En un complicado partido y gracias a un autogol de Lucas Romero, Olimpia logró vencer la resistencia de Tacuary para seguir como solitario puntero del torneo Clausura.
El cuadro de Marcelo Palau jugó un gran primer tiempo. Víctor Ferraz fue el responsable directo de administrar las pelotas con pases precisos y el resto se juntó muy bien para tener la posición del balón. Además, con la experiencia y habilidad de Camacho y el acompañamiento de Paredes y Peta Brizuela, logró meterse constantemente hasta la última zona franjeada.
Aún así, la primera acción de peligro la generó Olimpia con la sabida fórmula del pelotazo. Richard Ortiz habilitó a López que no controló bien. A esto siguió otro pase largo para la corrida de Hugo Benítez, que tras ganar la posición a su marcador, definió por arriba, pero Vagner evitó la caída de su arco.
Sin embargo, la ocasión más clara de gol la tuvo Tacuary, en una acción por la zona izquierda del ataque. Paredes cabeceó a quemarropa, pero Olveira salvó magistralmente su arco. Por lo que mostró en esos minutos, Tacuary estuvo mucho más cerca del gol.
Olimpia se sacudió un poco más en el segundo tiempo, sobretodo con el ingreso de Rodney Redes, en reemplazado del improductivo Alan Cano. Ya más punzante, aceleró los pasos y rápidamente equilibró el partido.
GOL INSÓLITO
La desgracia golpeó las puertas de Tacuary en el gol de Olimpia. Capasso despejó una pelota y Redes desvió de cabeza para habilitar a Hugo Benítez que ya no tuvo ángulo de definición ante Vagner. Sin embargo, el intento de despeje de Luis Cáceres terminó en su compañero Lucas Romero en cuyo cuerpo rebotó la pelota, que se metió dentro del arco. Insólito tanto.
Con el ingreso de Derlis González y de Marcos Gómez para poblar más su mediocampo, Palermo cuidó más el resultado y aunque Tacuary lo intentó, el gol salvador no llegó. El Franjeado sigue en la punta y su rival vuelve a caer en zona directa del descenso.