Guaraní dejó atrás la seguidilla de tres empates y venció 2-0 a Libertad en la noche de Villa Hayes. El Aborigen sustentó su triunfo gracias a un gran primer tiempo, donde con­virtió el primer tanto y por su contundencia en el segundo, para lograr el segundo tanto ya sobre el tramo final del compromiso.

La propuesta del equipo del Chiqui Arce fue suficiente para borrar al de Daniel Gar­nero. Desconocido, el Guma­relo dio muestras de flaqueza en defensa y muy poco juego del mediocampo para arriba, más allá de algunas aproxi­maciones.

Pese a contar con las mejo­res oportunidades en algu­nas jugadas puntuales, fue a través de la pelota parada que Guaraní abrió el mar­cador. En un córner, Wal­ter González metido en el área chica, logró superar a Viera y conectar de cabeza para el 1-0.

Incluso, el Aborigen tuvo para hacer el segundo, que no llegó de milagro, por un remate de Richard Prieto. Libertad llegó en un par de ocasiones pero no fue sufi­ciente. Un remate de Iván Piris al travesaño fue lo más peligroso con el que se cerró el primer tiempo.

En el segundo tiempo, el Gumarelo fue al ataque y Gar­nero puso todo para inten­tar el empate, pero el andar no mejoró. Ya sobre el final, Guaraní aprovechó un gran contrataque capitaneado por Mathías Martínez para per­mitir a Alan Pereira meter el segundo y liquidar el expe­diente.

Libertad, de la mano de Daniel Garnero, volvió a mostrar muy buenas sensaciones para ganar luego de seis fechas en el torneo Clausura. Y lo hizo nada menos que ante el hasta ahora puntero 2 de Mayo de Pedro Juan Caballero, al que tumbó por 2-0 en Villa Elisa. El equipo de Felipe Giménez recibió por primera vez dos goles en el torneo, perdió su primer partido y también cedió el liderazgo.

El resultado refleja con total justicia lo que se vio en el par­tido, porque el Gumarelo fue el equipo que quiso e hizo mejor los deberes para la lle­gar a la victoria.

Tomó el protagonismo desde el primer minuto y no permi­tió en ningún momento que su rival desarrolle ese juego vertical que lo caracterizó en este torneo. De ahí que siem­pre estuvo en posición de gol, con un planteamiento muy ofensivo. Matías Espinoza dio el aviso con un gran tiro libre que pegó en el vértice del arco de Servín, pero en la siguiente, su equipo ya facturó. Fue jus­tamente Espinoza el metió el pase de la muerte y Melga­rejo se adelantó frente al arco para desviar la trayectoria de la pelota y desatar el primer grito de gol gumarelo.

El 2 de Mayo se sintió incó­modo en todo momento y le costó recuperar pelotas. No tuvo fuerza en los desbordes y fue absorbido por la marca en el mediocampo.

De ahí que fue Libertad nue­vamente el equipo volvió a golpear en el segundo tiempo. Lezcano ejecutó un tiro libre y mandó la pelota al corazón del área para que el Demonio Bareiro se adelante a todos y meta el cabezazo imposible para Servín.

Con el 2-0, Libertad dosificó sus fuerzas sin renunciar a la férrea marca. Cuando Jesús Llano se fue expulsado con roja directa, la suerte del Gallo Norteño ya estaba echada. Sin dudas, un triunfo renovador para Liber­tad en la vuelta al ruedo de su técnico Daniel Garnero.

Daniel Garnero está de vuelta al ruedo. El téc­nico argentino volvió a Libertad, club que dejó para tomar el barco de la selección paraguaya absoluta, del que fue cesado tras apenas 10 meses de trabajo, debido a la falta de resultados y una penosa Copa América.

Sin duda alguna, con su vuelta, el club gumarelo pre­tende retomar el camino del éxito, luego de los malos resultados en el actual tor­neo Clausura, donde marcha octavo con apenas 6 puntos. Su última victoria se remonta al 20 de julio, en el inicio del campeonato ante Tacuary (4-2). Estos números termi­naron por costarle el cargo al joven técnico Ariel Galeano, que justamente había tomado el timón dejado por el entrena­dor argentino el año pasado.

Las estadísticas de Garnero en Libertad lo avalan como el técnico ideal para este momento complicado. Tres títulos (los torneos Apertura 2022, 2023, 2024), resumidos en 94 victorias conseguidas, 28 empates, 35 derrotas y con 65 % de efectividad, no son poca cosa.

Su primer gran desafío lo ten­drá mañana ante Sportivo Ameliano por el partido de vuelta de octavos de final de la Copa Sudamericana. Dejar atrás la falta de triunfos es su gran desafío.

Garnero ya fue presentado ayer a la tarde y comenzó este nuevo ciclo. Además del par­tido de mañana, tendrá un duelo bastante exigente el domingo ante el puntero del torneo, 2 de Mayo, en el estadio Luis A. Giagni de Sol de Amé­rica, en el cierre de la fecha 7.

En cuanto al equipo gumarelo para enfrentar mañana a Ameliano, no habrá mayores novedades, aunque es poco probable que el defensor Néstor Giménez llegue en condiciones. De hecho, las lesiones son constantes en el plantel gumarelo. El último fue Roque Santa Cruz, que en el compromiso casero ante Ameliano, ape­nas jugó 9 minutos y se fue del partido por problemas físicos. Iván Franco ya está recuperado de su dolencia, pero no llega para este juego. La buena noticia es que la molestia que sufrió Marcelo Fer­nández no lo apartará del duelo copero. Habrá que ver qué equipo alistará Garnero, aunque no distará mucho del que jugó el lunes.

El Tribunal Disciplinario de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) castigó con seis meses de suspensión para ejercer actividades relacio­nadas al fútbol y aplicó una multa de treinta salarios mínimos (G. 83.949.270) al técnico argentino Mario Jara del 12 de Junio de Villa Hayes.

La resolución es por un caso de agresión del que resultó víctima el entrenador César Castro, actualmente en Spor­tivo Carapeguá, cuando diri­gía al Deportivo Santaní. El hecho ocurrió en Villa Hayes al final del partido entre el 12 de Junio y Santaní por el tor­neo de la División Intermedia.

César Castro declaró que su colega Mario Jara le agredió con tres trompadas. Aunque le pidieron realizar la denuncia policial correspondiente, pre­firió no hacerlo, aunque hubo intervención de los agentes del orden que estaban de servicio en cancha del 12 de Junio.

Ante la gravedad de lo suce­dido, la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) pidió a Cas­tro un relato de lo sucedido, que coincidió con el informe de los veedores del partido y finalmente se aplicó la dura sanción, de acuerdo a lo esta­blecido en el articulo 79 del Código Disciplinario.