para salir adelante en lo que es, por ejemplo, la graduación de la pobreza. Entregarte una casa no te va a solucionar el problema, pero si yo como Estado tengo una visión integral de la problemática y puedo brindarte herramientas útiles para que vos consigas un empleo, puedas financiarte incluso tal vez tu propia casa, gracias al acceso a capacitación, a empleo, etc. Y acompañamos desde el ámbito de la educación y de la salud a lo que son los miembros que hacen a tu familia. Ese abordaje integral es fundamental para la efectividad de la política pública y para que ese dólar que invertimos realmente tenga el mayor retorno posible en términos de calidad de vida para las personas. Nuestro objetivo es mejorar la calidad de vida de los paraguayos.
DEUDAS
–¿Cómo piensan manejar el tema de la deuda con los sectores de la construcción y las farmacéuticas?
–CFV: No podemos simplemente ignorar deudas que existen, pero no están contabilizadas. Tenemos dos tipos de deudas, la deuda formal y la deuda informal. La deuda formal en la que dice que tenemos 34 % del PIB de endeudamiento. Pero esa no es la verdad. Hay una deuda que está en el sector informal y no está contabilizada. Entonces necesitamos traspasarla a la parte formal. Si es una deuda legítima, auditada, se entregaron los bienes, se hicieron las rutas, eso hay que reconocer y encontrar un plan de pago para eso. Pero primero hay que reconocer, segundo contabilizar exactamente y tercero tener el plan de pago. Estamos avanzando los dos primeros. Ya estamos llegando a un acuerdo con el actual ministro de Hacienda para contabilizar cuánto es. Seguramente siempre se va a escapar algo, pero estamos llegando a un número agregado y a partir de ahí vamos a proponer un plan de pago que lógicamente es imposible pagar algo como 500 a 600 millones de dólares con los impuestos existentes. Vamos a tener que pasar a emitir, a pedirle ayuda a los multilaterales y me decían otra vez endeudamiento, pero la deuda ya está y hay que pasarla del sector informal al sector formal.
–LG: Y es importantísimo entender acá que si no emitimos deuda, lo que tenemos hoy es aún peor, porque hoy ya se están generando intereses moratorios con el sector privado y los intereses ahí son mucho más altos que aquellos que se pueden llegar a generar en el sistema financiero internacional a través de por ejemplo una emisión.
–¿Cuál es la incidencia de la obra pública en la mejora de la economía puntual?
–LG: Tremendamente importante. O sea, obras públicas, el sector de la construcción han sido motores fundamentales del desarrollo de Paraguay en los últimos 20 años y especialmente en los últimos 10 años. Y creo que durante los últimos cinco años fue tal vez uno de los motores importantes. Por más que se hizo mucho asfaltado y se puede discutir ahí si fue bueno o malo en general, fue uno de los sectores que generó circulante durante los últimos cinco años. O sea, un sector fundamental que no podemos dejar de potenciar, más todavía dadas las necesidades y las brechas de infraestructura de Paraguay.
–CFV: Con un balance. Porque tampoco se puede hacer obra pública sin importar, por ejemplo, otros sectores importantes para el crecimiento como el capital humano, salud, educación, o sin tomar en cuenta la macro. O sea, no es una cuestión de ser como Ecuador, que en su momento llegó a ejecutar 15 % del PIB por año en obras públicas, pero después esto necesita mantenimiento. ¿Cómo hacemos para mantener todas esas rutas? Y bueno, Ecuador entró en un problema por causa de eso.
–LG: La infraestructura no es solamente puentes, rutas, caminos vecinales. Estamos hablando también de acceso a agua, de transmisión de la electricidad, escuelas, cuestiones tecnológicas, hospitales.
INVERSIÓN DEL SECTOR PRIVADO
–¿Cuáles serían las alternativas de financiamiento de las obras?
–CFV: Y se va a recurrir a algo que creo que quedó de lado y fue un suceso: las alianzas público-privadas. O sea, acá no tiene que ser únicamente el Estado el que termine invirtiendo. Tenemos que meterle más al sector privado. Yo creo que la gente que va a Ciudad del Este puede decir “en vez de 5.000 pago ahora 15.000″. Pero nadie protesta porque se tiene una ruta que te deja llegar a Ciudad del Este en tres horas o tres horas y media, y no en cinco o seis horas como era anteriormente. Entonces tenemos que seguir apostando a ese instrumento.
–¿La alianza público-privada por su pertenencia a un proceso anterior quedó un poco relegada?
–CFV: Bastante y voy a mencionar uno de ellos que para mí es simbólico porque queremos traer inversionistas, pero uno llega al aeropuerto y cuál es la primera impresión que un inversionista tiene. “Voy a apostar por Paraguay, me bajo y después llego a ese aeropuerto”. Y ahí creo que fue un poco de, no sé, celos, envidia, no sé cuál fue la idea. Estaba todo listo para la APP del aeropuerto, pero se canceló y tenemos ahora unas obras sobrefacturadas.
–¿Cómo hace un Estado para controlar el funcionamiento de instituciones tan descentralizadas como 17 gobernaciones en un país unitario con sus propias municipalidades y compañía?
–LG: Yo creo que hoy nosotros estamos en un contexto bastante diferente en el ámbito de la tecnología, por ejemplo. Nosotros tenemos que ser lo suficientemente inteligentes para aprovechar el acceso a esa tecnología para tener un mejor control y trazabilidad de cómo se usan los recursos. Y yo creo que la descentralización tenemos que entenderla un poquito pensando fuera de la caja. No es solamente que cada uno de los departamentos y municipalidades tengan sus repliques de lo que es el gobierno central, sino más allá de eso hacer que el gobierno central llegue a los departamentos. Algo donde había mucha queja era, por ejemplo, cuando estaba en la campaña reuniéndome con un montón de gente, con empresarios de diversos sectores, que a la hora de llevar adelante cualquier emprendimiento, una nueva industria, una maquila, se necesitaba ir y venir a la capital perdiendo un montón de tiempo, un montón de recursos, días, calidad de vida. Entonces, ¿por qué tenemos que hacer todos esos procesos que parecen engorrosos e innecesarios? ¿Por qué no podemos resolver eso hoy con los avances tecnológicos que existen? Y creo que ahí una de las propuestas importantes que vamos a tener que trabajar con Hacienda, con el Ministerio de Industria y Comercio y otras instituciones es asegurar que existan servicios integrales para hacer que se extienda ese brazo del Estado en los diferentes departamentos y ciudades del país. Entonces, tenemos que ser inteligentes y aprovechar las capacidades que tenemos de manera mucho más eficiente y eso depende mucho también de la voluntad política, de cómo trabajamos.
–CFV: Yo creo que fue una moda esa cuestión de descentralización en los años 90. Pero no tenemos que pensar ni en total centralización ni en total descentralización. Yo creo que hay tonos de grises en los cuales podemos movernos. Y lógicamente hay que aprender de las cosas que pasaron y empezar a tocar algunas cuestiones. Porque lo mismo nos sirve a veces un esfuerzo aislado de un municipio dentro de una gobernación y teniendo un gobierno central, por ejemplo, para cuestiones de salud. Puede haber proyectos en los cuales se pueden coordinar las acciones y tener un mejor resultado finalmente de lo que se tiene de manera totalmente descentralizada.
RECURSOS DE LAS BINACIONALES
–¿Qué mirada tienen al respecto de los recursos de las binacionales?
–CFV: La gente cree que es una mina de oro inacabable. Y qué hacemos, nos falta esto y vamos a pedirle a Itaipú, a Yacyretá. Pero si vos sumás todo eso, es 40 veces más de lo que se tiene disponible por lo general. Y como todo recurso, hay que saber usarlo de manera inteligente. Cierto que se tiene más flexibilidad en el uso de esos recursos, pero eso debe estar enmarcado en un plan de gobierno, en un plan de salud, en un plan económico, en un plan de educación. No que cada uno se le ocurra una idea y empiece a manotear ahí los recursos. Tiene que estar en un marco, tiene que estar dictado por lo menos dentro del Ministerio de Desarrollo Económico y Social.
–LG: Y más allá de los recursos, en Itaipú lo que nosotros necesitamos es una visión estratégica de lo que es el sector energético. No es solamente Itaipú, no es solamente Yacyretá, no es solamente Ande. Nosotros necesitamos articular los esfuerzos muchas veces desconectados que se dan en estos ámbitos para poder generar de repente lo que va a ser la negociación, qué va a significar para Paraguay y por qué eso. No es solamente el 100 millones más o 100 millones más.
–CFV: Debemos superar la visión rentista. Lo mejor que podemos hacer es usar la energía, no venderla a Brasil. Entonces tenemos que empezar a desarrollar las ideas, los proyectos, las políticas de manera tal que usemos ese 50 % de la energía que nos corresponde y no estemos vendiéndola a Brasil.
–LG: Y no es solamente usar en cualquier cosa. No es solamente criptomonedas, por ejemplo, que rápidamente se puede usar toda la energía. Y eso es tal vez lo último que queremos. Nosotros queremos que la utilización tenga un impacto positivo en la generación de empleo, en el desarrollo del país, en los ingresos para el país, la formalización misma. Entonces creo que es fundamental tener esa visión integral. Creo que el hecho de que vamos a tener un ministerio, si se da esa ley, yo creo que se va a aprobar porque tiene enorme sentido. Vamos a tener realmente un cerebro económico mucho mejor articulado que nos va a permitir realmente pensar con esa visión más amplia y no ya del cajero al cual estamos acostumbrados.
–¿Cómo ven al paciente Estado en este momento? ¿Lo ven obeso? ¿Lo ven con considerable sobrepeso? ¿Lo ven gordito, pero con voluntad de bajar? ¿Lo ven bien, pero tiene que bajar de peso o basta con que haga unos ejercicios y se mantendrá en línea?
–CFV: Lo veo como un futbolista que tiene las piernas muy finas y unos bíceps enormes. Es decir, lo que más usás o lo que más deberías usar no está tan desarrollado. Tenemos un Estado muy presente en lugares donde no debería estar, caña, y el Estado ausente en donde debería estar, salud, educación, seguridad.
–LG: Y más que nada, no es ni gordo ni flaco. Yo creo que eso no está en discusión. Es un tamaño, digamos, que es adecuado para Paraguay, pero sí necesita hacer mucho más ejercicio. Eso de las instituciones trabajando cada una por su lado no puede ser. Nosotros necesitamos articular esos esfuerzos para que cada dólar invertido tenga un impacto importante.
PRIORIDAD
–¿Qué importancia se le dará a la educación?
–CFV: Es fundamental. Creo que todos estamos de acuerdo. Mismo el presidente quiere estar personalmente a cargo de lo que es esta parte de política educacional y lógicamente va a tener toda la prioridad dentro de las escuálidas cajas fiscales para darle los recursos que se necesitan. Y gastar mejor los recursos que se le da. ¿Qué hace el Ministerio de Educación construyendo escuelas? Vamos a pasar a donde corresponde, que es el MOPC, y que Educación se focalice en mejorar la política educativa que tenemos acá.
–LG: Si Paraguay realmente va a dar un salto importante, un salto cuántico en términos de desarrollo, nosotros tenemos que poner el foco en lo más importante, que es la gente, el capital humano de este país. No existió en ningún país del mundo el desarrollo sin inversión fuerte en capital humano. Necesitamos cuestiones bien básicas, que los niños aprendan a leer, que los niños aprendan a escribir, que entiendan lo que leen, que las matemáticas les sirvan. No es solamente sumar y restar, sino tener una visión crítica del mundo, tener capacidad de absorber, digerir y tomar decisiones en medio del tsunami de información que llega hoy a los chicos. O sea, tenemos que empoderar a nuestros chicos con herramientas para lidiar con el mundo actual y con el mundo futuro, que es muy diferente al mundo que conocíamos nosotros cuando íbamos a la escuela. No tenemos tiempo que perder, estamos muy atrasados en esta tarea. Entonces, es fundamental no perdernos en discusiones inertes. Nuestros chicos necesitan herramientas para ser exitosos, porque del éxito de ellos depende el futuro y el éxito del Paraguay.
LG: “Si Paraguay realmente va a dar un salto importante, un salto cuántico en términos de desarrollo, nosotros tenemos que poner el foco en lo más importante, que es la gente, el capital humano de este país. No existió en ningún país del mundo el desarrollo sin inversión fuerte en capital humano”.
CFV: “Debemos superar la visión rentista. Lo mejor que podemos hacer es usar la energía, no venderla a Brasil. Entonces tenemos que empezar a desarrollar las ideas, los proyectos, las políticas de manera tal que usemos ese 50 % de la energía que nos corresponde y no estemos vendiéndola a Brasil”.