Es hoy. Puede ser el de la gloria o la decepción. Lo cierto es que Olimpia está obligado a tumbar al gigante cuadro brasileño Flamengo, en una revancha de lujo que se jugará esta noche en el De f en sores del Chaco por los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
La ventaja la tiene el Mengao, que venció por la mínima diferencia en el partido de ida jugado en el Maracaná hace una semana, con aquel tanto de Bruno Henrique, en un partido que fue muy bien planteado por el Chiqui Arce y en el que el Franjeado también tuvo sus chances de marcar. El propio Arce fue categórico en afirmar que en este partido el equipo deberá jugar diferente y presionar más arriba para conseguir cuanto menos neutralizar esa ventaja mínima y luego intentar la hazaña de hacer suya la clasificación con otro tanto.
El estratega franjeado no tenía aún definido hasta ayer el equipo que alistará ante el actual campeón del certamen, que llegó a Asunción con la preocupación de tener en duda a su estelar figura, Gabriel “Gabigol” Barbosa, que sintió fuertes molestias en el pie tras la última práctica de ayer antes del viaje.
Olimpia llega al compromiso con el aditivo de su goleada 5-3 sobre Guaraní, por el torneo Clausura el pasado fin de semana, lo que elevó su confianza para este partido, mientras que por el contrario, Flamengo, segundo en el Brasileirao, perdió su racha de 11 invictos tras caer 3-0 ante Cuiabá.
ESTADIO A TOPE
El público franjeado también jugará su propio partido, teniendo en cuenta que ayer agotó totalmente las más de 32 mil entradas puestas a las venta, por lo que su respaldo y aliento será fundamental para que el equipo logre la ansiada remontada.
Además, buscará estimular al equipo con un mosaico gigante con leyendas alusivas al club.