Cerro Porteño dejó atrás la mala racha en cuanto a resul­tados y volvió a ganar (1-0) luego de cuatro par­tidos en este actual tor­neo Clausura. Lo hizo ante Ameliano, que se cansó de desperdiciar ocasiones y lo terminó pagando caro porque por un error defen­sivo cedió el único tanto del partido.

El partido en Itauguá no fue, una vez más, propicio para el Ciclón. Por el contrario, tras un inicio auspicioso en el que parecía que iba a tomar rápi­damente el protagonismo, fue su rival el que comenzó a golpear arriba y arañar el gol.

Se jugaban apenas dos minu­tos de partido cuando Jean salvó a quemarropa un remate en la boca del arco de Richard Torales, tras un cen­tro metido al medio desde el otro extremo. Minutos des­pués, los toques de calidad de Alberto Contrera generaban estragos en la última línea del Ciclón, que tuvo en Jean Fer­nandes a su salvador en todas las pelotas que le llegaron.

Cerro presentó una forma­ción con la gran novedad de su refuerzo Sergio Araújo, que tuvo buena dinámica, aunque no siempre acertó en sus decisiones de alimentar a sus compañeros de ataque. Cecilio Domínguez mostró chispazos, pero tampoco estuvo acertado.

El que sí estuvo bien activo y tuvo su premio fue Francisco da Costa. Se movió bien en el primer tiempo y casi al ini­cio del segundo se encontró con la pelota que llegó fron­tal y que la dupla central de Ameliano no supo despejar. El error fue aprovechado por el delantero que, tras acomodarse, remató cru­zado para ponerse adelante en el marcador.

A partir de ahí, el andar azulgrana fue mucho mejor. Con espacios para Aguayo y Carrizo, arañó el segundo aunque no estuvo fino para liquidarlo.

La V Azulada fue puro amor propio, pero ya no tuvo la chispa del primer tiempo como para apurar el empate.

A Cerro le sobró un poco más, pero se conformó con el 1-0, que le viene muy bien para calmar las aguas y meterse otra vez en la lucha.