Hoy Toni Roberto nos invita a viajar a partir de una vieja publicidad gráfica, un pasaje de las “historias minúsculas”, en este caso un aviso del legendario Supermercado Economax de Villa Morra, del barrio San Antonio de Asunción.

• Por Toni Roberto
• tonirobertogodoy@gmail.com

Allá por 1980, Villa Morra, el legenda­rio proyecto urba­nístico creado en 1888 por el Dr. Francisco Morra iba dejando de ser aquel silen­cioso y apacible barrio con muchas calles empe­dradas, convirtiéndose poco a poco en “el nuevo centro de Asunción”. En esos últimos años de esa década empezaba mi pri­mer trabajo en el recor­dado Supermercado Eco­nomax –que quedaba en la manzana que también aco­gía al teatro Arlequín en aquel viejo shopping que lleva el nombre del barrio– en carácter de letrista/publicista haciendo car­teles y poniendo precios a las ofertas del día, siempre comandado por unas de las primeras mujeres super­mercadistas del Paraguay, Marité Rasmussen y Cyn­thia Aguilera de Rojas.

El viejo logo había sido creado ya en la década del 70 por las legendarias publicistas Adela Ebner y Sarita Mussi, que repre­sentaba a una ama de casa con un cucharón rodeada de frutas y verduras. El mismo debía ser actuali­zado y decidimos junto a la diseñadora Celeste Prieto realizar un “aggiorna­mento”, redibujando el personaje “ama de casa” y actualizando el estilo de comunicación, el segundo paso fue convocarle a Tito García del “Mundo Mágico de Tito” –muy recordado por muchas generaciones– para la confección de aquel muñeco.

Desde el momento de su aparición el “personaje de fantasía” empezó a con­vertirse en una figura querida por grandes y chi­cos de aquellas tranquilas calles –muchas empedra­das– de Villa Morra, quienes tenían cámaras se qui­taban fotos con ella, para el efecto fue contratado el artista plástico, diseña­dor y actor Roberto Vera (1971-2010) quien le daba vida al muñeco, pero no todo terminaba ahí, quien acompañaba a la “ama de casa” en el recorrido callejero era la recordada actriz uruguaya Gra­ciela Cánepa, quien salía a pasear con el muñeco causando sensación para todas las edades en aque­llos finales de los años 80 de esa zona asuncena.

Luego llegó el final del Eco­nomax en 1994 y con ello el ya popular muñeco pasó a cuarteles de invierno, con el pedido de Tito García de tenerlo en guarda pen­sando en la posibilidad de realizar algún día el museo del Mundo Mágico de Tito, pero el destino quiso que fuera otro, el actor que había nacido en Chile en el año 1946 y que se había ganado el cariño de muchos niños paraguayos, luego de una gran lucha contra un voraz incendio en su taller, tratando de salvar aquellos personajes, entre ellos a la “Ama de casa del Economax”, finalmente falleció dos semanas des­pués del incendio el 26 de enero del 2015, llevándose así el recuerdo de tantas generaciones que fueron parte de aquella “mágica ilusión” que nos acercaba día a día a las pantallas de los más antiguos canales de aire paraguayos, tanto el de Asunción como el de Lambaré.

Siempre es importante guardar los recuerdos, este es el caso de esta vieja publicidad que tenía en el “baúl de los recuerdos case­ros” y que hoy me trans­portó a “instantes eternos” de pequeñas grandes his­torias, de varias genera­ciones que recuerdan con cariño momentos inolvi­dables de sus infancias, paradójicamente hoy ya no están ninguno de los prota­gonistas, ni Tito, ni el Eco­nomax, ni Graciela Cánepa, ni Roberto Vera, ni la ima­ginaria “ama de casa” que partió en aquel “titánico y malogrado” intento de Tito por salvarla, pero que­dará para siempre en este recuerdo gráfico en blanco y negro que hoy comparti­mos con ustedes.