• Por Hernán Penayo.
  • Nación Media.

Marcelo Pérez, goleador del tor­neo Apertura y pieza clave en el Sportivo Luqueño, habló del gran momento que atraviesa en lo personal. El delantero de 21 años también se refirió a la importancia de sus familia­res en su corta carrera, que se encuentra en ascenso, el sueño de la selección, sus objetivos a futuro y otras cuestiones.

“La verdad que uno trabaja para esto y gracias a Dios se me están dando las cosas. La familia influyó lo sufi­ciente, gracias a ella estoy donde estoy, muy agradecido por el apoyo constante que me brinda, somos una familia muy unida en realidad. No puedo pedir más”, valoró el atacante.

En cuanto a las cla­ves que hacen que el jugador pueda disfrutar del buen momento, remarcó: “Pasa mucho por el cuidado pleno y también por la con­fianza que me da el entre­nador Gustavo Florentín”, mencionó el futbolista, que tiene como ídolo dentro del club al capitán auriazul, Pablo Aguilar.

EL SUEÑO DE TODOS

Pérez, que tuvo sus inicios en el 16 de Agosto, ahí en su barrio, a los 7 años, dejó en claro los obje­tivos que se pone, ya sea a corto o largo p l a z o . " U n o s iem­pre tra­baja pensando en una transferencia inter­nacional y como el sueño de todos, creo que es llegar a la selección paraguaya. Estoy trabajando para eso”, enfa­tizó.

No obstante, como meta inmediata quiere alzar el título este año: “Ahora me gustaría salir campeón con Luqueño”, agregó.

Acerca de los delanteros que admira y el tanto que más le gustó hasta ahora, señaló. “A nivel local, Roque Santa Cruz, e internacional me gusta mucho Karim Ben­zema. La verdad que todos los goles grité, y el que más me gustó fue contra Nacio­nal”, expresó.

EN SUS RATOS LIBRES

“La verdad que en mis ratos libres me gusta mucho ver series o películas, también disfrutar con amigos, pero paso más tiempo con mi familia”, recalcó.

Sobre sus actividades en estos días santos, dejó en claro que la familia respeta la tradición paraguaya. “La Semana Santa la pasamos por casa siempre, somos de seguir la tradición de preparar chipas”, añadió sobre su talento oculto.

MAYOR ALEGRÍA Y TRISTEZA

“Hasta ahora mi mayor alegría fue mi debut con goles en Primera División, obviamente la mayor tristeza cuando descendimos. Realmente fue muy triste ver al club de mis amores descender; pero también una alegría inmensa de volver a Primera, y que no para hasta hoy día”.

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