Doha , Qatar. AFP.
El astro argentino Lionel Messi admitió que su selección ha sufrido “un golpe muy duro” al caer 2-1 ante Arabia Saudita, este en el primer partido de la Albiceleste en el Mundial de Qatar.
“Es un golpe muy duro. No esperábamos arrancar de esta manera. Confiábamos en arrancar bien, con los tres puntos, como veníamos hablando antes del partido. Eso hubiera dado tranquilidad, pero este grupo se destaca por la unión, por la fortaleza del grupo”, dijo Messi después del partido en el estadio de Lusail.
“Este grupo se destaca por la unión, por la fortaleza. Es momento de estar más unidos que nunca, volver a la base y al juego nuestro para intentar ganar”, apuntó.
Como capitán, Messi quiso calmar la decepción de los aficionados y afirmó que el plantel está ya concentrado en el segundo partido, el sábado contra México.
“Es momento de estar unidos, de pasar página, de no pensar más en esto que pasó. Sí (es momento) para sacar reflexiones, las cosas positivas, y para corregir lo que hicimos mal y pensar en México. Siempre dijimos que íbamos a ir a ganar todos los partidos y ahora más que nunca”, dijo.
Sobre el partido ante Arabia Saudita, admitió que su equipo tuvo más dificultades de las esperadas.
Por su parte, el rey Salmán de Arabia Saudita anunció que hoy miércoles será día festivo en el país después de que el equipo saudita ganara un partido del Mundial de fútbol contra Argentina, según los medios estatales.
El monarca “ordena que el miércoles, sea festivo para todos los empleados de los sectores públicos y privados, así como para los estudiantes hombres y mujeres de todos los niveles educativos”, señaló el canal Al-Ekhbariya.
El partido comenzó bien para la selección argentina, con un tanto de penal de Lionel Messi (minuto 10), pero los sauditas dieron la vuelta al marcador gracias a Saleh Al-Sheri (48) y Salem Al-Dawsari (53).
Tras el pitido final, la capital, Riad, se llenó de celebraciones con aficionados formando círculos de baile improvisados y ondeando la bandera nacional.