Montenegro, Paiva, desde los doce pasos, y el “Pollo” Recalde marcaron en el triunfo decano. Sanabria convirtió para el cuadro local.
- POR HERNÁN PENAYO
- Periodista Nación Media
Antes del minuto, Olimpia ya se puso en ventaja tras una gran jugada colectiva que lo finalizó Montenegro, de cabeza, tras el pase de Fernando Cardozo. El Decano fue sin dudas el absoluto dominador del juego. Gran primer tiempo de Sebastián Quintana, el volante fue el más claro a la hora de filtrar pases y recuperar pelotas. También fue importante para la conexión entre defensa y ataque.
Gran despliegue de Gómez, quien le dio el equilibrio. Zárate y Alcaraz sólidos, mientras que el punto más flojo fue el sector de Iván Torres. Chispazos de Silva, quien debió aparecer un poco más al igual que Derlis.
En tanto, el local tuvo a Nelson Sanabria como el más desequilibrante, el ofensivo le ganó las espaldas a Otálvaro para marcar el 1-1. Elvio Vera también se destacó. Muy poco de Rodríguez y Ferreira en la zona del mediocampo.
Luego del empate creció el tejedor y a Olimpia se lo notó muy nervioso, protestando la mayoría de las decisiones tomadas por el árbitro, quien junto a su asistentes se equivocaron en la previa del tanto del empate del Globo itagüeño, desatando el enojo de los franjeados.
En la complementaria siguió el dominio del equipo del Emperador, en tanto el local se paró bien atrás e intentó lastimar de contra. A seis del final, Paiva, de penal, le devolvió la sonrisa a la afición olimpista que llenó el estadio. Mientras que el “Pollo” Recalde decoró el marcador para que los de Para Uno sigan en lo más alto. El 12 suma cinco caídas al hilo.