En un año más que atípico y en el que grandes medios en el mundo sufrieron importantes bajas, las rápidas decisiones tomadas por el joven medio y su “reinvención” para llegar a la gente con las noticias veraces y útiles, posicionó a GEN en lo más alto de la preferencia de los televidentes paraguayos.

El 2020 estaba iniciando y en los primeros días ya comenzaban a circular las noticias sobre un nuevo virus que había sido identificado en Wuhan, China. GEN, un canal de apenas dos años de actividad, acababa de finalizar el diseño, desglose y la planificación del contenido para el resto del año. Pero el avance del virus obligó al canal a deshacer sus planes, reinventar su dinámica de trabajo y su crear de cero su propuesta de contenido. En pocos meses, una rápida reacción del equipo les permitió liderar el rating de canales de cable.

En la segunda semana de enero la cantidad de casos de coronavirus se elevó sustancialmente cuando se confirmaron 136 nuevas infecciones en Wuhan. El 19 de enero el virus se encontraba ya presente en tres países, con 201 personas infectadas y 3 fallecidas. A partir de ese momento el mundo comenzó a prestar toda su atención sobre el repentino brote de este nuevo virus. Una historia de película se desenvolvía frente a nosotros con cada nuevo titular informativo.

“Entonces en el mundo aparece un virus del que no conocemos mucho, no sabemos cómo tratarlo y no tenemos vacunas. Solo sabemos que se expande rápidamente y que está matando gente. En GEN lo primero que hicimos fue investigar a fondo y comenzar a prepararnos en todas las áreas. Sabíamos que no era algo que iba a pasar desapercibido”. Marcelo Tolces, gerente de Contenidos.

COVID-19, EL QUE LO CAMBIÓ TODO

En febrero, la OMS anuncia que COVID-19 sería el nombre oficial de la enfermedad. Ese mes culminaría con más de 82.000 casos a nivel mundial: 439 en China y 746 casos en 43 países del resto del mundo, uno de ellos, Brasil, que registró el primer caso en Latinoamérica. En el canal sabían que sería un cuestión de tiempo hasta que el virus llegase a Paraguay. No había tiempo que perder, debían prepararse para todos los escenarios posibles.

“La prioridad de los directivos era resguardar la salud de nuestros colaboradores y establecer protocolos de trabajo que aseguren la mínima exposición al contagio y la posibilidad de seguir informando a la gente sin interrupciones. El día que hubo el primer caso confirmado en Paraguay aplicamos todos los protocolos, comenzó el teletrabajo y en la programación, días después, inaugurábamos un informativo continuo, llamado: Contención covid-19″. Patricia Santacruz, gerente de GEN.

La anticipación y la capacidad de reacción fueron factores clave. Pero nada de esto hubiera sido posible sin la capacidad técnica para aplicar la tecnología disponible y poner en marcha los nuevos contenidos. A través de una coordinación entre las distintas áreas se pudo analizar cuáles serían las diferentes opciones para emitir las nuevas propuestas.

TECNOLOGÍA Y TRABAJO

“Desde el primer día en que aplicamos el teletrabajo, el canal sacó el máximo provecho del uso de la tecnología IP. En programas como Asamblea, Augusto Dos Santos podía tener a invitados internacionales como Andrés Gelós desde Buenos Aires. Estos programas podían ser emitidos con óptima calidad técnica sin que nadie tenga que estar físicamente presente en el canal. Esto nos permitió estar un paso adelante e impulsar programas diseñados específicamente para el momento que como sociedad estábamos atravesando”. Daniel Caifanes, jefe de Operaciones.

El 10 de marzo el Gobierno Nacional suspendió las clases y todo tipo de aglomeraciones de personas en el país. La preocupación tomaba carácter oficial. Las personas se sentían inquietas y tenían cada vez más preguntas sobre el tema. La preocupación era la salud, pero también el estómago.

“Desde el continuo informativo se comenzó a dar voz a quienes comenzaban a organizarse a través de ollas populares, principalmente mujeres y quienes necesitaban información sobre los planes de asistencia como Pytyvõ, Ñangareko o IPS. Para nuestro equipo era momento no solo de informar sino de escuchar las necesidades de la gente”. Guillermo Grance, jefe de Prensa.

En el mundo, la enfermedad comenzaba a azotar fuerte en países europeos como Italia, que el 16 de marzo acumulaba más de 2.000 muertes. Aislados en nuestros hogares el futuro nos resultaba cada vez más incierto y desalentador. Las personas encargadas de escribir las historias en GEN repensaban los mensajes y las maneras de entregar la información.

“Toda información que recibimos genera un impacto emocional. Sin emociones una persona no puede motivarse y sin razonar no es capaz de tomar decisiones conscientes. Esta crisis nos llevó a momentos de incertidumbre donde suelen luchar dos emociones básicas: el miedo y la esperanza. Quisimos que nuestro tono y mensaje general sean: elijamos esperanza”. Julio Sardi, redactor.

El 15 de abril ya habían 2 millones de infectados a nivel global y más de 130 mil víctimas mortales. Sin embargo, en Paraguay, la cuarentena y el acatamiento de la gente permitieron enlentecer el avance del virus. Atajábamos el tiempo mientras la medicina global aprendía y nos preparábamos como país. Para finales de abril, los hospitales aun no estaban llenos pero los bolsillos ya estaban vacíos.

En el duro panorama, varias empresas paraguayas demostraron su compromiso a través de donaciones y campañas sociales. Muchas de ellas querían seguir participando de la conversación sobre la pandemia y la pospandemia. Así es que nació Cuentas Sanas, un programa conducido por el periodista Mike Silvero, donde los distintos rubros de actores económicos: emprendedores, trabajadores, empresarios lograron encontrarse en una plataforma común y encontrar maneras creativas de enfrentar la crisis.

“Desde contar sus experiencias positivas o realizar sus críticas al manejo de la crisis, estas personas se sintieron representadas en este espacio pudimos conversar sobre aspectos financieros y económicos por fuera de los lugares comunes de la discusión”. Mike Silvero, periodista.

La Semana Santa nos encontró bajo cuarentena, ansiosos y pendientes de cada información nueva sobre covid. La consigna “quédate en casa” suponía un encierro no muy fácil de sobrellevar. Profesionales de la salud mental comenzaban a emitir mensajes para concientizar sobre las medidas para resguardar nuestro bienestar psicológico. Una de ellas era no estar tan pendientes de las noticias en todo momento.

En armonía con los consejos, en abril, GEN implementó una franja llamada: Modo Avión. Un espacio en el que el televidente es alentado a colocar el teléfono en modo avión y solamente concentrarse en el contenido que está siendo presentado. En el caso de que surja una información de suma urgencia como una conferencia o comunicado, el canal se encargaría de interrumpir el modo avión y dar espacio a la información. En esta franja, durante Semana Santa, se estrenó el exitoso ciclo de cine nacional. Siete películas paraguayas fueron programadas y exhibidas, entre ellas: “Guarani”, “Latas vacías”, “Tren Paraguay”, “La redención” y “Truenos”.

A la par de la grilla televisiva, los contenidos en los canales digitales fluían con informaciones sobre las nuevas medidas sanitarias, las recomendaciones de higiene, el combate a los rumores y la desinformación que circulaban en las redes alrededor del tema. Por supuesto, la dosis justa de humor se hizo presente a la hora de analizar con una psicóloga el meme de los bailarines de féretro de África. La muerte estaba muy presente para una generación que no estaba tan acostumbrada a ello y que logró neutralizar su ansiedad con humor y memes.

EL RATING

En mayo, todavía en plena pandemia, GEN alcanzó un rating del 40,64% con 7 puntos arriba de la segunda señal más vista. Este rotundo caso de éxito puede hacernos observar que no son las dimensiones sino la capacidad de adaptación, reacción e ingenio que puede tener una organización es lo que a la larga marca la diferencia.

Apenas unos meses después de haber consolidado esta nueva marca de audiencia, llegaría un nuevo desafío: prepararse para transmitir los partidos de la selección nacional en menos de 48 horas. Pero esa es otra historia. Por el momento, levantemos las copas y brindemos porque los años entrantes traigan más prosperidad y, sobre todo, ¡salud!