- POR JUAN VICENTE DUARTE
- Periodista – Nación Media
Los clásicos hay que ganarlos, reza una antigua frase futbolera. Pero esta vez, ni Olimpia ni Cerro Porteño lo merecieron. Y no por falta de intención o intensidad, sino porque no mostraron argumentos válidos para hacerlo posible. El empate deja un sabor a nada para ninguno de los dos. Al Ciclón, porque podría quedar aún más lejos de Libertad; y al Franjeado, porque no suma mucho para el acumulativo.
De todas formas, hay que analizar que el juego fue un poco más favorable para el cuadro de Francisco Arce en el primer tiempo. Se mostró más sólido en el mediocampo, aún cuando Cerro llegó en dos ocasiones y estuvo cerca del gol. La más clara fue un remate de Bobadilla, que Espínola despejó bien. Si bien Olimpia no dispuso de ocasiones claras, copó mejor el mediocampo, pero le faltó fuerza en ataque, con Fernández y Derlis muy aislados.
Con el ingreso de Fabrizio Peralta, la dinámica cambió en Cerro Porteño. El predominio se hizo evidente y con un Cecilio Domínguez más participativo, el panorama cambió. Arce equilibró después el juego con los ingresos de Martínez, ante la evidencia de una mejor presencia para neutralizar los embates del Ciclón.
A partir de ahí, las imprecisiones afloraron en ambos equipos. Porque ni Carrizo ni Churín conectaron bien en Cerro. Las pelotas perdidas fueron la constante en ambos equipos y ni siquiera los cambios dieron los resultados esperados para los técnicos.
En la parte final, con la expulsión del arquero Miguel Martínez por una falta clara sobre Brian Montenegro, que tampoco siguió en el partido, los decibeles bajaron y salvo ese tiro libre desperdiciado por Diego Torres, con Enzo Giménez como arquero improvisado, ya no hubo acciones de peligro.
La sensación que queda es que ambos perdieron puntos y este cuarto empate del año en los clásicos habla a las claras que todo fue muy parejo entre los tradicionales rivales.
REACCIÓN
“Fue un partido parejo y el calor influyó”
Para Cecilio Domínguez, el empate en el clásico fue justo y justificó su afirmación con estos argumentos. “Fue un partido parejo. En el primer tiempo, ellos manejaron mejor la pelota, nosotros tuvimos más chances en el segundo tiempo. Creo que el calor influyó para los dos lados y considero que es un justo empate”, refirió.
En lo personal, dijo estar conforme con su rendimiento. “Estoy contento porque después de mucho tiempo pude completar 90, para agarrar más ritmo, más aire. Me falta un poquito, el camino es este, los partidos seguidos que tenemos ayuda también. Realmente queríamos el triunfo porque estamos peleando, pero el rival es un gran equipo también”, remarcó finalmente el delantero azulgrana.