Hoy Toni Roberto hace un alto en sus tradicionales “Cuadernos de barrio” y recuerda al malogrado fiscal Marcelo Pecci, haciendo además un homenaje a todas las madres en su día a través de Maricel Albertini, madre de este gran fiscal y tía del corazón de nuestro columnista.
- Por Toni Roberto
- tonirobertogodoy@gmail.com
Son las 11 de la mañana del martes 10 de mayo, escribiendo el artículo para el domingo y de repente escucho de fondo un grito, era mi madre, se estaba enterando del asesinato de Marcelo Pecci, en ese mismo momento me pasó exactamente lo que hace dos años cuando me comunican el fallecimiento de Jorge Nasta en marzo del 2020; una mezcla de sentimientos, de recuerdos, una película completa en un segundo y el inmediato cambio de tema para recordar a alguien tan querido, en este caso un homenaje, “El viaje de Marcelo”.
10 DE MAYO
Todos los 10 de mayo recordamos en mi familia la muerte en 1959 del legendario Dr. Leandro Prieto, la paradoja del destino, en el momento que pensaba en ello me enteraba de la trágica muerte de Marcelo Pecci, pero, ¿que tenían en común Leandro Prieto y Marcelo Pecci?, la honestidad, el hecho de ser los dos funcionarios públicos a cabalidad; decía el gran “Chiquitín” Lambaré, quien fuera su secretario privado cuando Prieto era ministro de Hacienda: “el hombre venía caminando con zapato roto, ostentando tan alto cargo”.
Pero así es la vida, un eterno suspiro que nos pueden arrebatar en un segundo, como al gran fiscal Pecci, quien había nacido en Asunción en 1977, alumno del colegio San José y que tenía una gran pasión por la aviación civil, heredada de su madre, quien trabajara en la legendaria Líneas Aéreas Paraguayas. Ese amor le llevó a soñar en rescatar del olvido una vieja máquina Convair de la inolvidable Líneas Aéreas Paraguayas y en ese tiempo conocerle a su esposa, Claudia Aguilera.
RECUERDOS DE TONY SAPIENZA
Las anécdotas sobran. Recuerda Tony Sapienza que hace tres años cuando se empezó con la idea de rescatar el avión de LAP que se encontraba en total abandono en el Silvio Pettirossi, recibe un llamado, era el comandante de la Fuerza Aérea de aquel entonces, el Gral. Juan Pablo Paredes, que le dice: “Que tal Tony, te llamo por lo siguiente, quiero pedirte permiso para darle tu número al fiscal Marcelo Pecci porque te quiere llamar”, ahí yo expresé, ‘nderasóre’ ¿un fiscal me va a llamar?, yo no hice nada malo, él me responde: ‘¡No!, es por un asunto aeronáutico’, no habían pasado ni diez minutos y suena el teléfono, era el mismo Marcelo. Muy correcto, hablamos alrededor de 45 minutos, era la primera vez que estábamos en contacto y me cuenta una cantidad de cosas; que su mamá trabajó en LAP, que leyó mi libro sobre la historia de la aerolínea y que él estaba juntando gente fanática de la aviación que quisiera formar una comisión para la restauración de Convair de LAP y sí le dije, por supuesto me apunto. Ese fue mi primer contacto con Marcelo, después lo conocí personalmente el día que movimos la aeronave en 1 de mayo del 2019 de donde estuvo 15 años, detrás del hangar que era de TAM y que ahora es de la Dinac hasta donde se encuentra actualmente en restauración”.
MARICEL ALBERTINI O EL DÍA DE LA MADRE
Una vieja película me vino a la mente, recordándole a su madre, Maricel Albertini González, que desde los años 70 se convirtió en mi tía del corazón; esa hermosa morocha de origen concepcionero que vivía sobre la calle Herrera casi EEUU, en una vieja casa italianizante con un zaguán y balcones en el barrio San Roque de Asunción.
Hoy domingo 15 de mayo, en su día quiero recordar a todas en nombre de esta madre sufriente a la que le arrebataron su hijo, al que perdimos todos los paraguayos que queremos un mejor país, una mejor nación.
Buen viaje Marcelo Pecci Albertini, el Convair de LAP te espera para volar hasta la eternidad.