Guaraní liquidó el expediente llamado General Caballero con una practicidad notable. El Rojo de Mallorquín comenzó mejor, generó buenas acciones con el ímpetu del Chino Martínez, bien acompañado de los jugadores del mediocampo, pero bastó que reciba ese primer gol letal de Guaraní para que se desinfle como un globo.
Fernando Román metió un pase magistral para Raúl Cáceres, quien habilitó perfecto para la atropellada de Barceló, quien tirándose mandó el balón al fondo del arco. Eso dejó herido de muerte al General, que nunca pudo reaccionar más ante ese impacto.
Miño arañó el segundo con un cabezazo tras otro buen centro de Cáceres y el propio juvenil volvió a aprovechar después para convertir el segundo, tras una pifia previa de Saborido y que inicialmente Romeo Benítez no pudo definir. Ahí se terminó el partido, porque en el segundo tiempo y pese a los cambios, General Caballero no mejoró y Guaraní se dedicó a cuidar el resultado. Incluso fue el equipo que estuvo más cerca del tercero que su rival del descuento, lo que habla a las claras de la tranquilidad con que ganó el partido, para seguir prendido en busca de los puntos para el acumulativo. General, por su parte, se complica en el promedio.
