Cuando todos pensaban que estaba delicada de salud por su ausencia en el parlamento, Isabel II apareció sonriente en varios actos, sin avisar que llegaba. Feliz, parece estar lejos de su retiro. En Madrid, los reyes ofrecieron la primera cena de gala pospandemia al emir de Qatar y su (primera) esposa con un vestido del argentino Gabriel Lage que impactó a todos. Cannes brilla con el mejor cine y la moda de alta costura, como siempre.
SORPRESA REAL Y NOVEDADES
Gran Bretaña está en plenos festejos del Jubileo de Diamante de Isabel II (96) y los medios mostraron su preocupación hace poco más de una semana cuando ella faltó a la lectura anual del discurso ante el Parlamento, siendo reemplazada por el heredero Carlos (y Camilla acompañándolo) con Guillermo y Kate. ¿Isabel estaba muy enferma? ¿Estaría ya pensando en abdicar a favor de su hijo? Pero el martes pasado todos quedaron estupefactos cuando la vieron llegar de amarillo de pies a cabeza, con su nuevo bastón en mano en la estación de metro, para inaugurar (sacó el primer boleto) la nueva línea que lleva su nombre “Elizabeth Line”. Divertida, sonriente y alegre y sin anunciar previamente su presencia, compartía con todos y hasta tomó el metro para ir de una estación a otra. Pero eso no es todo, dos días antes, también sin avisar previamente, apareció regia vestida de azul claro tal vez dando el mensaje de que ella será “Reina hasta el final”, presenció feliz el un espectáculo ecuestre en Windsor el domingo, después de haber viajado a otra prestigiosa competencia de caballos, el Windsor Horse Show, en el que varios de sus caballos compitieron el viernes. Fue la otra sorpresa cuando todos pensaban que ya no verían a la soberana y fue la única miembro de la familia real, acompañando a su nieta Lady Louise Windsor, la hija mayor de su hijo Eduardo que heredó de Felipe su pasión por conducir carrozas. Y, como si fuera poco, ante la inminencia de los festejos de Jubileo que arrancan el 2 de junio, la soberana ha anunciado que Angela Kelly, su modista de cabecera que creó sus looks coloridos, se queda a vivir con ella como personal assitent, y se dispuso para ella una suite contigua a la de la soberana, para ayudarla con el estilismo y la movilidad.
LETIZIA Y SU REGIO VESTIDO
Con su base de tul con bordados arabescos en color champagne rosado, iluminados con imprimé laminado platino y aplicaciones de cristales, la reina Letizia se presentó en la primera cena de gala ofrecida en honor al nuevo emir de Qatar y su primera esposa –tiene dos más– en palacio. Los medios españoles hablaron del magnífico traje de la reina, una obra de alta costura de un diseñador que por primera vez la viste.
Se trata del argentino Gabriel Lage, que había diseñado hace unos años el vestido que lució en la cena oficial de Juliana Awada la entonces primera dama argentina y “fascinó” a Letizia con su belleza. Fue tan impactante este vestido lucido por Letizia que se decidió por no llevar tiara ni más joyas ni condecoraciones que los imponentes pendientes de diamante en forma de flores que la pareja real de Qatar le regaló al llegar a Madrid aunque los mismos irán a parar al patrimonio de la casa real y no al joyero personal de la reina, como marcan las reglas. El emir de Qatar y su primera esposa, Jawaher, llegaron a Madrid. Ella, siguiendo la tradición musulmana, si bien no usó velo, lució un conjunto blanco de Chanel y para la cena, un Louis Vuitton en negro con capa corta de cuero que cubría los hombros de ella. Es la primera vez que el jeque Tamim bin Hamad Al Thani realiza un viaje oficial con una de sus esposas, la primera en este caso, con la que tiene 4 hijos.
CANNES: CINE Y LUJO
El festival de Cannes en la riviera francesa, abre la temporada de grandes encuentros con el cine en Europa y ya es un clásico que las más bellas estrellas de Hollywood o del cine europeo paseen por la red carpet de la Croissette, los más exclusivos modelos de alta costura y las joyas maravillosas que generalmente les ofrece –por una noche– la famosa joyería Choppard. Tom Cruise será homenajeado y ha acudido con su coprotagonista, Jennifer Connelly, en a promocionar su nuevo filme “Top Gun: Maverick”. Thierry Frémaux, el delegado general del festival, afirmó que Cannes es un compendio del cine de todo el mundo, desde el de Hollywood al más pequeño e independiente y Cruise debe estar aquí.
“Es el mayor talento que defiende las películas en salas y representa el cine contemporáneo”. En esta 75ª edición del festival de Cannes se lucieron la presidenta del jurado de la cámara de oro, la española Rosy De Palma, con looks de YSL, también Eva Longoria con Alberta Ferretti y un mono de Eva di Morávito verde menta espectacular. Vimos en la alfombra mucho “rosa Valentino” en distintas actrices como otra miembro del jurado Berenice Bejo y la española Nieves Álvarez. Julia Roberts, sencillísima, con un traje de Armani. Ella Fanning, con un delicado vestido azul celeste de Dior. El presidente del jurado, Vincent Lindon, que tuvo una relación con la princesa Carolina hace años, llegó acompañado de su colega Julianne Moore, de negro y esmeraldas. Una conjunción de cine y moda que como cada año da que hablar.