Aunque en la Copa Libertadores le vaya bien al Olimpia, los malos resultados a nivel local ponen al límite y a prueba a su entrenador Diego Aguirre, quien en la Nueva Olla ante Cerro Porteño el próximo sábado (17:00) rendirá un examen final.
El descontento de la afición y parte de la dirigencia hacia la tarea del técnico uruguayo subió de tono, más todavía tras la derrota (0-1) en Villarrica ante Guaireña.
Siendo el campeón del último torneo casero, el Decano perdió toda chance de pelear por el título del Apertura, pero una victoria ante su clásico rival es impostergable para seguir sosteniendo el ciclo del adiestrador charrúa, quien está en la cuerda floja en la previa a su primer superclásico del fútbol paraguayo.
Hasta ahora lo mantiene frente al plantel la campaña de la Libertadores, donde concretó un triunfo de local y dos empates fuera de casa, con buenas chances de avanzar a los octavos de final.
A nivel local los números son catastróficos. Olimpia, que se encuentra lejos de los primeros lugares, en total registra 12 partidos con Diego Aguirre, cosechando 4 victorias, 4 empates y 4 derrotas, consiguiendo 16 puntos, de 36 posibles.
“El campeonato local es obvio que desde hace fechas, no era un campeonato para Olimpia. En la copa, el equipo buscó de una manera diferente y hace que no estemos con la misma activación en el torneo porque no tenemos posibilidades”, se excusó el DT.
Por otro lado, se aguardará por la recuperación del arquero Gastón Olveira, baja ante Guaireña por chikungunya. De no mostrar mejorías, Juan Espínola se mantendrá como titular. Uno de los que retorna es Richard Ortíz, capitán y pieza clave en el Franjeado, ausente en el último partido por un desgaste importante en el duelo por Libertadores.
PIDE PISTA
Ante la falta de goles en el equipo, el juvenil Allan Wlk tendría grandes chances de ir al banco en el superclásico. El delantero viene de convertir un doblete en Reserva ante Guaireña, juego en el que Olimpia se impuso 3-1.