Gastón Olveira: primer tiempo tranquilo, donde solo descolgó algunos centros. En la complementaria salvó una vez en gran forma desviando un remate peligroso.

César Olmedo: fuerte y seguro en la marca. Acom­pañó pocas veces en ofen­siva. Fue amonestado.

Júnior Barreto: en cada partido se afirma más en la defensa decana. Transmite seguridad y tranquilidad.

Manuel Capasso: guapeada en el duelo aéreo frente a Báez en el segundo tanto fran­jeado. Anotó el tercer y lapi­dario tanto del Decano. Otra estupenda actuación.

Facundo Zabala: sufrió una lesión en la primera etapa, pero siguió en el encuen­tro. Terminó realizando un enorme partido desequili­brando al rival cuando acom­pañaba en ataque. Casi marcó un gol en contra.

Rodney Redes: generoso despliegue físico en toda la cancha. Participó del primer gol franjeado. Entró mucho en las fricciones.

Alex Franco: buenos relevos en la zona defensiva. Fútbol claro cuando tuvo la pelota a sus pies. Uno de los puntos altos del Decano.

Richard Ortiz: a los 6 minutos marcó un golazo de chilena, para el 2 a 0, que dejó nocaut a Cerro Porteño. Tras cumplir gran gestión se retiró lesionado en la segunda etapa.

Hugo Fernández: gran ini­cio en el cotejo. Tuvo arran­ques que desequilibraron a la retaguardia cerrista. Recibió una tarjeta ama­rilla y ya no volvió para el segundo acto.

Erik López: marcó el pri­mer gol del encuentro en el primer ataque de su equipo. Sus rápidas entradas crea­ron dificultades a los azul­granas. Solo disputó los pri­meros 45 minutos.

Hugo Adrián Benítez: tuvo mucho que ver en el gol de López, aguantando el balón para la llegada de los delan­teros. Realizó un gran tra­bajo solidario en toda la can­cha.

También ingresaron:

Derlis González: entró en vez de Fernández. No apa­reció con su acostumbrada calidad.

Alan Morínigo: por López: un buen centro suyo casi ter­minó en gol.

Marcos Gomes: ingresó por Ortiz. Se refugió atrás para mantener la goleada a favor.

Brian Montenegro: en vez de Benítez. Se perdió el cuarto gol franjeado.

Ramón Martínez: por Franco, para reforzar el sis­tema defensivo.

Jean Fernandes: pudo haber tenido una reacción más rápida en el segundo gol de Olimpia, aunque había muchos jugadores frente al arquero.

Alan Núñez: muchos proble­mas con Erik López por su sec­tor. Fue sustituido.

Lucas Quintana: debió ser apercibido. No apareció en la disputa aérea en el tercer tanto olimpista.

Javier Báez: en la segunda conquista de Olimpia, perdió en el cabezazo ante Capasso. Tampoco reaccionó en el ter­cer tanto franjeado.

Diego León: mucha entereza en su juego, alternando con buenas y malas acciones.

Gabriel Aguayo: ni siquiera chispazos de su antigua cali­dad.

Enzo Giménez: tan rudi­mentario fue en su juego que hasta realizó una infrac­ción en ataque en la fracción inicial. A su favor, su gran voluntad.

Robert Piris da Motta: peleó mucho en la zona media, pero no le alcanzó.

Rafael Carrascal: lento y con muy pocas ideas.

Federico Carrizo: desorde­nado en su juego, como todo su equipo. Por lo menos puso actitud mientras estuvo en la cancha.

Francisco da Costa: muy solo en todo el partido. Terminó siendo cambiado.

Entraron luego:

Alexis Fariña: sustituyó a Carrascal sin resaltar.

Diego Churín: fue por Núñez. Otra actuación para el olvido. Fue amo­nestado.

Luis Olmedo: fue por Carrizo, pero no apareció en el partido.

Fernando Fernández: por Da Costa. Poco pudo aportar en ofensiva

Ronaldo Dejesús: en vez de León. Entró muy tarde para intentar una reacción.