- Doha, Catar. AFP.
Neymar necesita subir siete escalones para ingresar al olimpo donde lo aguardan Pelé, Romario, Ronaldo y Ronaldinho. La dura Serbia, hoy en Doha, el primer peldaño del “10″ y Brasil rumbo al hexacampeonato mundial.
La labor ante un rival conocido, al que vencieron 2-0 en la fase de grupos de Rusia 2018, no parece fácil: los serbios cargan en su mochila el haber enviado a la repesca al Portugal de Cristiano Ronaldo.
Y con el precedente del batacazo de Arabia Saudita sobre la Argentina de Lionel Messi (2-1) el martes, no hay margen para confiarse.
Ese juego “sirve como análisis, como reflexión. No hay grandeza ni facilidades mayores o menores”, afirmó ayer miércoles el seleccionador brasileño, Tite.
Sin embargo, la seleção se ha ganado a pulso el mote de favorito para ganar el trofeo, luego de dominar el clasificatorio sudamericano y arrastrar una imbatibilidad de 15 partidos (12 victorias, siete de ellas en línea, y tres empates).
“Pasamos por momentos difíciles, pero los superamos. Dolió mucho perder los mundiales de 2014 y 2018, pero ahora llegó nuestra oportunidad”, aseguró el atacante Richarlison.
En la llave H, los focos siguen apuntando a Ronaldo, en crisis con el Manchester United. El futuro del cinco veces Balón de Oro, de 37 años, ha contaminado la preparación del partido entre los lusos y Ghana, resucitada por Otto Addo. Ambiciosa, Portugal está plagada de talento en todas las líneas. Pero esta competición no le ha sonreído históricamente.