No clasificar a la Copa Libertadores 2024 será otro golpe duro de asimilar en campamento de Olimpia. El dinero que ingresa por diversos conceptos cuando se entra en competencia del torneo continental no soluciona las cuantiosas deudas que viene arrastrando el club, pero no por ello deja de ser importante para asumir y honrar otros compromisos más urgentes.
Solo un milagro podría otorgar ese cupo al Franjeado, a falta de dos fechas para la conclusión del torneo Clausura, donde esta seis puntos abajo de Guaraní, el mejor ubicado para acceder al tercer lugar vacante por el acumulativo.
De ahí que el despido de jugadores como Sergio Otálvaro, Iván Torres y Alejandro Silva fue el primer acto de una decisión ya tomada y que arrastrará a más jugadores del plantel actual para ajustar el presupuesto 2024, teniendo en cuenta que solo jugaría la Copa Sudamericana del año que viene.
A los tres citados se le sumarán otros más, como el del ya sabido caso de Luis Zárate, que se irá libre del club a final de temporada. En la misma situación estaría el delantero Walter González, con lo que el plantel será reducido y el Chiqui Arce deberá seguir recurriendo a jugadores de las formativas. Por Jhohan Romaña, se buscaría extender el préstamo con su club, Austin, de la MLS.
Como es sabido, el club está imposibilitado de fichar por una sanción de FIFA y el propio vicepresidente del club, Pedro Ballota, había mencionado que “es muy difícil” que pueda ser levantaba la medida, que se dio justamente por las deudas impagas a exjugadores e integrantes del cuerpo técnico.
HABLÓ TITO
“Cuando una puerta se cierra, se viene algo mejor. Va a llegar el momento para hablar de este tema. Nosotros nos vamos a manejar diferente y mejor a la hora de dar un mensaje. Yo me guío por lo que sale en las redes, porque donde me voy recibo el cariño de la gente”, le bajó el ahora exlateral franjeado, en declaraciones difundidas en el sitio digital Delpy, del cual es propietario.
Sergio Otálvaro también habló de su salida. Dijo estar agradecido y que desea seguir jugando en el país “aunque sea dos añitos”.