El presidente de la Asociación Paraguaya de Fútbol, Robert Harrison, visitó los estudios de Versus radio/Nación Media y habló de todo un poco. La selección paraguaya, el campeonato, los árbitros y otros detalles de su gestión al frente de la entidad.
Pero, sin dudas, los pormenores de la contratación de Gustavo Alfaro para dirigir a la Albirroja fue el punto principal que abordó, ahora que el estratega argentino está siendo el factor clave para la vuelta al éxito del combinado nacional en las actuales eliminatorias.
Mencionó al director deportivo Justo Villar como el que tomó contacto por primera vez con el entorno de Alfaro.
“Él fue el que tomó contacto, él me cuenta que habló con el ayudante. Le dije que le llame, pero el profe no habló conmigo por respeto a Costa Rica. Después sí, tampoco fue fácil la negociación, tuvimos que hablar varias veces”, aseguró el mandamás de la APF.
En ese sentido fue el propio Alfaro el que le manifestó que dirigir a la Albirroja siempre fue su deseo. “Me dijo que eran dos selecciones que siempre quiso dirigir, por Paraguay y Uruguay, ahí entendimos que había posibilidad y por eso atropellamos para traerlo. Sabíamos que estábamos contra las cuerdas. Fue un momento difícil, pero también tuvimos la tranquilidad. Teníamos la firme convicción que lo íbamos a traer”, remarcó.
MOMENTO DURO
Harrison también mencionó que el momento más duro que le tocó vivir como el máximo dirigente de nuestro futbol fue aquella derrota de local ante Venezuela, por eliminatorias y que supuso la eliminación para disputar el mundial de Rusia 2018. “Fue un momento muy duro porque nadie se esperaba ese desenlace. ¿Y qué faltó? Faltó embocarla, faltó meter. Creo que la presión de tener que ganar nos jugó en contra”, añadió.
EXPECTANTE AL CONGRESO
Harrison también volvió a mencionar que esperan expectantes el Congreso de la FIFA, que se llevará a cabo el miércoles 11 de diciembre, donde se tomarán varias decisiones importantes, entre ellas la relacionada a las sedes y los estadios que albergarán por Sudamerica los partidos del Mundial 2030. Volvió a apuntar que tanto el Defensores del Chaco y principalmente el futuro estadio de Olimpia, a construirse en un tiempo de dos años, aparecen como las opciones más probables para albergar uno de los partidos inaugurales. También ratificó que considera poca la cantidad de equipos que compiten en primera división, pero que ahora mismo sería inviable una ampliación de clubes en la categoría, porque el incentivo económico a repartir será el mismo que el actual por lo que los clubes recibirían menos dinero.