No será una tarea fácil, pero en el fútbol no existe la verdad absoluta y en noventa minutos todo puede pasar. Con esa esperanza, Libertad arriba esta noche al estadio Mineirão de Belo Horizonte para enfrentar a Cruzeiro por el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
El Gumarelo tiene la obligación de jugar un partido perfecto porque tiene que revertir el 2-0 que le propinó el cuadro brasileño en el partido de ida disputado en Asunción la semana pasada.
El cuadro que ahora dirige Fernando Diniz fue muy superior en ese compromiso, lo que no dio opciones al onceno que paró Daniel Garnero en ese partido. Es más, el actual tricampeón de nuestro fútbol ni siquiera dispuso de ocasiones claras para convertir, quedando totalmente expuesto.
Cruzeiro tuvo todo incluso para golear en ese partido, pero desperdició varias ocasiones de gol, producto de los contragolpes que dispuso en la etapa complementaria.
Pero el de hoy es otro partido y la última verdad se dará cuando empiece a rodar el balón. La gran desventaja de Libertad es que sigue sin poder contar con algunos jugadores claves producto de las lesiones. Jugadores como Lucas Sanabria, Antonio Bareiro, Lorenzo Melgarejo y el goleador Óscar Cardozo serán los grandes ausentes en este partido. Pero a la vez, tendrá variantes importantes como la recuperación total de Héctor “Tito” Villalba, que si no juga de titular puede ser un relevo importante.
Visto el partido anterior, el Gumarelo no tiene nada que perder y mucho por ganar en este partido. Primero deberá evitar que le encajen más goles y, a partir de ahí, buscar la hazaña de lograr los goles para volver a soñar.
El Guma llega a este compromiso luego de ganarle por la mínima diferencia a Tacuary por el torneo Clausura, mientras que el cuadro brasileño empató sin goles ante Cuiabá de visitante, donde reservó a algunos titulares.