Nacional dejó de lado la falta de triunfos y en un partido en el que tuvo mucha fortuna, asociado a su buen juego, le ganó de visitante a General Caballero. El 2-1 logrado en Ka’arendy luego de casi 2 meses lo ayudó a dejar la última posición de la tabla. Había que remontarse a la fecha 6, cuando logró su última victoria ante Trinidense.
El Tricolor se trajo de los vestuarios el primer tanto. En realidad, recibió un regalo inesperado de Valenti, que al querer retroceder la pelota para su arquero Arévalos de cabeza, dejó clavado el balón en un charco de agua. La pelota no se deslizó y Gaona Lugo aprovechó para poner el primero apenas al minuto de juego.
Agrandado por ese regalo, la Academia tuvo los mejores minutos del partido y lo aprovechó al máximo porque en una incursión profunda de Árevalo, Alexis Rodas cometió un infantil penal por mano, que Alfaro no desperdició para poner desde los 12 pasos el segundo del partido.
Casi inmediatamente después, Ramón Ponce se jugó con cambios para intentar torcer el curso del partido. La propuesta del Rojo Mallorquino mejoró y en el segundo tiempo llegó al descuento en forma insólita. En un centro sin peligro, Brian Blasi, en su intento por mandar la pelota a la línea de fondo, no hizo otra cosa que meter el balón en su propio arco, ante la sorpresa de Antony Silva y sus demás compañeros. El 2-1 le dio otra motivación a los locales que siguieron buscando el tanto del empate. Arañaron la paridad, aunque sin éxito.
Para el Trico fue un desahogo este triunfo tras la racha negativa a nivel local e internacional, mientras que General tampoco anda bien, sumó su quinto partido sin victoria y está estancado en la tabla.