Por tercera vez en una semana, Ameliano y Libertad se verán las caras en una cancha. Esta vez, por la revancha o duelo de vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana, donde indefectiblemente deberá haber un ganador, ya sea en tiempo normal o en definición por penales (no hay tiempo extra), teniendo en cuenta el empate 1-1 con el que ter­minó el partido de ida, una semana atrás.

Esta serie entre la V azu­lada y el Gumarelo se da en forma muy particular por­que también coincidió con el partido que disputaron por el torneo local, que igualmente terminó con una paridad (0-0). De ahí que esta defi­nición adquiere el rótulo de pronóstico reservado y sin favoritismos.

En Libertad se dieron las novedades más importan­tes en estos últimos días, pri­mero con la destitución de su técnico Ariel Galeano tras el empate del lunes y luego con la confirmación de la vuelta de Daniel Garnero para reto­mar el timón liberteño, que dejó para asumir como téc­nico de la Albirroja mayor, de donde fue cesado.

DURA TAREA

El argentino tendrá la misión de hacer reflotar el barco gumarelo, que tuvo un mal inicio en el torneo Clau­sura, donde está octavo, y discretos partidos en su aventura interna­cional.

El equipo llegó a esta instan­cia luego de h a b e r ganado la fase de repesca por un sitio en los octavos de final de la Copa Sudamericana, al supe­rar a Universidad Católica, de Ecuador.

SIN GANAR

Sportivo Ameliano, que por primera vez accedió a fase de octavos de final en una com­petencia internacional, tuvo un paso memorable y directo a octavos luego de terminar como líder del grupo G, en un hecho histórico para el club.

Pero, al igual que Libertad, el equipo que ahora dirige Aldo Bobadilla está pasando una mala racha en cuanto a resultados y es penúltimo en el Clausura, sin haber podido conseguir aún una sola vic­toria.

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