Es la primera causa de muerte de mujeres en el país y, a pesar de que se dieron en los últimos años mejoras en los servicios de salud, todavía falta mucho por hacer para ayudar a detectarlo antes que sea demasiado tarde. Las mamografías se recomiendan a mujeres desde los 40 años y desde los 30 para aquellas que tengan antecedentes familiares. Este estudio permite detectar anomalías hasta 2 años antes de que sean palpables. Es recomendable realizarse una mamografía de base a los 35 años y tras los 40 años una mamografía anual; hay para ello autorizado un día libre legal. Un autoexamen mensual de las mamas será la rutina a partir de allí. Es fundamental la conciencia de este procedimiento para evitar muertes innecesarias, recuerdan especialistas.

• Por Jorge Zárate
• Jorge.zarate@gruponacion.com.py

Unas 20 mil consul­tas por año hace solo el servicio de Mastología del Instituto de Previsión Social (IPS). El frío número habla por sí mismo de una patología expandida entre nuestras mujeres que requeriría una mirada más atenta, asig­naciones presupuestarias acordes y el compromiso de acción de los actores de la salud.

Esto porque hay casos de pacientes que debe espe­rar 2 a 3 meses para pasar a quimioterapia y en radio­terapia hay pacientes que esperando el tratamiento fallecen. Datos crudos, importantes de conocer para revertir ahora que se acerca el 19 de octubre, Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mamas, el ori­gen del Octubre Rosa.

Y este no es solo un pro­blema de mujeres, el 1% de los casos que se atienden son hombres.

El autoexamen de las mamas es el procedimiento más eficaz, simple y acce­sible, aseguran los espe­cialistas que recomiendan hacérselo mes a mes a las mujeres. Autopalparse y observar en busca de signos como nódulos u otras ano­malías es la clave y reco­miendan hacerlo alrededor de una semana después del periodo menstrual.

Para los hombres, se acon­seja consultar a un pro­fesional ante cualquier situación anómala en sus pechos.

Como vemos, todas las per­sonas pueden sufrir este tipo de cáncer, aunque hay algunas que tienen factores de riesgo, como los gené­ticos, estilos de vida poco saludables, patologías antecedentes y otras cau­sales varias.

Por ello las mujeres deben hacerse mamografías y ecografías regularmente, situación que todavía es difícil para la gran mayo­ría de las compatriotas por déficits del sistema de salud y por la reticencia de las patronales a cumplir la Ley 6211 del 1 de noviembre del 2018 que concede 2 días laborales al año para some­terse a exámenes de papa­nicolaou y de mamografía.

La norma, sin embargo, está en vigencia y protege a toda trabajadora, depen­diente o no, del sector pri­vado o público, con cargo permanente, temporal o contratada, con cargo elec­tivo o no.

Patricia Martínez, del Hos­pital de Clínicas, recuerda que “el cáncer de mama tiene un impacto impor­tante a nivel personal, familiar y social. En nues­tro servicio atendemos alrededor de 4 mil consul­tas al año siendo pacientes nuevas alrededor de 2 mil. Esto se vio profundamente afectado por la pandemia y en el 2020 solo atendimos 1.500 pacientes y pacientes nuevas alrededor de 350. En cuanto a pacientes con cáncer de mama, no nos vimos afectados y mantu­vimos el mismo número de pacientes”.

A pesar de ello, Martinez considera que la atención de pacientes con patología mamaria “ha mejorado sus­tancialmente en los últi­mos 5 años debido a que tenemos mayor número de especialistas en masto­logía formados en el país. Anteriormente teníamos que ir al extranjero a for­marnos en la especialidad y hoy tenemos excelentes especialistas formados aquí que han ido a otras ciudades importantes del interior a brindar aten­ción a las pacientes. Otro punto importante es la dis­tribución de mamógrafos que mejoraron la accesibi­lidad de las pacientes a los estudios. También la crea­ción de nuevos centros de atención integral a la mujer hace más fácil llegar a nues­tra población”.

Alicia Pomata, del Insti­tuto Nacional del Cáncer (Incan), explica que “si bien aún quedan barre­ras a salvar, en los últi­mos años se ha descen­tralizado la atención a las pacientes oncológicas, que ya no solo acuden aquí, que es el centro de referencia nacional, sino que pueden recibir tratamientos qui­rúrgicos y clínicos (qui­mioterapia) en el Hospi­tal Nacional de Itauguá, el Hospital San Pablo, Encarnación, Ciudad del Este, la reciente unidad oncológica inaugurada en Pedro Juan Caballero y Villa Hayes. Sin embargo, seguimos en el objetivo de brindar tra­tamiento con radioterapia en las ciudades de mayor densidad de población. Esto es muy importante, ya que evita largos trasla­dos de las pacientes, desa­rraigos y también mejora la atención al descompri­mir los servicios”.

Pomata es directora del Programa de Cáncer. Agrega que “el diagnós­tico de cáncer ha aumen­tado en los últimos años y, según predicciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se conver­tirá en la primera causa de mortalidad por delante de las enfermedades cardio­vasculares en un futuro cercano”.

Vicente Villalba, del Hos­pital Materno Infantil San Pablo, opina que “en rela­ción a años anteriores el panorama es alentador. Hoy contamos con más ser­vicios abocados a la aten­ción integral del cáncer de mama. Incluidos servicios de quimioterapia como, por ejemplo, el que se pudo hacer en Villa Hayes”.

El médico recuerda que “el cáncer más frecuente es el de mama, representa un 90% de las consultas en nuestro servicio de Oncolo­gía y demanda gran parte de los actores que partici­pan en la atención integral. Mastólogos, oncólogos, psi­cólogos, odontólogos; fisio­terapeutas, todo lo que hace a los estudios auxi­liares”, indicó.

Pomata cuenta que las funciones del programa consisten en establecer políticas y planes destinados a mejorar la calidad en la atención y calidez a los pacientes y apoyar a los servicios en estas tareas, así como ejercer abogacía por los pacientes con cáncer.

“Las políticas y planes en los que trabajamos tienen un fuerte componente en la promoción de la salud, prevención primaria (promocionar las vacunas, como la del VPH y la detección precoz mediante las técnicas de tamizaje, en el cáncer de cérvix, mama y colon sobre todo, cuyas estrategias están validadas por organismos internacionales). Asimismo, políticas que incluyan el abordaje de estos temas en la educación de jóvenes y seguir trabajando en acortar las brechas en el acceso a la atención médica”, apunta.

Villalba, a su vez, recuerda que “desde la Sociedad Paraguaya de Cancerología (Sopac) estamos organizando un webinar gratuito dirigido a toda la comunidad para valorar estrategias para el acceso universal a la atención

integral. Es un deber de toda la población luchar para seguir mejorando la atención a esta verdadera pandemia que nos afecta”.

Martínez dice que la idea es seguir con las campañas de detención precoz insistiendo que hagan sus controles. Que no tengan miedo. Que si un cáncer se detecta en su etapa inicial puede ser curado. También es importante identificar a las mujeres que tienen un riesgo para desarrollar cáncer de mama y así programar controles más frecuentes y ver qué estudios son los más recomendados para cada mujer”.

Manos a la obra.

“¡Ayudemos a las pacientes del Instituto del Cáncer (Incan)!”, pide el flyer que corre por la red social Face­book. Allí se promocionan productos para recordar el Octubre Rosa, artesanías elaboradas por las propias pacientes. “Colaborando con la compra de sus produc­tos estamos ayudando a muchas mujeres en su lucha diaria contra el cáncer de mamas. Preparate para este Octubre Rosa y llenate el corazón de solidaridad. Para adquirir cualquiera de los productos pueden contac­tarse con la señora Cristina Melgarejo, al celular (0983) 879-399. LOLA Paraguay se suma a la campaña de pre­vención del cáncer de mamas”, indicaron las mujeres.

La Fundación Unidos Contra el Cáncer (Funca) rea­lizará el próximo 19 de octubre su mayor evento de recaudación de fondos denominado Serenata Rosa. Una noche de música y moda que busca transmitir, a través del arte, un mensaje de esperanza. La actividad se realizará precisamente en el Día Internacional de Lucha contra el Cáncer de Mama.

La Serenata Rosa brindará un concierto de la mano de Band’Elaschica, conjunto de jazz 100% femenino, que podrá ser disfrutado el martes 19 de octubre a las 21:00, de forma presencial en el Club Centenario o vir­tualmente vía streaming.

“Con esta actividad, el objetivo es celebrar el compro­miso y la solidaridad de todos los que trabajan por la concientización, detección precoz y tratamiento de esta enfermedad, así como también celebrar la valen­tía de miles de mujeres y sus familias para afrontarla”, comentó Norah Giménez, directora ejecutiva de Funca.

El año pasado se conmemoró el Bra Day, una jornada en que la Sociedad de Cirugía Plástica (SPCP) promueve la reconstrucción mamaria. En la oportunidad, con el apoyo del Despacho de la Primera Dama, se financió una cirugía a una de las pacientes seleccionadas como manera de promover estas intervenciones estéticas que sirven de gran apoyo sicológico.

El servicio del IPS da cuenta de que solamente el 16% de las mujeres afectadas pudo acceder a una cirugía de este tipo, un guarismo que se puede superar con apoyos presupuestarios serios que permitan popularizar las cirugías estéticas.

“Existen protocolos en los que se puede extirpar la mama posterior, otras en que van para la quimioterapia, otras a radioterapia, o para ambos tratamientos. Pasado un cierto período de tiempo se puede hacer la reconstrucción, es factible hacerla inmediatamente en casos donde el hallazgo del tumor se realiza más temprano. Para ello en el IPS existen variadas técnicas para reconstruir las mamas, desde técnicas autólogas de reconstrucción, es decir utilizando las mismas partes de la paciente, como el abdomen o la región dorsal de espalda, es posible utilizar expansores de tejidos y prótesis de silicona”, comentó la entidad previsional, que cuenta con un servicio de cirugía plástica con 10 cirujanos plásticos entrenados.