• Por Luis Irala
• Periodista Nación Media

Nacional logró un importante triunfo de 1-0 que lo saca de la cola de las puntuaciones del torneo Apertura. Gene­ral Caballero con la nueva derrota se hunde en la zona baja de la tabla del promedio y la continuidad del técnico Troadio Duarte será revisada por la dirigencia esteña.

Mejor de entrada el cuadro de Mallorquín, teniendo la posesión del balón y las mejores insinuaciones, pero ese buen andar esteño duró apenas 15 minutos. A partir de un tiro libre de Richard Prieto que el arquero Gui­llén salvó esforzadamente desviando al córner, empezó la presión de La Academia hacia el arco de la visita.

Antes del gol local, hubo otra conquista bien anulada por el juez Benítez, por un agarrón al defensor de General.

La mejor performance tri­color se plasmó en la red adversaria a los 36 minu­tos. Una jugada rápida por la izquierda, balón cedido por Colmán, que Gustavo Caba­llero de zurda lo introduce en la red de Guillén.

Pudo empatar la visita, pero el golero Rojas le dijo no a la intención de la visita de igualar con una soberana tapada. La primera etapa se fue con la mínima ventaja de Nacional.

En la complementaria, Troadio Duarte realiza dos relevos ofensivos con los ingresos de Lesme y Armoa, aunque no tuvieron el efecto deseado.

El rojo mallorquino trató de hilvanar jugadas en campo contrario, pero encontró bien plantado al cuadro albo. Solo un tiro libre de Teodoro Arce pudo inquietar la valla contraria, pero encontró las manos seguras de Rojas. Así se llegó al final del cotejo, con La Academia marcando el ritmo del partido. Triunfo justo de Nacional para salir de la incómoda última ubica­ción. El cuadro mallorquino, por su parte, no levanta cabeza y se hunde en la zona del des­censo a la División Intermedia.

El ofensivo Gustavo Caballero expresó su doble satisfacción por el gol que marcó y el triunfo de Nacional 1-0 sobre General Caballero.

“Primeramente, estoy feliz por el grupo de compañeros. Era una vic­toria que queríamos, estábamos buscando resultados positivos de seguido para poder salir del fondo y gracias a Dios se dio en esta oportunidad”, dijo el goleador del partido. Agregó también, que “ojalá esto sirva de envión anímico para poder seguir en la senda positiva. Ahora ya tenemos la idea clara de lo que pretende el entre­nador (Pedro Sarabia), ya que antes nos costaba. Jugábamos bien, pero no se daban los resultados. Con esta segunda victoria consecu­tiva, esperamos agarrarle la mano a los triunfos”.

Por otro lado, en la previa al partido en el estadio Arsenio Erico de Barrio Obrero, se realizó un minuto de silencio en memoria de Luis Fontclara Báez, expresidente de Nacional, quien falleció recientemente.

Sportivo Trinidense dio la gran nota en el inicio de la fecha 11 al ganarle a Guaraní en Villa Elisa por la cuenta de 3-1, en un gran partido, por todo lo que se vivió en el trámite. Para el cuadro de Francisco Arce representa nuevamente un retroceso porque corre el riesgo de no quedarse nuevamente como escolta por este nuevo tras­pié, mientras que el elenco que dirige José Arrúa se aco­moda en la tabla y también en el promedio.

La clave para el cuadro de Trinidad estuvo en su comienzo fulgurante por­que cuando ambos equipos apenas se estaban asentando en la cancha, sobrevino el golazo de Manuel Romero desde fuera del área. Un gran remate del delantero, que sorprendió a Servio.

Pero si ese gol golpeó a Gua­raní, el penal de Alcides Benítez sobre Diego Melga­rejo, advertido por el VAR y ratificado por el juez, lo fue aún más. Camacho cumplió con la ley del ex y con gran clase, la picó al medio para vencer a Servio, que se jugó hacia su palo derecho. Fue­ron minutos de puro dominio de Trinidense, que incluso pudo llegar al tercero.

El Chiqui Arce no esperó que la debacle sea peor y metió rápido los cambios. Ya con Fer-Fer y Willy Mendieta en cancha, fue otro equipo. Incluso llegó al descuento en el final con un penal conver­tido por Servio y tuvo otra ocasión con Fernández que salvó Samudio.

De hecho, Samudio sería la gran figura en el segundo tiempo para sostener el resultado. El arquero de Tri­nidense se lució en la mayo­ría de las pelotas difíciles y cuando eso no ocurrió, hasta el travesaño jugó a su favor.

Parecía inminente el empate aborigen, pero en un contra­golpe final, Ronaldo Báez liquidó el expediente en gran definición tras gambetear a Servio.

Llegar a primera división no es una tarea sencilla para los clu­bes, pero mantenerse en ella lo es aún más. Y que lo digan los dos equipos que ascendieron este año, Deportivo Recoleta y Tembetary, que casi al tér­mino de la primera rueda del Apertura siguen en las zonas rojas del promedio.

Recoleta logró salir de la zona directa, pero solo por­que General Caballero de Mallorquín perdió su partido de local. Este ingresa junto con el cuadro rojiverde, que pese a ganarle a Ameliano, en lo que fue su segunda victoria en el campeonato, se mantiene con un promedio 1,000, es decir, último. El Rojo de Mallorquín con 1,102 le sigue. El cuadro canario, con 1,200 de prome­dio, está fuera del descenso directo por ahora.

Otro que está sumamente bajo en este rubro es Spor­tivo Luqueño, que promedia 1,235 y es el cuarto más com­plicado, mientras que Trini­dense alcanza la línea de 1,255, pero por debajo de Ameliano, que llega a 1,276.

Lo que suceda con las fechas que restan marcarán una ten­dencia mayor para lo que será después el torneo Clausura, donde se conocerán a los nue­vos descendidos.

• Por Luis Irala
• Nación Media

Cerro Porteño, en el minuto 10 de adición, tras un penal bien cobrado por mano de Rodas, venció a General Caballero tras buena exhibición de ambos conjuntos.

Los primeros cinco minutos fueron de pleno domi­nio azulgrana; sin embargo, el plan inicial cerrista tuvo que ser modificado rápida­mente tras la expulsión de Xico da Costa, a consecuen­cia de un pisotón contra Jorge Mendoza. David Ojeda ayu­dado por la tecnología cam­bió la amarilla inicial por la roja para el delantero.

Para que el Ciclón siga siendo protagonista fueron impor­tantes las subidas de los late­rales León y Benítez, la buena cobertura defensiva de Piris da Motta, al igual que la habi­lidad de Alexis Fariña, que en una ocasión dejó servido el gol a los pies de Cecilio, pero el remate del ofensivo salió des­viado. En otra oportunidad, el remate de Domínguez sacó astillas al poste izquierdo de Guillén.

Los locales tampoco se que­daron atrás y en dos rápidos contragolpes casi llegaron al primer gol. Cerca del final es expulsado Jorge González y ambos equipos quedaban con 10 jugadores. La etapa se fue sin abrir el marcador.

En la complementaria, Maná pierde una magnífica ocasión al rematar solo al travesaño de Martín. Los ingresos de Jonathan Torres y Guillermo Benítez le brindaron aire fresco a Cerro, especialmente el lateral izquierdo, quien formó una dupla demoledora junto a Cecilio Domínguez, la figura más desequilibrante de la ofensiva azulgrana. El arquero Guillén tuvo dos tapadas monumentales y a los 10 minutos de tiempo agre­gado, un penal por mano de Alexis Rodas, Torres lo cam­bió por gol para que el Ciclón siga soñando con el ansiado título de campeón.