Por Juan Carlos Dos Santos - Fotos: AFP y gentileza

La conmemoración de los 60 años de relaciones diplomáticas entre la República de China Taiwán y el Paraguay y el encuentro del entonces presidente Horacio Cartes y la actual presidenta Tsai Ing-wen, fue la semilla que dio inicio al proyecto de la Universidad Politécnica Taiwán - Paraguay (UPTP), que hoy es una realidad y 104 estudiantes paraguayos, de cuatro diferentes carreras, se verán beneficiados, realizando de manera completa el tercer año de estudio en la nación asiática.

El grupo de estudiantes de las carreras de Ingeniería Civil, Industrial, Informática y Electromecánica viajarán a principios del mes de febrero a la lejana República de China Taiwán, para desarrollar todo el tercer año de la malla curricular, apenas se defina el protocolo sanitario y los trámites legales para realizar tan largo viaje.

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Los compatriotas cursarán sus estudios en la Universidad Nacional de Ciencias y Tecnologías de Taiwán, conocida como Taiwán Tech y que está ubicada en la capital Taipei, lugar que también les servirá de residencia. Este centro de estudios científico y tecnológico, recibe a 12.000 mil estudiantes, el 10 por ciento de los cuales son de diferentes partes del mundo, quienes tienen la prioridad de alojamiento en el lugar.

Además de las modernas instalaciones académicas y para el alojamiento de los estudiantes, el Taiwán Tech cuenta con instalaciones deportivas y recreativas como campo de fútbol con pista atlética, canchas de tenis, basquetbol, polideportivos, piscina olímpica, gimnasios, equipos para fitness, billares y tenis de mesa.


UNA OPORTUNIDAD ÚNICA

El grupo de 104 alumnos desarrollará todas la materias de la malla curricular de sus respectivas carreras y que corresponden al quinto y sexto semestre, explicó a La Nación, Judit Marchese, Directora General Académica de la UPTP. “Ellos van a tener una oportunidad muy grande y muy relevante para su vida no solo profesional sino también en lo personal, por la experiencia de poder compartir con otros estudiantes de Taiwán y de varios lugares del mundo”, indicó.

“Estarán compartiendo con otra cultura y en otro ambiente, además de poder acceder a los laboratorios de Taiwán Tech. Es realmente una oportunidad única”, explicó Marchese, quien agregó que los estudiantes tendrán un programa de clases bastante intensivo, pues a pesar de tener algunos días de vacaciones entre cada semestre, tendrán ocupado todo el año, desarrollando las materias profesionales hasta el mes de enero de 2022, cuando sea el momento de regresar al país.

UN TEST AQUÍ, OTRO ALLÁ Y LUEGO A CUARENTENA

Con respecto al protocolo sanitario aplicado tanto en Paraguay como en China Taiwán, la directora académica de la UPTP, explicó que los estudiantes tendrán que someterse al test COVID-19, 24 horas antes de emprender el viaje y al llegar a la nación asiática, nuevamente serán sometidos a otro test y para luego entrar a una cuarentena de 15 días.

Esta cuarentena será realizada en un lugar específico que ha sido destinado para los estudiantes que llegan al país, para luego tener libre una semana de manera a gestionar sus trámites personales y el seguro de salud antes de iniciar el desarrollo de las materias profesionales.

El costo de todo este proyecto está cubierto por el gobierno de China Taiwán pero además los estudiantes recibirán un monto en moneda local para sus gastos personales y para el pago de los trámites personales que exigen las leyes del país para todos aquellos que permanezcan por un periodo más prolongado de lo que otorga una visa turística.

Paraguayan President Horacio Cartes (C-R) and Taiwanese President Tsai Ing-wen (C-L), attend the inauguration of the academic year at the Polytechnic University Taiwan-Paraguay, on August 14, 2018 in Luque, Paraguay. - Ing-wen will attend the inauguration ceremony of Paraguayan president-elect Mario Abdo Benitez. (Photo by NORBERTO DUARTE / AFP)

TESTIMONIOS

Sebastián Matus, a punto de cumplir 20 años, estudiante de Ingeniería Electromecánica de la UPTP se mostró muy emocionado por la oportunidad que les brinda el gobierno de China Taiwán, en especial para los que como él, provienen del interior del país. Sebastián es de la Colonia Obligado, en el departamento de Itapúa y aunque se tuvo que mudar a la capital del país para realizar sus estudios, la pandemia lo envió nuevamente junto a su familia en el sur del país, desde donde aguarda ansioso el momento de abordar el largo vuelo con destino al otro lado del mundo.

Él espera poder concluir su carrera universitaria para luego intentar conseguir una beca en el exterior que le posibilite realizar una maestría, pero su objetivo a corto plazo es aprender lo máximo posible en este viaje que realizará a China Taiwán, pensando aplicarlo posteriormente en nuestro país.

PANDEMIA Y DIFERENCIA HORARIA

Recuerda que las cosas se pusieron un poco complicadas cuando inició la pandemia, a comienzos de marzo del año pasado.”Algunos de nuestros profesores se vieron en la necesidad de regresar a su país y comenzamos a tener clases virtuales, pero la enorme diferencia horaria (de 11 a 12 horas dependiendo de la época del año) hicieron que todo se dificulta. Para cuándo era de día para ellos, para nosotros era de noche, entonces eso complicó”, recuerda.

Sebastián tiene algunas referencias geográficas, históricas, económicas y culturales de China Taiwán. Por ejemplo sabe que el clima subtropical es bastante parecido al que tenemos en nuestro país, pero es consciente que la diferencia a nivel universitario es bastante grande y eso lo motiva más aún para emprender este viaje de estudios, que sin dudas será un punto de inflexión para el futuro profesional de los 104 compatriotas que tomarán parte de él.

Sus padres están felices por la oportunidad que tiene. “Mi familia y mis amigos están muy pendientes de este viaje y de mi futuro. Están siempre cerca deseándome lo mejor, pero ya quiero estar allá para comenzar a aprender todo lo posible”, concluyó el joven compatriota, uno de los 104 estudiantes que tendrá la oportunidad de aprender más sobre su carrera universitaria en un país que es potencia académica, económica y tecnológica en el mundo.

A CASI 20.000 KMS DE CASA

La localidad de Yhú, en el departamento de Caaguazú, se encuentra a 19.770 kms de distancia de la capital de China Taiwán, la ciudad de Taipei. Es la distancia que recorrerá Pilar Benítez Verón, la segunda de cinco hermanas, quien cumplió hace unos días 20 años y alista sus maletas para emprender ese largo viaje hacia uno de los países más avanzados tecnológicamente del planeta.

Ella es estudiante de Ingeniería Industrial de la UPTP y nos cuenta que el diseño industrial es lo que más le gusta de su carrera. “Ya en épocas de colegio, uno se va dando cuenta de qué es lo que más le gusta y en mi caso, eran las matemáticas”, recuerda Pilar.

UN PROCESO DIFÍCIL

Durante los dos primeros años en la UPTP, tuvo muy buenos profesores y solo sintió alguna dificultad al principio con el idioma, pues todas las clases impartidas son en inglés. “Fue un proceso difícil adaptarse a eso, pero afortunadamente todos los profesores tienen a un asistente paraguayo y eso ayudó a despejar cualquier duda que podríamos tener”, comentó.

Un viaje de estas características, sobre todo por la cantidad de tiempo que estos estudiantes van a compartir al otro lado del mundo, puede llegar a producir un cambio positivo en las personas. Pilar es consciente de eso y expresa que tanto en lo profesional, como para su relacionamiento cultural y hasta en su manera de pensar y ver el mundo, este viaje podría representar un antes y un después en su vida.

MI FAMILIA, PREOCUPADA Y ANSIOSA PERO FELIZ

“Mi familia está algo preocupada y ansiosa, pero también felices. creo que es algo normal. Mi mamá fue quien quedó shockeada ya desde el momento en que tuve que mudarme a Asunción para estudiar en la UPTP. Era la primera vez que salía de mi casa, y ahora en menos de dos años, ya tengo que ir al otro lado del mundo”.

“Mis expectativas son muy altas y es un proyecto largo. Lo lindo es que no solamente lo que vamos a aprender será relacionado a la carrera que estamos cursando sino que habrán otras capacitaciones extracurriculares. Tengo entendido que tendremos también muchas actividades prácticas relacionadas con mi carrera”, explica Pilar.

Pilar había recordado que su mamá, Sonia Verón, estaba en estado de shock, cuando ella decidió mudarse a Asunción para comenzar sus estudios en la UPTP, por lo que decidimos conversar con su madre para conocer de que manera la familia encaraba este otro viaje de las segunda de sus cinco hijas.

“SOY UNA MAMÁ CLUECA”

“Primeramente estoy muy feliz por lo de mi hija y por su grupo. La universidad es muy seria y estamos seguros que todos van a ir a aprender muchísimo. Sin embargo nos preocupa la pandemia, todo está tan indeciso y el hecho que estén tan lejos, eso nos preocupa realmente”, manifestó la madre de Pilar, quien respondió muy atentamente nuestra llamada y se le notaba la emoción y el orgullo en cada palabra, por lo que le toca vivir a su hija.

Pero Sonia ya investigó todo acerca de China Taiwán y el desarrollo del COVID-19 en la nación asiática y al ver los resultados se quedó más tranquila. “Dios los va a proteger, confiamos todos. Solo esperamos que vuelvan sanos y con un conocimiento extraordinario” indicó y luego nos cuenta que mantiene mucha comunicación con todas sus hijas. “Soy una mamá clueca”, confiesa y se ríe.

Recordó que al comienzo le sofocaba mucho esta situación pero ahora se ha actualizado y cuenta que ya está más preparada para lo que se viene. “Le voy a ayudar a hacer las maletas, como siempre, aunque su hermana mayor está en Asunción y es ella quien la va a estar ayudando, pero luego ella vendrá a Yhu´una semana antes de viajar y toda la familia le ayudará a preparar las maletas y hablaremos mucho, pero igual la vamos a acompañar en todo lo que ella necesite”.

“Pilar es una alumna brillante desde pequeña y hasta ahora mantiene su término medio en sus estudios. Su característica principal es la humildad, algo que le hemos inculcado en la familia. Somos conscientes de que nuestros hijos tienen que ser mejores que nosotros para poder ir mejorando en cada generación”.

EL PEQUEÑO GIGANTE ASIÁTICO

La República de China Taiwán es un paraíso para quienes deseen adquirir conocimientos industriales, pues existen emprendimientos que abarcan productos electrónicos, comunicaciones y tecnología de la información, refinación de petróleo, productos químicos, textiles, hierro y acero, maquinaria, cemento, procesamiento de alimentos, fabricación de vehículos y autopartes, todo tipo de productos de consumo hasta productos farmacéuticos, sólo por citar algunas áreas.

China Taiwán es una república ubicada en la Isla de Taiwán, en el estrecho del mismo nombre, a 180 kms de la costa de China Continental, país del cual se separó en 1948. Esta pequeña nación de casi 36.000 kilómetros cuadrados y 23,5 millones de habitantes, es considerado uno de los cuatro “Tigres Asiáticos”, nombre que se ganaron junto a Malasia, Singapur y Hong Kong, por el gigantesco crecimiento económico, comercial e industrial que tuvieron en los últimos 40 años.

China Taiwán es la economía número 22 del mundo, si se toma en cuenta el volumen de PIB. Cuenta además con una de las fuerzas armadas más poderosas del mundo y a pesar de la enorme presión que realiza China Continental, en los diversos organismos multilaterales, China Taiwán se mantiene en un elevado índice de crecimiento socioeconómico y es hoy uno de los principales aliados estratégicos de nuestro país.

LLAMADO A NUEVOS ESTUDIANTES

Mientras tanto en Asunción, la Universidad Politécnica Taiwán-Paraguay se encuentra realizando una nueva convocatoria para el examen de ingreso, destinado a aquellos estudiantes que estén interesados en seguir algunas de las carreras que actualmente se encuentran disponibles. El llamado está dirigido a aquellos que tengan deseos de ser admitidos como estudiantes de las carreras de Ingeniería Civil, Electromecánica, Informática e Industrial.

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