El 2 de Mayo dio la gran sorpresa de la fecha al golear 3-0 a Cerro Porteño, que vio frustradas sus intenciones de ponerse a tiro de la punta, en una noche nefasta en Sajonia.
Explicar lo que le pasó a Cerro sería reiterativo. Fue el equipo que propuso desde el minuto inicial, rotó bien la pelota, hizo buenas triangulaciones con jugadores dotados con buena técnica como Pachi Carrizo, Cecilio Domínguez y Francisco da Costa, pero le faltó sorpresa.
Tuvo la más clara al inicio del partido, con un centro que tomó de sorpresa a la defensa predojuanina. Metido en ataque, la pelota le llegó a Alan Benítez, cuyo disparo a quemarropa tapó Servín y que del rebote, Araújo empalmó de volea, que milagrosamente pegó en la espalda de Castro para perderse al córner.
Ese predominio siguió en los minutos posteriores, pero el 2 de Mayo también comenzó a salir y Rodrigo Ruiz Díaz avisó lo que vendría después. Entre medio, Servín sostenía el cero en un remate de Da Costa y en otro cabezazo de Ronaldo Dejesús, tras tiro libre de Cecilio.
Hasta que se llegó al tramo final en el que una imprudencia de Robert Piris da Motta, que le cometió falta penal a Domínguez, le permitió al Gallo Norteño festejar gracias al gran remate de Ruiz Díaz desde los 12 pasos.
Cerro, herido, salió como una tromba a buscar el empate pero se descuidó en defensa y en cuatro toques, el 2 de Mayo volvió a castigar. Domínguez habilitó a Elías Alfonso que le ganó en la corrida a Báez y ante la salida de Jean, remató al travesaño, de cuyo rebote le cayó a Cornet, que terminó la faena.
SIN CLARIDAD
Manolo Jiménez se jugó en el segundo tiempo con tres cambios juveniles, pero la falta de claridad siguió primando. Cecilio Domínguez se iba lesionado y con el ingreso de Churín, Cerro se jugó con dos tanques para intentar llegar al descuento. Tuvo ocasiones, pero siempre resolvió mal. En algunas, por falta de criterio para la definición, y en otras le faltó esa dosis de suerte.
Lo tuvo Iturbe, que hizo una de más. Lo tuvo también Da Costa, cuyo remate se fue cerca del palo y otra increíble de Churín, desde una posición inmejorable.
El 2 de Mayo intentó algunos contragolpes pero más se dedicó a defensar para cerrar un partido a pedir de boca para sus pretensiones. Aún así tuvo tiempo para dar el golpe de gracia, con el gol de Brahian Ayala, para darle el rótulo de goleada en Sajonia. Cerro, predecible y sin contundencia.
REACCIÓN
“Solamente renuncian los cobardes”
“¿Renunciar de qué? Solamente renuncian los cobardes, yo me amparo en mi trabajo, en Dios y en el universo. El primer tiempo no jugábamos a nada, sentí vergüenza de lo que hemos hecho. El responsable soy yo”, dijo el DT español de Cerro Porteño, Manolo Jiménez.
Agregó: “Queda mucha liga, fuimos capaces de pelear título estando a 11 puntos en el torneo pasado y confío ciegamente en estos jugadores”.
Por su parte, Eduardo Ledesma, asistente técnico del 2 de Mayo, señaló: “Contento con el rendimiento del grupo, necesitábamos de esto después de dos encuentros en los que nos frenamos. Pelear arriba no es fácil, más todavía con un plantel joven, estamos todavía para grandes cosas”.
Con respecto a la expulsión del técnico Felipe Giménez, Ledesma señaló que los árbitros quieren “ser protagonistas” y los reclamos no se miden de la misma manera.