Trinidense perdonó mucho en la fracción inicial y el empate premia la perseverancia de Tacuary. Todo fue del dueño de casa en la primera etapa y el marcador de 1 a 0 quedó corto. Tacuary tuvo un nulo aporte en ofensiva, la zona medular retuvo poco el balón y la defensa tuvo que llevar todo el peso del encuentro, alternando con buenas y malas intervenciones.
Sobre los 13 minutos se abrió el marcador a favor de los trinidenses, subida de Sergio Mendoza por la izquierda, remate fuerte que intenta desviar Paulo Lima, con tanta mala fortuna que bate a su propio arco. Luego del tanto inaugural, el cuadro local estuvo cerca de otra conquista, especialmente cuando utilizaba los centros como arma de ataque, pero el 1-0 no se modificó.
En el segundo acto, cuando parecía que Triqui tenía controlado el compromiso, un zapatazo de Víctor Dávalos se convirtió en un golazo para el empate de los barriojarenses.